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Lucas 16: El prepararse para presentarse ante Dios


Lucas 16

El prepararse para presentarse ante Dios

En las parábolas de Lucas 15 se pone de relieve lo mucho que el Señor ama al pecador y el regocijo que siente cuando alguien que se “había perdido” resuelve arrepentirse. Las parábolas y las enseñanzas que se encuentran en Lucas 16 incrementan esos conceptos al recordarnos por qué es importante volver hacia el Señor antes del juicio.

La comprensión de las Escrituras

Lucas 16

Mayordomo (vers. 1–3)—Siervo.

Mayordomía (vers. 2–4)—Responsabilidad.

Riquezas injustas (vers. 9, 11, 13)—Riquezas del mundo.

Abominación (vers. 15)—Iniquidad.

Seno de Abraham (vers. 22)—El mundo de los espíritus y, más precisamente, el paraíso.

Hades (vers. 23)—Prisión espiritual.

Lucas 16:1–15—¿Por qué empleó el Señor el ejemplo del mayordomo infiel en esta parábola?

Jesús no dice que debamos ser tramposos como ese mayordomo, sino que enseña que aun el hombre cuya vida se centre en el dinero sabe planear para el futuro: la vida venidera. Cuánto más deben planear para el futuro, o sea, la vida venidera, los que comprenden las cosas de Dios. Los codiciosos fariseos aparentaban ser seguidores de Dios, pero prestaban más atención a la obtención de lo que ofrece el mundo.

Lucas 16:14–23—“…los fariseos… se burlaban de él”

El profeta José Smith hizo varios cambios inspirados en este texto, el cual se encuentra en TJS, Lucas 16:16–23. Esos cambios realzan nuestro entendimiento de (1) la iniquidad descarada de los fariseos, (2) la forma directa en que el Salvador los reprendió y (3) los pecados específicos de que eran culpables los fariseos, lo cual a su vez llevó a las enseñanzas y a la parábola dirigida a ellos y que se encuentra en Lucas 16:18–31.

El estudio de las Escrituras

Al estudiar Lucas 16, realiza la actividad A.

  1. Vuelve a redactar una parábola con tus propias palabras

    Escoge la parábola del mayordomo infiel (véase Lucas 16:1–14) o la parábola del rico y Lázaro (véase Lucas 16:19–31) y haz lo siguiente:

    1. Lee el primer versículo de la parábola.

    2. Vuelve a escribir ese versículo con tus propias palabras.

    3. Sigue haciendo lo mismo con cada uno de los versículos de la parábola.