Mateo 14

“No temáis”

En muchos pasajes de las Escrituras el Señor nos dice que no temamos sino que tengamos fe en Él y en Sus propósitos (por ejemplo, véase Isaías 41:13; Marcos 5:36; D. y C. 6:34–36). Cuando actuamos con temor solemos cometer errores, pero cuando actuamos con fe tenemos la fortaleza para realizar mucho más de lo que podríamos realizar por nosotros solos. Busca las formas en las que se demuestra el temor o la fe en los relatos que contiene Mateo 14 y de qué modo el temor o la fe afectaron a las personas que se mencionan en ellos.

Otros relatos de lo que leas en Mateo 14

Mateo 14:1–12—Marcos 6:14–29.

Mateo 14:13–33—Marcos 6:30–52; Lucas 9:10–17; Juan 6:1–21.

Mateo 14:34–36—Marcos 6:53–56.

La comprensión de las Escrituras

Mateo 14

Compasión (vers. 14)—Sentimiento de amor y conmiseración que se tiene hacia quienes sufren penalidades o desgracias.

Contrario (vers. 24)—Opuesto.

Mateo 14:3–4—“No te es lícito tenerla”

Véase “La comprensión de las Escrituras” de Marcos 6:17–19 (pág. 46).

Mateo 14:22–33—Pedro anda sobre el mar

Después de haber narrado el relato que se encuentra en Mateo 14:22–33, el presidente Howard W. Hunter dijo:

“Yo creo firmemente que si nosotros individualmente, así como las familias, las comunidades y las naciones, al igual que Pedro, mantenemos la vista fija en Jesucristo también seremos capaces de caminar triunfantes sobre ‘las gigantescas olas de la incredulidad’ y de mantenernos ‘inmutables ante los crecientes vientos de la duda’. Pero si apartamos los ojos de Aquel en quien debemos creer —como es tan fácil que nos suceda en medio de las tentaciones del mundo—, y fijamos la mirada en el poder y la furia de los elementos destructivos y horribles que nos rodean, en lugar de prestarle atención a Él, que puede ayudarnos y salvarnos, inevitablemente nos hundiremos en un mar de conflictos, sufrimientos y desesperanza.

“En los momentos en que sintamos que las inundaciones amenazan ahogarnos y que lo profundo del océano está a punto de tragar nuestra frágil embarcación llamada fe, ruego que tengamos siempre la disposición de escuchar, entre la tormenta y la oscuridad, las dulces palabras del Salvador del mundo: ‘¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!” (Mateo 14:27)” (“Un faro en un puerto de paz”, Liahona, enero de 1993, pág. 21).

El estudio de las Escrituras

Al estudiar Mateo 14, realiza la actividad A.

1. El andar sobre el agua

   Contesta las siguientes preguntas acerca de Mateo 14:22–33:

   1. ¿Qué estuvo haciendo Jesús mientras los discípulos estaban en la barca?

   2. ¿Cuál fue la primera reacción de los discípulos al ver a Jesús que caminaba sobre el agua hacia ellos?

   3. ¿Qué indica la respuesta de Pedro con respecto a él?

   4. ¿Qué dice Mateo acerca de por qué Pedro comenzó a hundirse?

   5. ¿Qué hizo Pedro cuando comenzó a hundirse?

   6. ¿Por qué puede la experiencia que tuvo Pedro simbolizar tus tentativas de venir a Cristo?