Seminarios e Institutos
Colosenses 1-4: Una amonestación en contra de las enseñanzas falsas


Colosenses 1–4

Una amonestación en contra de las enseñanzas falsas

El profeta José Smith enseñó que para ser salvos debemos creer en Dios y tener “un concepto correcto de Su carácter, perfecciones y atributos” (“Lectures on Faith”, 1985, pág. 38). Por lo tanto es importante conocer la verdad y guardarse de enseñanzas y doctrinas incorrectas. Cuando leas Colosenses, fíjate en las amonestaciones que hace Pablo y reflexiona en cómo se aplican a tu vida.

La comprensión de las Escrituras

Colosenses 1

Trasladado (vers. 13)—Llevado.

Preeminencia (vers. 18)—Tener el primer lugar.

Reconciliar (vers. 20)—Ganarse, reparar, arreglar.

En su cuerpo de carne, por medio de la muerte (vers. 22)—Por medio de la expiación de Jesucristo.

Administración (vers. 25)—Responsabilidad, tarea.

Colosenses 1:25–29—¿Cuál es el “misterio que había estado oculto desde los siglos y edades”?

El “misterio que había estado oculto desde los siglos y edades” (Colosenses 1:26) es que Dios envió a Su Hijo, “el primogénito de toda creación” (Colosenses 1:15), al mundo y que mediante la expiación de Su Hijo todo el género humano puede volverse puro, sin mancha y ser salvo en Su presencia (véase Colosenses 1:20–23). Pablo da a conocer este misterio a todos los que deseen escuchar.

Colosenses 2

Rudimentos (vers. 8, 20)—Principios básicos.

Los decretos… preceptos (vers. 14, 20)—La ley de Moisés y sus reglamentos.

Clavándola en la cruz (vers. 14)—Por medio del sacrificio de Jesucristo, se cumplió la ley de Moisés.

Colosenses 2:16–19—Guardaos de las enseñanzas falsas

Pablo amonestó a los colosenses, diciéndoles que no se movieran del Evangelio que se les había enseñado. Los judíos cristianos que deseaban que los miembros gentiles viviesen de acuerdo con la ley de Moisés andaban diseminando doctrinas falsas (véase Colosenses 2:16–17). Esos conversos judíos estaban estableciendo normas estrictas acerca de la clase de alimentos que se les permitía consumir a los cristianos y de las festividades que se les permitía celebrar. Además, algunos santos habían llegado a adorar ángeles y a enseñar que los ángeles tenían poder para contestar las oraciones (véase Colosenses 2:18–19). Esa doctrina falsa disminuía el lugar que ocupa Jesucristo en el plan de salvación. Pablo recuerda a los colosenses que sólo podían alcanzar la salvación por medio de Cristo, puesto que Él es preeminente en el plan.

Colosenses 3

Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros (vers. 5)—Elevaos por encima de las tendencias mundanas.

Pasiones desordenadas (vers. 5)—Afectos incontrolados.

Soportándoos (vers. 13)—Sosteniéndoos.

No exasperéis (vers. 21)—No irritéis, enfurezcáis, deis motivo de enojo grande.

Colosenses 4

Los de afuera (vers. 5)—Los que no son miembros de la Iglesia.

Redimiendo (vers. 5)—Valiéndose de toda oportunidad para hacer el bien.

Sal (vers. 6)—Sabiduría.

El estudio de las Escrituras

Al estudiar Colosenses 1–4, realiza dos de las actividades siguientes (A–D).

  1. Escribe tu testimonio de Jesucristo

    ¿Cuánto sabes en realidad acerca de Jesucristo? Lee Colosenses 1:13–22 y anota los nombres, los títulos y las expresiones que emplea Pablo para describir al Salvador. Escribe en un párrafo un resumen de tu testimonio de esas cualidades de Jesucristo.

  2. ¿Qué piensas tú?

    A continuación aparecen varias declaraciones que representan conceptos falsos. Escribe lo que consideres que esté mal acerca de cada concepto.

    1. No importa qué películas veas; después de todo no son más que películas.

    2. La decisión referente a cuándo se puede comenzar a salir con una persona del sexo opuesto debe ser individual.

    3. La Iglesia es aburrida y alguien tiene que hacerla más fascinante.

    Lee Colosenses 2:1–12 y escribe lo que podría servirte de ayuda para evitar ser engañado por enseñanzas falsas.

  3. Vestíos

    Pablo enseñó a dejar, o sea, a despojarse de ciertas características negativas y a vestirse o revestirse de otras mejores para así nacer de nuevo. Haz dos columnas y titula una Dejad/despojaos de y la otra, Vestíos/revestíos. Cuando leas Colosenses 3:1–14, anota en la columna correspondiente lo que debas dejar y aquello de lo que debas vestirte.

  4. Los asuntos familiares sí importan

    El presidente Spencer W. Kimball nos recordó: “La familia es la unidad básica del reino de Dios sobre la tierra. La Iglesia no puede ser más firme que las familias que la integran”(The Teachings of Spencer W. Kimball, págs. 331–332). Lee Colosenses 3:15–21 y anota cinco conceptos que servirían para que las familias fuesen una parte más firme del reino de Dios.