Ayudas para las Escrituras
1 y 2 Timoteo; Tito; Filemón


“1 y 2 Timoteo; Tito; Filemón”, Ayudas para las Escrituras: Nuevo Testamento, 2024

Ayudas para las Escrituras

1 y 2 Timoteo; Tito; Filemón

En las cartas conocidas como 1 Timoteo, 2 Timoteo y Tito, Pablo escribió instrucciones a los líderes de la Iglesia. Describió las cualidades de los obispos y los diáconos. Advirtió a los líderes de la Iglesia en cuanto a los tiempos difíciles que vendrían y aconsejó sobre cómo proteger a los santos. Enseñó a Timoteo que las Escrituras son la fuente de verdadera doctrina e instrucción. Cuando sintió que su vida estaba llegando a su fin, Pablo escribió sobre sus esfuerzos por perseverar fielmente hasta el fin. Tenía la certeza de que recibiría la vida eterna. Pablo también escribió a Filemón para instarlo a recibir a su esclavo Onésimo como un hermano en el Evangelio.

Recursos

Nota: La cita de una fuente no publicada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no implica que esta o su autor cuenten con el respaldo por la Iglesia ni que representen la posición oficial de la Iglesia.

Antecedentes y contexto

¿Quién era Timoteo?

Timoteo era uno de los amigos de más confianza de Pablo. Era hijo de un padre griego y una madre judía. Las Escrituras enseñan que su madre, Eunice, creía el testimonio de Pablo acerca de Jesucristo. La madre de Timoteo y su abuela, Loida, lo ayudaron a aumentar su fe y su amor por las Escrituras. Timoteo sirvió como compañero de misión de Pablo durante su segunda misión. Después, continuó siendo un fiel misionero y líder de la Iglesia.

Las cartas de Pablo a Timoteo y Tito son también conocidas como epístolas pastorales, debido a que contienen los consejos de Pablo a los pastores o líderes de la Iglesia. Pastor proviene de la palabra del latín utilizada para referirse a un pastor de ovejas.

¿Para quién se escribió 1 Timoteo y por qué?

Pablo escribió esta epístola mientras Timoteo servía como líder de la Iglesia en Éfeso. Algunos miembros parecen haber dudado de la capacidad de Timoteo porque era joven. Pablo le escribió para ayudarlo a entender sus deberes y darle ánimo. Es probable que esta carta se escribiera entre los años 62 y 66 d. C., mientras Pablo estaba en Macedonia.

Pablo sugirió pautas para ayudar a Timoteo a reconocer a candidatos dignos para prestar servicio como obispos o diáconos. Esas pautas ayudaron a poner de relieve la responsabilidad que tienen los líderes de la Iglesia de satisfacer las necesidades temporales y espirituales de los miembros. Pablo también hizo referencia a la falsa enseñanza del ascetismo: la creencia de que se puede lograr una mayor espiritualidad mediante la abstinencia estricta. Para contrarrestar esta y otras influencias heréticas, Pablo aconsejó a Timoteo que enseñara la sana doctrina.

1 Timoteo 1:4–6

¿Qué dijo Pablo acerca de los falsos maestros?

Tanto aquí como en su carta a Tito, Pablo advirtió en cuanto a los falsos maestros que fomentarían mitos (“fábulas”) y genealogías interminables. Un erudito de la Biblia escribió: “Cuando los Santos de los Últimos Días escuchan la palabra genealogía, piensan en la obra de historia familiar, pero eso no era lo que Pablo tenía en mente. Hacia el final de esta carta, Pablo instruyó a Timoteo que evitara ‘los argumentos de la falsamente llamada ciencia’ (1 Timoteo 6:20). La palabra griega traducida como ‘ciencia’ es gnosis, que significa ‘conocimiento’. Por lo tanto, a Pablo le preocupaba que algunos cristianos afirmaran y enseñaran conocimiento especial, lo que daba lugar a ‘argumentos’ o, en otras palabras, disputas. La advertencia contra los mitos y las genealogías puede ser una referencia a las historias y las genealogías especulativas de la literatura apócrifa judía (Tito 1:14; 3:9)”.

1 Timoteo 2:11–14

¿Cómo podemos entender lo que Pablo dijo acerca de las mujeres y de Eva?

No sabemos qué impulsó a Pablo a instruir a las mujeres a “aprend[er] en silencio” y a no “ejercer dominio sobre el hombre”. Esto pudo haber sido un esfuerzo para corregir un problema o disputa específicos en Éfeso, donde vivía Timoteo. Por lo tanto, no sería prudente tomar esta instrucción específica y darle una aplicación general.

Para respaldar su directiva con respecto a las mujeres, Pablo señaló que en el jardín, Eva transgredió cuando comió del fruto prohibido. En el versículo 14, la palabra griega traducida como “transgresión” (parabasis) se ha interpretado de varias maneras, entre ellas “sobrepasarse”. Es posible que Pablo estuviera diciendo que, así como Eva “se sobrepasó” cuando comió del fruto, algunas mujeres de Éfeso podrían haber sobrepasado sus límites.

Independientemente de la intención subyacente de Pablo, sus palabras han contribuido a una visión negativa del papel de Eva en la Caída. Tal visión no está justificada por las Escrituras de la Restauración. Por ejemplo, Lehi enseñó que la caída de Adán y Eva trajo consigo un mayor albedrío, familias y la oportunidad de tener gozo eterno. En el libro de Moisés, Adán y Eva testificaron de la importancia de la Caída en el Plan de Salvación. En su visión del mundo de los espíritus, el presidente Joseph F. Smith vio a “nuestra gloriosa madre Eva” entre los justos en el mundo de los espíritus.

Los profetas y apóstoles modernos confirman aún más la importancia de la función de Eva en la Caída. El presidente Dallin H. Oaks enseñó: “Eva fue quien traspasó los límites establecidos en el Edén a fin de iniciar las condiciones de la vida terrenal; su acción, fuera la que fuera, fue oficialmente una transgresión, pero en la perspectiva eterna fue un glorioso requisito para abrirnos los portales hacia la vida eterna”. El presidente Russell M. Nelson observó: “Fue nuestra gloriosa madre Eva —con su trascendental visión del plan de nuestro Padre Celestial— quien dio inicio a lo que llamamos ‘la Caída’. Su sabia y valiente elección, y el decidido apoyo de Adán, hicieron que avanzara el plan de felicidad de Dios”.

Teniendo en cuenta las Escrituras de la Restauración y las palabras de los profetas y apóstoles modernos, tenemos motivos para regocijarnos en la función que desempeñó Eva en hacer avanzar el Plan de Salvación del Padre Celestial.

Los profetas de los últimos días han enseñado que la voz y el liderazgo de las mujeres son vitales para la obra de salvación del Señor. Dirigiéndose a las mujeres de la Iglesia, el presidente Russell M. Nelson enseñó: “Necesitamos de su fortaleza, su conversión, su convicción, su capacidad para dirigir, su sabiduría y sus voces. ¡El Reino de Dios no está completo, ni puede estarlo, sin las mujeres que hacen convenios sagrados y los guardan; mujeres que pueden hablar con el poder y la autoridad de Dios!”.

1 Timoteo 3:1–7

¿Qué función desempeñaba un obispo en la Iglesia primitiva?

En 1 Timoteo 3:1, Pablo se refirió al oficio, o cargo, de obispo. En este pasaje, el término “obispo” se refiere a una persona que supervisa una congregación. Pablo proporciona aptitudes y consejos para aquellos que sirven como obispos. Por medio de las Escrituras de la Restauración, aprendemos que obispo es un oficio al que se es ordenado en el Sacerdocio Aarónico.

1 Timoteo 3:8–13

¿Qué función desempeñaban los diáconos en la Iglesia primitiva?

La palabra diácono proviene de una palabra griega que significa “siervo” o “ministro”. Parece ser que el oficio de diácono era un oficio preparatorio, porque Pablo no prohibía que “un neófito” (un converso reciente) fuera llamado a ser diácono, pero sí prohibía que un neófito fuera llamado a ser obispo. Otros requisitos para los diáconos eran similares a los de los obispos, incluido el requisito de que “los diáconos sean maridos de una sola mujer”. Por medio de las Escrituras de la Restauración, aprendemos que un diácono es un oficio al que se es ordenado en el Sacerdocio Aarónico.

1 Timoteo 4:8–16

¿Qué enseñó Pablo sobre el ejercicio físico?

Pablo enseñó que, en comparación con el desarrollo de atributos divinos, el ejercicio físico y el entrenamiento solo tienen valor a corto plazo. En otras palabras, si bien el entrenamiento físico tiene algo de valor, el entrenamiento espiritual nos bendice ahora y en la eternidad.

Este contraste habría sido especialmente relevante para los miembros de la Iglesia de Éfeso. El atletismo y los deportes eran muy valorados en la cultura romana. Al igual que hoy en día, la condición física podía ser sobrevalorada y llevada al extremo. Pablo enseñó que el estudio del Evangelio, el meditar y el desarrollo de dones espirituales deben tener mayor prioridad.

¿Para quién se escribió 2 Timoteo y por qué?

Pablo escribió esta epístola durante su segundo encarcelamiento en Roma. Escribió esta carta para fortalecer y alentar a Timoteo. Pablo creía que su vida estaba llegando a su fin y deseaba ver a Timoteo, a quien llamaba “amado hijo”. Al final de la carta, Pablo les pide a Timoteo y a Marcos que lo visiten y le lleven unos objetos que había dejado en Troas. Cronológicamente, 2 Timoteo parece ser la última carta de Pablo en el Nuevo Testamento.

2 Timoteo 2:3–6; 4:6–8

¿Qué enseñó Pablo al utilizar las metáforas del soldado, el atleta y el labrador?

Pablo usó las metáforas del buen soldado, el atleta victorioso y el labrador esforzado para ilustrar la necesidad de perseverar a fin de recibir la gloria eterna. Terminó la carta comparándose a sí mismo con un atleta y un soldado victorioso. Había “peleado la buena batalla”. La palabra griega traducida como “peleado” significa “luchar”. La palabra puede referirse a competir en un evento deportivo o participar en un conflicto militar. Debido a que había sido fiel hasta el fin, Pablo esperaba recibir una “corona de justicia”. La corona puede hacer referencia a una guirnalda de victoria que se daba a los vencedores en las competiciones deportivas de la antigua Grecia.

2 Timoteo 3:1–7

¿Qué enseñó Pablo acerca de los peligros de los últimos días?

En estos versículos, Pablo profetizó acerca de la iniquidad en los últimos días. Describió las condiciones como “peligros[a]s”. El siguiente cuadro proporciona ayuda con palabras o frases que pueden ser menos comprendidas por los lectores modernos:

Palabra o frase difícil

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Palabra o frase difícil

Amadores de sí mismos

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Egoístas

Palabra o frase difícil

Blasfemos

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Uso de lenguaje injurioso, hablar mal

Palabra o frase difícil

Sin afecto natural

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Sin amor, sin afecto

Palabra o frase difícil

Implacables

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Que no están dispuestos a entrar en convenio

Palabra o frase difícil

Sin dominio propio

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Débiles, sin autocontrol

Palabra o frase difícil

Crueles

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Brutales

Palabra o frase difícil

Aborrecedores de lo bueno

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Opuestos a la bondad, sin amor al bien

Palabra o frase difícil

Impetuosos

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Temerarios, imprudentes, irreflexivos

Palabra o frase difícil

Envanecidos

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Engreídos, vanidosos

Palabra o frase difícil

Mujercillas

Significado de la(s) palabra(s) griega(s)

Frívolas, débiles

2 Timoteo 3:6

¿Qué quiso decir Pablo con “mujercillas”?

Como parte de su advertencia con respecto a los últimos días, Pablo destacó a un grupo al que llamó “mujercillas” o mujeres “ingenuas”. El término griego significa “débiles o frívolas”. Al parecer, esas mujeres estaban influenciadas por falsos maestros en Éfeso. Esto puede ser una referencia social de la época de Pablo que ha perdido su contexto cultural en nuestros días y, por lo tanto, es difícil de entender.

¿Para quién se escribió Tito y por qué?

Tito nació de padres griegos y fue convertido al Evangelio por Pablo. Después de su conversión, Tito acompañó a Pablo durante su tercer viaje misional. Él ayudó a recolectar donativos para los pobres en Jerusalén y se le confió personalmente la tarea de lograr una mayor unidad entre las ramas de Corinto. Pablo le escribió a Tito para fortalecerlo en su asignación de dirigir la Iglesia en la isla griega de Creta. Tito enfrentó oposición de disidentes y de falsos maestros. Es probable que Pablo haya escrito la epístola a Tito después de escribir 1 Timoteo, entre los años 63 y 65 d. C.

Tito 1:12

¿Qué conllevaba llamar a alguien cretense?

Pablo señaló que el pueblo de Creta tenía mala reputación. Eran conocidos por obtener dinero de manera deshonesta. Los escritores antiguos informaron, de manera similar, que la gente de Creta era codiciosa. La palabra cretense llegó a significar persona deshonesta.

Tito 3:5

¿De qué manera somos renovados por el Espíritu Santo?

Pablo utilizó la palabra griega que significa “renacimiento” o “renovación” para referirse al don del Espíritu Santo. Al bautizarse, una persona entra en una relación de convenio con Cristo y se convierte en un nuevo ser. Así como a un recién nacido se le da un nombre, quienes son bautizados toman sobre sí el nombre de Jesucristo y son renovados por el Espíritu a medida que se esfuerzan por vivir como Él.

¿Para quién se escribió Filemón y por qué?

Filemón era un converso griego que podría haber vivido en Colosas. Dado que permitía que los miembros se reunieran en su casa, es posible que haya sido un líder de la rama colosense. Filemón era dueño de un esclavo llamado Onésimo, que había viajado hasta el lugar donde estaba Pablo, posiblemente como fugitivo, y Pablo lo había convertido a Jesucristo. Pablo envió a Onésimo de regreso con Filemón y le rogó que no castigara a Onésimo, sino que lo recibiera de vuelta “no ya como esclavo”, sino como “hermano amado”. Pablo escribió la carta a Filemón mientras estaba en prisión, aunque no especifica dónde. Es posible que la haya escrito en algún momento entre los años 55 y 59 d. C., aproximadamente.

mosaico que muestra a esclavos romanos

Mosaico que muestra a esclavos romanos

Filemón 1:10–17

¿Qué sabemos sobre la esclavitud en la época del Nuevo Testamento?

Las congregaciones a las que Pablo enseñó y a las que escribió a menudo estaban compuestas por amos y por esclavos. La esclavitud era una parte aceptada de la sociedad en la que vivían los judíos y cristianos de la antigüedad. Algunos esclavos eran liberados por sus amos o podían acumular riqueza para comprar su propia libertad. Algunos esclavos disfrutaban de oportunidades educativas y se convertían en asesores de confianza y socios comerciales de sus amos. Sin embargo, para la mayoría, la esclavitud era degradante y abusiva. Algunos de los colaboradores de Pablo habían sido esclavos.

Pablo no aprobó ni se opuso a la institución de la esclavitud en sus cartas. Alentó a los esclavos cristianos a obedecer a sus amos e instó a los amos cristianos a tratar a sus esclavos con bondad. Pablo creía que todos podían ser uno en Jesucristo, donde “no hay esclavo, ni libre”.

En la revelación moderna, el Señor ha declarado que “no es justo que un hombre sea esclavo de otro”.

Filemón 1:15–18

¿De qué manera iba en contra de las costumbres romanas la petición de Pablo a Filemón?

Es posible que Onésimo haya sido un esclavo fugitivo. Bajo la ley romana, los esclavos estaban a merced de sus amos. Los esclavos capturados podían ser marcados en la frente, golpeados, enviados a realizar trabajos forzados y obligados a usar collares de hierro.

Si Onésimo era un fugitivo, entonces lo que Pablo le pidió a Filemón fue que no le infligiera a Onésimo el castigo acostumbrado de un esclavo fugitivo. En cambio, Pablo alentó a Filemón a aceptarlo como hermano amado y consiervo de Jesucristo. El nombre de Onésimo significa “útil” o “beneficioso”. Pablo le explicó a Filemón que en el pasado Onésimo había sido inútil. Sin embargo, ahora, como discípulo de Cristo, Onésimo podía beneficiar tanto a Filemón como a Pablo al ayudar con la obra de salvación.

Más información

La función de las mujeres en la Iglesia

El obispo

Multimedia

Video

“He guardado la fe” (1:47)

1:48

“Los últimos días” (2:15)

2:15

“El oficio de obispo” (1:20)

1:20

Imágenes

Pablo dictando una epístola en prisión
Pablo escribe una epístola en prisión

Ilustración de Pablo en prisión escribiendo una epístola, por Paul Mann

Notas

  1. Véase 1 Corintios 4:17.

  2. Véase Hechos 16:1.

  3. Véanse 2 Timoteo 1:5; 3:14–15.

  4. Véase Hechos 16:3.

  5. Véanse Hechos 19:22; Filipenses 2:19.

  6. Véase Bible Dictionary, “Pauline Epistles”. Véase también D. Kelly Ogden y Andrew C. Skinner, Verse by Verse: Acts through Revelation, 1998, pág. 212.

  7. Véase 1 Timoteo 1:3.

  8. Véase 1 Timoteo 4:12.

  9. Véanse 1 Timoteo 1:3; Ogden y Skinner, Verse by Verse, págs. 212–213; Earl D. Radmacher y otros, editores, NKJV Study Bible, 3.ª edición, 2018, pág. 1821. Alrededor del año 62 o 63 d. C., Pablo fue liberado de su arresto domiciliario en Roma, que había durado dos años (véase Hechos 28:16–31).

  10. Véase 1 Timoteo 3.

  11. Véase 1 Timoteo 5.

  12. Véase 1 Timoteo 4:1–3.

  13. Véanse 1 Timoteo 1:3–4, 9–10; 4:1–6, 13, 16.

  14. Véanse Tito 1:143:9.

  15. La palabra griega que se usa aquí es mythos y significa “mito, historia, cuento; fábula inventada” (Tremper Longman III y Mark L. Strauss, editores, The Baker Expository Dictionary of Biblical Words, 2023, pág. 1110).

  16. Frank F. Judd Jr., “The Epistles of the Apostle Paul: An Overview”, en New Testament History, Culture, and Society: A Background to the Texts of the New Testament, editado por Lincoln H. Blumell, 2019, págs. 439–440.

  17. 1 Timoteo 2:11–12. La palabra griega traducida como “silencio” puede significar “quietud sin perturbaciones” (Frederick William Danker, editor, A Greek-English Lexicon of the New Testament and Other Early Christian Literature, 3.ª edición, 2000, pág. 440). Esto podría sugerir un comportamiento o actitud reverente que no causa perturbación. Es posible que la intención de Pablo haya sido alentar a las mujeres a apoyar a sus líderes y a abstenerse de dominar o tratar de usurpar la autoridad sobre los que son llamados por Dios (véase Ogden y Skinner, Verse by Verse, pág. 215). “Al explicar las funciones [de hombres y mujeres], Pablo a veces se ve influenciado por tradiciones culturales y prejuicios que no entendemos […]. La audiencia de Pablo entendió sus palabras desde su contexto cultural, y Pablo supone que están al tanto de las enseñanzas del Antiguo Testamento que fundamentan los conceptos. Los traductores no siempre han tenido el privilegio de conocer el contexto cultural o del Evangelio y, por lo tanto, se han insertado en el mensaje interpretaciones erróneas y preceptos de hombres” (Sherrie Mills Johnson, “Paul’s Teachings in 1 Corinthians on Women”, en Shedding Light on the New Testament: Acts–Revelation, editado por Ray L. Huntington, Frank F. Judd Jr. y David M. Whitchurch, 2009, pág. 149).

  18. Tal vez sea importante recordar que la Iglesia en los días de Pablo estaba plagada de desunión y contención. Eso incluía “la confusión y competencia en cuanto a las diferentes responsabilidades divinas que Dios había dado a los hombres y a las mujeres”. Él hizo un llamado a la unidad “haciendo hincapié en la necesidad de sumisión en todas las relaciones: ‘Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios, la cabeza de Cristo’ (1 Corintios 11:3)” (Camille Fronk Olson, “Submit Yourselves … as unto the Lord”, en Go Ye into All the World: Messages of the New Testament Apostles, 2002, pág. 112). Véase también Kenneth L. Barker y otros, editores, NIV Study Bible: Fully Revised Edition, 2020, pág. 2090, nota sobre 1 Timoteo 2:9–15.

  19. Por ejemplo, a los santos de Corinto, Pablo les habló de mujeres que oraban y profetizaban (véase 1 Corintios 11:1–5).

  20. Para entender la función que desempeñan las mujeres en la Iglesia hoy en día, debemos mirar a los apóstoles y profetas modernos (véase Temas y preguntas, “Las mujeres en la Iglesia”, Biblioteca del Evangelio). Cuando los Santos de los Últimos Días encuentran enseñanzas sobre el género que no se alinean con las enseñanzas actuales de la Iglesia, pueden ser caritativos con aquellos que vivieron en épocas y culturas diferentes. Podemos tener presente que algunas “declaraciones del Nuevo Testamento sobre la familia y el matrimonio pueden simplemente reflejar actitudes antiguas y no representan necesariamente enseñanzas esenciales del Evangelio” (Mark D. Ellison, “Family, Marriage, and Celibacy in the New Testament”, en Blumell, New Testament History, Culture, and Society, pág. 534).

  21. Ogden y Skinner, Verse by Verse, pág. 215.

  22. Véase 2 Nefi 2:17–25.

  23. Véase Moisés 5:10–11.

  24. Doctrina y Convenios 138:38–39.

  25. Dallin H. Oaks, “El gran plan de salvación”, Liahona, enero de 1994, pág. 85.

  26. Russell M. Nelson, “La participación de las hermanas en el recogimiento de Israel”, Liahona, noviembre de 2018, págs. 68–69.

  27. Temas y preguntas, “Caída de Adán y Eva”, Biblioteca del Evangelio.

  28. Véase Russell M. Nelson, “Una súplica a mis hermanas”, Liahona, noviembre de 2015, pág. 96.

  29. La palabra griega episkopos se puede traducir como “supervisor, obispo, líder de la iglesia” (Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1080, entrada 1985).

  30. Radmacher y otros, NKJV Study Bible, pág. 1842, nota sobre 1 Timoteo 3:1.

  31. “La [versión Reina-Valera] crea la frase ‘el cargo de obispo’ para traducir la palabra griega episcope. La misma palabra en Hechos 1:20 se traduce como ‘oficio’. Esto es significativo porque Hechos 1 no trata sobre un obispado de tres hombres y ni siquiera del oficio de obispo. El pasaje en cuestión, ‘tome otro su oficio’, es una interpretación de una línea del Salmo 69 que Pedro usa para introducir la necesidad de llamar a otro a los Doce para que ocupe el lugar de Judas. Cuando la palabra subyacente episcope se entiende correctamente en su sentido griego, se convierte en una descripción enteramente apropiada de la supervisión y del cuidado vigilante que los Doce ejercieron sobre toda la Iglesia” (Grant Underwood, “The ‘Same’ Organization That Existed in the Primitive Church”, en Go Ye into All the World, pág. 177).

  32. Guía para el Estudio de las Escrituras, “Obispo”, Biblioteca del Evangelio.

  33. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1062, entrada 1249.

  34. Véase 1 Timoteo 3:6.

  35. 1 Timoteo 3:12; compárese con el versículo 2.

  36. Véase Guía para el Estudio de las Escrituras, “Diácono”, Biblioteca del Evangelio.

  37. La palabra griega gymnasia usada en 1 Timoteo 4:8 se refiere al ejercicio y entrenamiento físicos (véase Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1061).

  38. Véase Richard N. Holzapfel y otros, Jesus Christ and the World of the New Testament, 2006, pág. 193.

  39. Véase 1 Timoteo 4:13–15.

  40. Véase 2 Timoteo 1:16–17; véase también Guía para el Estudio de las Escrituras, “Timoteo, epístolas a”, Biblioteca del Evangelio.

  41. Véase 2 Timoteo 4:6.

  42. 2 Timoteo 1:2; véase también 1 Timoteo 1:2.

  43. Véase 2 Timoteo 4:9–13.

  44. “Aunque no está registrado en el Nuevo Testamento, la tradición cristiana primitiva es que Pablo fue absuelto en su primer juicio, viajó con éxito a España y luego, finalmente, fue encarcelado en Roma de nuevo y juzgado por segunda vez. El contexto de 2 Timoteo parece ser el segundo encarcelamiento de Pablo en Roma, en espera del juicio. Por lo tanto, la segunda carta de Pablo a Timoteo es probablemente la última carta que tenemos del apóstol” (Frank F. Judd Jr., “The Epistles of the Apostle Paul”, pág. 441).

  45. Véase 2 Timoteo 2:3–6.

  46. 2 Timoteo 4:7.

  47. La palabra significa “contender por un premio; luchar; esforzarse con fervor; luchar contra adversarios, dificultades, peligros. Este verbo describe el esfuerzo por prevalecer o salir victorioso. Por lo tanto, se puede utilizar para referirse a luchas espirituales [o] competencias deportivas” (Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 305).

  48. 2 Timoteo 4:8.

  49. Véase Radmacher y otros, NKJV Study Bible, pág. 1836, nota sobre 2 Timoteo 2:3–6.

  50. 2 Timoteo 3:1.

  51. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1153, entrada 5367.

  52. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1057.

  53. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1053.

  54. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1053.

  55. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1040, entrada 193.

  56. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1045, entrada 434.

  57. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1055.

  58. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1129.

  59. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1150.

  60. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1060, entrada 1133.

  61. 2 Timoteo 3:6, New King James Version y New International Version.

  62. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 1060, entrada 1133.

  63. Véanse 1 Timoteo 5:13–15; Barker y otros, NIV Study Bible, pág. 2136, nota sobre 2 Timoteo 3:6.

  64. Véase Richard N. Holzapfel y Thomas A. Wayment, Making Sense of the New Testament, 2010, pág. 438; véase también Catherine Gines Taylor, “Women and the World of the New Testament”, en New Testament History, Culture, and Society, pág. 528.

  65. Véase Gálatas 2:3.

  66. Véanse 2 Corintios 2:12–13; 7:5–7, 13–15; 8:6, 16–24.

  67. Véase 2 Corintios 8:6, 16–23.

  68. Véase 2 Corintios 7:5–15.

  69. Véanse Tito 1:10–11; 2:15; 3:10.

  70. Véanse Radmacher y otros, NKJV Study Bible, págs. 1842–1843; Barker y otros, NIV Study Bible, pág. 2140.

  71. Véase Tito 1:12. “Pablo está citando al poeta cretense Epiménides, que escribió estas palabras alrededor del año 600 a. C. Los cretenses eran considerados mentirosos en el mundo mediterráneo a tal punto que la expresión ‘cretanizar’ significaba mentir. Pablo estaba contrastando la reputación de los cretenses con la de Dios. El Señor era incapaz de mentir (véase el versículo 2)” (Radmacher, NKJV Study Bible, pág. 1847, nota para Tito 1:12).

  72. La versión Reina-Valera de la Biblia utiliza la frase “ganancias deshonestas” (1 Timoteo 3:8). Véase Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, págs. 1040 y 1098.

  73. Véase Ogden y Skinner, Verse by Verse, pág. 220.

  74. Véase Radmacher y otros, NKJV Study Bible, pág. 1847, nota sobre Tito 1:12.

  75. Longman y Strauss, The Baker Expository Dictionary, pág. 659.

  76. Véanse 2 Corintios 5:17; Gálatas 6:15.

  77. Véase Mosíah 5:7.

  78. En Colosenses 4:9 se menciona a Onésimo, el esclavo de Filemón.

  79. Véase Filemón 1:2, 5.

  80. Véase Filemón 1:15, 18; véase también Radmacher y otros, NKJV Study Bible, pág. 2122.

  81. Filemón 1:16–17.

  82. Véase Filemón 1:1–9; véanse también Hechos 28:14–31; Harold W. Attridge y otros, editores, The HarperCollins Study Bible: New Revised Standard Version, Including the Apocryphal/Deuterocanonical Books, 2006, pág. 2032.

  83. “La esclavitud era legal en el Imperio romano, pero no se basaba en la raza. Las personas podían convertirse en esclavas si eran prisioneras de guerra o como castigo por un delito. Además, las personas podían venderse como esclavas si no encontraban una ocupación mejor para mantenerse” (Frank F. Judd Jr., “The Epistles of the Apostle Paul”, pág. 438).

  84. Véase Holzapfel, Jesus Christ and the World of the New Testament, pág. 248.

  85. Como Aquila y Prisca. Véase Holzapfel, Jesus Christ and the World of the New Testament, pág. 248.

  86. Véanse Efesios 6:5–9; Colosenses 3:22; 4:1; Filemón 1:10–17.

  87. Gálatas 3:28.

  88. Doctrina y Convenios 101:79.

  89. Véase Filemón 1:15, 18. Sin embargo, la carta en sí no especifica las circunstancias de la partida de Onésimo.

  90. Véase Keith R. Bradley, “Roman Slavery and Roman Law”, Historical Reflections, tomo XV, nro. 3, otoño de 1988, pág. 480.

  91. Véase Filemón 1:10, 16.

  92. Frank F. Judd Jr., “The Epistles of the Apostle Paul”, pág. 438.