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Lucas 14: Lo que cuesta ser discípulos de Cristo


Lucas 14

Lo que cuesta ser discípulos de Cristo

El presidente Marion G. Romney, cuando era segundo consejero de la Primera Presidencia, dijo: “La invitación de Cristo a que seamos Sus discípulos es universal, y Él la extiende a todos. Su llamado y Su promesa dice: ‘Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar’ (Mateo 11:28)… Jesús no pone precio a Su invitación. Nefi cita al Salvador cuando dice: ‘Venid a mí, vosotros, todos los extremos de la tierra, comprad leche y miel sin dinero y sin precio’ (2 Nefi 26:25). No obstante, esto no significa que por el hecho de que no haya un precio no exista un costo. Existe un costo que debe ser pagado para llegar a ser discípulo de Cristo, [el cual] es un costo muy real. Es un costo de actuación y no un precio monetario” (“Discípulos de Cristo”, Liahona, febrero de 1979, pág. 51).

Cuando leas Lucas 14, busca lo que cuesta llegar a ser discípulo de Jesucristo.

La comprensión de las Escrituras

Lucas 14

Hidrópico (vers. 2)—Hinchazón o acumulación de líquido, lo cual es señal de enfermedad.

Se enaltece (vers. 11)—Exaltarse uno mismo; elevarse a mayor auge y dignidad.

Recompensado (vers. 12, 14)—Ser premiado.

Lucas 14:26–27—¿Debemos aborrecer a nuestros familiares?

El élder Bruce R. McConkie explicó: “[Jesús no quiso decir] aborrecer en el sentido de tener intensa aversión, lo cual es contrario a todo el espíritu y el tenor del Evangelio. Los hombres deben amar aun a sus enemigos y no digamos cuanto más a los de su propia carne y sangre. (Mateo 5:43–48.) Antes bien, el sentido y el significado de lo que dice Jesús es que los verdaderos discípulos tienen un deber para con Dios que tiene precedencia sobre cualquier obligación familiar o personal [véase también Mateo 10:37; 19:27, 29; D. y C. 103:28]” (Doctrinal New Testament Commentary, tomo I, pág. 503).

Lucas 14:28–33—“…¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos?”

Los que se unen a la Iglesia deben estar preparados para hacer los sacrificios necesarios en el Evangelio. Los conversos deben tener en cuenta esos “gastos” aun antes de bautizarse y dedicarse a seguir enteramente las enseñanzas de Jesús. Al verse enfrentado a los desafíos de un nuevo llamamiento, el presidente John Taylor dijo una vez: “Cuando me uní al mormonismo, lo hice con los ojos abiertos y conté los ‘gastos’. Lo miré como un trabajo de toda la vida y consideré que me había alistado en él no sólo por esta vida, sino también por la eternidad, y no deseaba echarme atrás, aun cuando estaba al tanto de mi ineptitud” (en B. H. Roberts, The Life of John Taylor, 1963, pág. 48).

El estudio de las Escrituras

Al estudiar Lucas 14, realiza dos de las actividades siguientes (A–C).

  1. ¿Cuál es el principio?

    Es importante que, cuando leas las Escrituras, te detengas y te preguntes: “¿Qué pregunta se contesta o qué problema se resuelve con lo que se enseña en estos versículos? Cuando leas Lucas 14:7–14, escribe por lo menos una pregunta importante que se conteste con lo que allí se enseña y, en seguida, escribe con tus propias palabras la respuesta a la pregunta.

  2. Anota las excusas

    La parábola que se encuentra en Lucas 14:15–24 se refiere a muchas personas que fueron convidadas a una gran cena.

    1. Dibuja en tu cuaderno la gráfica que figura a continuación. Anota las excusas que dieron los convidados que se mencionan en la parábola y, en seguida, anota las excusas que en la actualidad darían las personas y que sean semejantes a las de la parábola.

    Excusa de la parábola

    Excusa de la actualidad

    Lucas 14:18

    Lucas 14:19

    Lucas 14:20

    1. Resume el principio más importante de la parábola.

  3. Ten en cuenta lo que cuesta

    En Lucas 14:25–34 se mencionan algunas de las cosas que Cristo espera de Sus discípulos.

    1. Lee esos versículos y anota todas las cosas que encuentres en ellos y que Cristo espera de Sus discípulos.

    2. ¿Por qué, consideras tú, que el Salvador desea que nos sacrifiquemos tanto para seguirle?

    3. ¿Qué cosas específicas podrías hacer tú para seguir esas enseñanzas?

    4. ¿Qué bendiciones crees que recibirán los que sean discípulos de Cristo?