Gratitud

La gratitud es un sentimiento de aprecio y agradecimiento por las bendiciones o los beneficios que hemos recibido. Si cultivamos una actitud de agradecimiento, tenemos más probabilidades de ser felices y espiritualmente fuertes. Debemos expresar nuestra gratitud a Dios con regularidad por las bendiciones que nos da y a otras personas por sus actos de bondad hacia nosotros.

El Señor prometió: “El que reciba todas las cosas con gratitud será glorificado”. La gratitud es una actitud que enaltece y exalta. Por lo general, la gente es más feliz cuando siente gratitud en el corazón. Cuando nos sentimos agradecidos es imposible estar amargados o ser rencorosos o malintencionados.

Debemos estar agradecidos por las maravillosas bendiciones que recibimos y por las grandes oportunidades que tenemos. Podemos estar agradecidos a nuestros padres, familiares, amigos y maestros. Debemos expresar gratitud a todos los que nos han ayudado de alguna manera.

Debemos dar gracias a nuestro Padre Celestial por Su bondad hacia nosotros reconociendo Su mano en todas las cosas, agradeciéndole por todo lo que nos da, guardando Sus mandamientos y sirviendo a los demás. En especial, debemos darle gracias por Su Hijo Amado, Jesucristo, por el gran ejemplo del Salvador, por Sus enseñanzas, por Su mano tendida para elevar y ayudar, y por Su Expiación infinita.