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Lección 118: 3 Nefi 6–7


Lección 118

3 Nefi 6–7

Introducción

Después de ser librados milagrosamente de los ladrones de Gadiantón, los nefitas disfrutaron de paz por unos tres años. Pero surgieron entre el pueblo el orgullo, la distinción de clases y las persecuciones. Aunque algunos permanecieron fieles al Señor, muchos entraron en combinaciones secretas, y por causa de ellas, fue asesinado el juez superior y se derrocó el gobierno de los nefitas. Los del pueblo se dividieron en tribus y nombraron sus propios líderes. Nefi ministró al pueblo con poder y con gran autoridad.

Sugerencias para la enseñanza

3 Nefi 6:1––18

Después de un periodo de prosperidad, los nefitas se llenan de orgullo y la Iglesia se deshace

Escriba las siguientes preguntas en la pizarra antes de que comience la clase: Pida a los alumnos que las contesten y que expliquen sus respuestas.

¿Es posible que alguien sea…

rico y a la vez humilde?

pobre y a la vez lleno de orgullo?

educado y a la vez humilde?

sin educación y a la vez lleno de orgullo?

Anime a los alumnos a seguir pensando en estas preguntas al estudiar 3 Nefi 6. Haga un resumen de 3 Nefi 6:1–9; para ello, explique que después de que los nefitas y los lamanitas derrotaron a los ladrones de Gadiantón, establecieron la paz en la tierra y comenzaron a prosperar. Pero después de poco tiempo, vieron amenazadas la paz y la prosperidad.

Pida a un alumno que lea 3 Nefi 6:5, 10–12 en voz alta y diga a la clase que averigüe lo que comenzó a poner en peligro la paz y la prosperidad del pueblo.

  • ¿Qué comenzó a suceder que puso en peligro la paz y la prosperidad del pueblo?

  • ¿Han visto que la acumulación de riquezas o de conocimiento genere problemas similares en su escuela, comunidad o país? Si es así, ¿de qué forma?

Trace una línea vertical en el centro de la pizarra para formar dos columnas. En la parte superior de una columna escriba la palabra Orgullosos y en la parte superior de la otra escriba Humildes. Pida a los alumnos que escudriñen 3 Nefi 6:13–14 y que busquen las palabras y las frases que describan cómo respondió el pueblo cuando comenzaron a dividirlos las riquezas y el conocimiento. (Tal vez tenga que explicar que injuriar significa criticar a alguien con enojo o maltratarlo con palabras.) Cuando los alumnos terminen de leer, dígales que escriban en la columna correspondiente de la pizarra las palabras o frases que hayan encontrado.

  • ¿Qué evidencia encuentran en 3 Nefi 6:13 de que algunos de los que eran perseguidos por los orgullosos también respondían con orgullo?

  • ¿Por qué piensan que el devolver “injuria por injuria” (o crítica por crítica) es una manifestación de orgullo?

  • ¿Qué les impresiona acerca de la forma en que respondieron en esa ocasión los lamanitas convertidos?

  • ¿Qué principios podemos aprender de 3 Nefi 6:13–14? (Es posible que varíen las respuestas de los alumnos, pero deben reconocer el siguiente principio: Podemos escoger ser humildes y fieles sin importar cuáles sean nuestras circunstancias.)

Remita a los alumnos a la columna de la pizarra que contiene la lista de respuestas de humildad. Haga las siguientes preguntas:

  • ¿Qué podemos hacer para permanecer humildes y fieles en cualquier circunstancia? (Escriba las respuestas de los alumnos en la pizarra en la columna titulada Humildes.)

  • Piensen en alguna persona que ustedes consideren que sea un buen ejemplo de escoger ser humilde y fiel a pesar de las circunstancias. ¿Por qué es esa persona un ejemplo de humildad?

Explique que debido a que la mayoría de los nefitas no se arrepintieron del orgullo, su situación empeoró. Pida a algunos alumnos, por turno, que lean en voz alta 3 Nefi 6:15–18. Diga a la clase que siga la lectura y que averigüe por qué el orgullo de los del pueblo permitió que Satanás influyera en ellos.

  • ¿Qué se nos enseña en estos versículos acerca de la relación entre el orgullo y el poder de Satanás de tentarnos? (Conforme vayan contestando los alumnos, ayúdeles a reconocer la siguiente verdad: Cuando somos orgullosos, permitimos que Satanás tenga más poder para tentarnos y para llevarnos a cometer más pecados. Si lo desea, anímeles a escribir este principio en sus ejemplares de las Escrituras, en su cuaderno o en su diario de estudio de las Escrituras.)

  • Según 3 Nefi 6:15–18, ¿qué palabras y frases describen el inicuo cambio de corazón que experimentaron esas personas por causa del orgullo? (Fueron “entregados… a ser llevados… doquier que [Satanás] quería llevarlos, y a cometer cualquier iniquidad que él deseaba”. Estaban en “un estado de terrible iniquidad” y “se rebelaban intencionalmente contra Dios”.)

  • ¿Por qué piensan que el orgullo afecta el grado en que Satanás puede influir en nosotros?

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Presidente Henry B. Eyring

Además de las respuestas que den los alumnos, considere pedir que un alumno lea la siguiente declaración del presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia. Pida a los alumnos que escuchen para detectar lo que el presidente Eyring nos advirtió que es uno de los peligros del orgullo.

“El orgullo ocasiona un ruido interior que nos impide escuchar la serena voz del Espíritu. Y muy pronto, en nuestra vanidad, no nos esforzamos siquiera por escucharla. De pronto llegamos a pensar que no la necesitamos” (“Oración”, Liahona, enero de 2002, pág. 16).

  • ¿Por qué es peligroso dejar de escuchar la voz del Espíritu? (Ayude a los alumnos a entender que cuando no hacemos caso de los susurros del Espíritu Santo, somos más susceptibles a las tentaciones del diablo.)

Remita a los alumnos de nuevo a la lista de respuestas de humildad en la pizarra. Pídales que seleccionen la respuesta de humildad que piensen que más les sirva personalmente. Deles unos minutos para escribir cómo pueden comenzar inmediatamente a aplicar esa sugerencia en la escuela o en el hogar.

3 Nefi 6:19–7:14

Las combinaciones secretas destruyen el gobierno de los nefitas, y el pueblo se divide en tribus

Copie en la pizarra la siguiente cronología:

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cronología

Divida la clase en cuatro grupos y a cada uno asígnele uno de los pasajes de las Escrituras que escribió en la pizarra. Pida a los alumnos que lean en silencio los pasajes asignados para averiguar los acontecimientos principales que ocurrieron entre los nefitas. Después de que hayan tenido suficiente tiempo para leer, pida a un alumno de cada grupo que bajo la sección correspondiente de la cronología escriba los acontecimientos principales del pasaje que se le asignó (otros alumnos de cada grupo le pueden ayudar). Cuando terminen, explique que la lista de acontecimientos muestra cómo las combinaciones secretas llevaron a la caída del gobierno nefita y a la división del pueblo en tribus.

Pida a algunos alumnos que se turnen para leer en voz alta 3 Nefi 6:27–30. Pida a la clase que siga la lectura para encontrar el propósito de las combinaciones secretas y su fundador. Cuando los alumnos hayan identificado al fundador de las combinaciones secretas (el diablo), pregunte:

  • ¿Qué palabras y frases describen los propósitos de las combinaciones secretas? (Entre las respuestas se podrían mencionar “combinarse contra toda rectitud”, “destruir” al pueblo del Señor, “desafiaron la ley y los derechos de su patria” y “la tierra… ya no fuese libre”.)

  • ¿Cómo escaparon de ser castigados los que asesinaron a los profetas? (Sus amigos y su familia, que también eran miembros de la combinación secreta, se unieron para ayudarles a mantener sus hechos en secreto y a evitar las consecuencias de sus hechos.)

  • Imagínense que tienen algunos amigos que quieren evitar las consecuencias de sus hechos. ¿Cómo pueden ayudarles a vivir el Evangelio y sus normas en lugar de tratar de evitar consecuencias?

Pida a algunos alumnos que se turnen para leer en voz alta 3 Nefi 7:1–8. Diga a la clase que siga la lectura y que averigüe el efecto de esas combinaciones secretas entre los nefitas. Explique que el diablo tienta a las personas a entrar en combinaciones secretas en un esfuerzo por destruir la rectitud y aumentar la iniquidad. Ayude a los alumnos a entender que los métodos y los motivos de las combinaciones secretas a menudo son sutiles y no siempre son fáciles de detectar. Anímeles a evitar asociarse con grupos o personas que tengan cualquier similitud con las combinaciones secretas.

3 Nefi 7:15–26

Durante una época en que pocos son fieles, Nefi continúa ministrando y algunos se convierten

  • ¿Cómo piensan que se hubieran sentido de haber vivido entre los nefitas después de que fue derrocado el gobierno? ¿Por qué?

  • ¿A quién hubieran acudido en busca de liderazgo y dirección?

Pida a algunos alumnos que se turnen para leer 3 Nefi 7:15–20 en voz alta. Diga a la clase que siga la lectura en busca de las razones por las que hubieran querido seguir a Nefi en esas circunstancias. Considere pedir que los alumnos hagan una pausa después de cada versículo o cada dos versículos para que usted les pida que expliquen por qué se habrían sentido inspirados a seguir a Nefi.

  • En esa ocasión, ¿cuál fue el mensaje de Nefi al pueblo? (Véase 3 Nefi 7:16.)

  • ¿En qué se parecen a Nefi los líderes de la Iglesia de nuestros días?

  • ¿Cuándo han visto a un líder de la Iglesia “[ministrar] con poder y gran autoridad”? (3 Nefi 7:17).

Pida a los alumnos que lean 3 Nefi 7:21–26 en silencio y que averigüen cómo fueron bendecidos los conversos por seguir a Nefi y arrepentirse de sus pecados. Pida a varios alumnos que compartan lo que hayan descubierto.

  • ¿Qué principios podemos aprender del ejemplo de los que se arrepintieron y siguieron a Nefi?

Los alumnos pueden compartir una variedad de verdades, pero deben reconocer el siguiente principio: Si nos arrepentimos y seguimos a los siervos del Señor, recibiremos la influencia del Espíritu Santo.

  • ¿Por qué es esencial el arrepentimiento para contar con la presencia del Espíritu Santo?

  • ¿Por qué piensan que el seguir a los siervos del Señor nos ayuda a ser más receptivos a la guía del Espíritu Santo?

Lea las siguientes palabras del presidente James E. Faust, de la Primera Presidencia:

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Presidente James E. Faust

“He llegado a la conclusión de que la guía espiritual depende en gran parte del estar en armonía con el Presidente de la Iglesia, la Primera Presidencia y el Quórum de los Doce, a todos los que se les sostiene… como profetas, videntes y reveladores. No sé cómo esperamos estar en plena armonía con el Espíritu del Señor si no estamos en armonía con el presidente de la Iglesia y con los demás profetas, videntes y reveladores” (“Llamados y escogidos”, Liahona, noviembre de 2005, pág. 53).

  • ¿Cuándo han sentido la influencia del Espíritu Santo por elegir ser obedientes a los siervos del Señor?

Anime a los alumnos a escribir las impresiones que hayan recibido acerca de lo que pueden hacer para aplicar las verdades que aprendieron hoy. Recalque el hecho de que aun cuando otros escojan vivir en oposición a los mandamientos del Señor, como fue el caso entre los nefitas, nosotros podemos escoger seguir humildemente a Dios y a Sus siervos escogidos.

Comentarios e información de contexto

3 Nefi 6:10–18. Los efectos del orgullo

En 3 Nefi 6:10–18, leemos acerca de la forma en que el orgullo puede causar divisiones entre la gente. El presidente Ezra Taft Benson enseñó que la tendencia a compararnos con otras personas puede ser una manifestación del orgullo. También advirtió que el orgullo afecta nuestras relaciones con Dios y con los demás:

“Los orgullosos hacen de toda persona su adversario al desdeñar el intelecto, opiniones, trabajos, posesiones, talento y otros valores mundanos de los demás. Según las palabras de C. S. Lewis: ‘El orgullo no encuentra placer en poseer algo, sino en poseerlo en mayor cantidad que el vecino… Lo que nos enorgullece es la comparación, el placer de colocarnos por encima de los demás. Una vez que desaparece el elemento de competencia, el orgullo deja de existir’(Mere Christianity, New York: Macmillan, 1952, págs. 109–110)…

“El orgullo afecta de manera adversa todas nuestras relaciones: la que tenemos con Dios y sus siervos, la de marido y mujer, de padres e hijos, de patrón y empleado, de maestro y alumno, y de toda la humanidad. El nivel de nuestro orgullo determinará la manera en que trataremos a Dios y a nuestros hermanos” (véase “Cuidaos del orgullo”, Liahona, julio de 1989, págs. 5, 7).

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