Ayudas para las Escrituras
Santiago


“Santiago”, Ayudas para las Escrituras: Nuevo Testamento, 2024

Ayudas para las Escrituras

Santiago

Tras saludar a sus lectores, Santiago presentó algunos temas importantes de su carta, entre ellos el soportar las pruebas, el buscar sabiduría y el vivir de manera consecuente con las creencias que uno profesa. Santiago definió la “religión pura” como cuidar de los huérfanos y las viudas y guardarse sin mancha del mundo. Afirmó que los santos deben amar a su prójimo y manifestar su fe por medio de sus obras. Santiago ilustró la naturaleza destructiva del habla descontrolada. Advirtió a sus lectores que no debían hacerse amigos del mundo, sino resistir al diablo y acercarse a Dios. Santiago advirtió a los ricos que oprimen a las demás personas y aconsejó a los santos a perseverar con paciencia hasta la venida del Señor. Santiago exhortó a los enfermos a acudir a los élderes para que los ungieran con aceite.

Recursos

Nota: La cita de una fuente no publicada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no implica que esta o su autor cuenten con el respaldo por la Iglesia ni que representen la posición oficial de la Iglesia.

Antecedentes y contexto

¿Para quién se escribió la epístola de Santiago y por qué?

Generalmente se acepta que el autor de esta epístola fue Santiago, el hermano del Señor. Inicialmente, Santiago y sus hermanos no creyeron en el mensaje de Jesús. Más tarde, llegó a ser discípulo del Salvador y un líder de Su Iglesia. Santiago fue testigo presencial del Cristo resucitado.

Santiago es la primera de las siete cartas generales incluidas en el Nuevo Testamento. Se las conocen como cartas generales porque la intención de sus autores era llegar a una audiencia mayor que una sola congregación o región. Santiago dirigió su carta “a las doce tribus que están esparcidas”. Es posible que se enviara a los creyentes cristianos que salieron de Judea y vivían en Fenicia, Chipre y Antioquía de Siria.

Esta carta contiene breves explicaciones de los principios de una vida cristiana. Estas enseñanzas hacen hincapié en las acciones rectas por encima de la simple expresión de creencia. Santiago enseñó que la verdadera fe se manifiesta por medio de las obras o acciones.

Hay estrechos paralelismos entre el Sermón del Monte del Salvador, registrado en Mateo 5–7, y las palabras de Santiago. La aparición de las enseñanzas en esta carta demuestra que eran ampliamente conocidas entre los seguidores del Señor, incluso antes de que se incluyeran en el Evangelio de Mateo.

Algunos eruditos creen que Santiago murió como mártir en el año 62 d. C. Es posible que haya escrito esta carta en algún momento entre los años 40 y 60 d. C. Si fue escrita antes del año 50 d. C., la epístola de Santiago podría ser uno de los documentos más antiguos del Nuevo Testamento.

Santiago 1:5

¿Qué piensa Dios de que le hagamos preguntas?

En este pasaje, Santiago invita a los lectores a pedir sabiduría a Dios y señala que Dios responderá “abundantemente y sin reproche”. No seremos regañados ni reprendidos por preguntar, ni tampoco criticará Dios nuestras preguntas. Después de leer y reflexionar sobre esa invitación a “p[edir] a Dios”, el joven José Smith dijo: “Llegué a la conclusión de que tendría que permanecer en tinieblas y confusión, o de lo contrario, hacer lo que Santiago aconsejaba, esto es, recurrir a Dios. Al fin tomé la determinación de ‘pedir a Dios’, habiendo decidido que si él daba sabiduría a quienes carecían de ella, y la impartía abundantemente y sin reprochar, yo podría intentarlo”. El resultado de la determinación de José de preguntar fue una visión gloriosa. Dios el Padre y Jesucristo se aparecieron a José y respondieron sus preguntas.

Santiago 1:6–8

¿Por qué comparó Santiago a los que carecen de fe con una “ola del mar”?

Santiago comparó a la persona que carece de fe con una ola que es movida y echada de una parte a otra. Esa metáfora ilustra la inestabilidad espiritual que se produce cuando la fe es débil. Santiago también describió a alguien que carece de fe como una persona de “doble ánimo”. Esta descripción que proviene de una palabra griega que significa “dos almas”. Una persona de “doble ánimo” tiene una parte que cree en Dios y otra parte que es escéptica o no cree. A menos que elija la fe, esta persona no “recibirá cosa alguna del Señor”.

Santiago 2:1–10

¿Qué dijo Santiago sobre el favoritismo?

La Traducción de José Smith de Santiago 2:1 ofrece la siguiente aclaración: “Hermanos míos, no podéis tener fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo y hacer, al mismo tiempo, acepción de personas. Hacer “acepción de personas” significa mostrar favoritismo. Santiago condenó ese tratamiento parcial hacia los demás y, en particular, la discriminación contra los pobres a favor de los ricos.

Santiago 2:14–26

¿Qué enseñó Santiago acerca de la fe y las obras?

En estos versículos, Santiago se dirigió a los que hablaban de la fe como algo separado de las obras. Es posible que los miembros de la Iglesia malinterpretaran las enseñanzas del apóstol Pablo acerca de la fe y las obras. Pablo hizo hincapié en que la salvación venía por medio de la fe en Jesucristo y no por medio de las obras de la ley de Moisés. Al hablar de obras, Santiago no se refería a los rituales de la ley de Moisés. Más bien se refería a las obras justas que son consecuentes con las creencias de uno.

Santiago habló de una forma de fe que era pasiva y que no conducía a acciones rectas.

Por ejemplo, en Santiago 2:15–17, Santiago rechazaba la frase “fe [superficial] que no hacía ninguna diferencia en el comportamiento de uno”.

El presidente Jeffrey R. Holland escribió:

“Para nosotros, las obras de rectitud, lo que podríamos llamar un ‘discipulado dedicado’, son una medida inequívoca de la realidad de nuestra fe. Al igual que Santiago, el hermano de Jesús, creemos que la verdadera fe siempre se manifiesta en la fidelidad (véase Santiago 2, especialmente los versículos 14, 17–18, 20–26) […].

“Para nosotros, los frutos de esa fe incluyen el arrepentimiento, el recibir los convenios y las ordenanzas del Evangelio (incluido el bautismo), así como un corazón lleno de gratitud que nos motiva a abstenernos de toda impiedad, a tomar nuestra cruz cada día (véase Lucas 9:23) y a guardar Sus mandamientos, todos Sus mandamientos”.

Santiago 2:21–25

¿Cuáles fueron las obras de Abraham y Rahab?

Tanto Santiago como Pablo citaron al profeta Abraham del Antiguo Testamento como un ejemplo importante de fe y buenas obras. La buena disposición de Abraham para cumplir con el mandamiento de ofrecer a Isaac constituyó una validación de su fe en Dios.

Rahab era una ramera que vivía en Jericó en la época en que los ejércitos de Israel se acercaron a la tierra prometida. Ella sabía que el Señor había dividido el mar Rojo para que pasaran los israelitas. Ella creía que el Señor ayudaría a los israelitas a luchar contra su ciudad. Josué, el líder de Israel, envió dos espías a Jericó, pero fueron descubiertos y el rey de Jericó envió guardias para arrestarlos. Rahab escondió a los espías en su casa y luego los ayudó a escapar. Gracias a estas acciones, ella y su familia fueron salvados cuando el resto de Jericó fue destruido. Ella vivió con los israelitas el resto de su vida.

Santiago 3:1–12

¿Qué enseñó Santiago sobre la boca y la lengua?

un caballo con freno y brida

Ilustración por Paul Mann

Santiago advirtió a los santos acerca de los posibles daños que pueden provocar las palabras hirientes, el lenguaje inapropiado o el enojo. Para ayudar a los lectores a reconocer la importancia de controlar sus palabras, comparó la boca y la lengua con el freno de un caballo y el timón de un barco. Un freno es una pequeña pieza de metal que se coloca en la boca del caballo y que se conecta a la brida. El freno y la brida permiten al jinete dirigir hacia dónde va el caballo. El timón de un barco probablemente hace referencia a un pequeño remo de dirección en la parte trasera de un barco. De esta manera, un barco grande es guiado y dirigido por un timón pequeño. Santiago utilizó estos ejemplos para demostrar que nuestras palabras tienen poder. Nosotros determinamos si se usarán para el bien o para el mal.

Santiago 5:7–8

¿Qué son “la lluvia temprana y la tardía”?

Los agricultores del antiguo Israel esperaban pacientemente la lluvia “temprana” de la temporada de siembra, que ayudaba a que las semillas brotaran y crecieran. La “lluvia tardía” ayudaba a las plantas a madurar antes de la cosecha. Santiago utilizó esa imagen para enseñar que, al igual que el agricultor debe ocuparse del campo con paciencia y esperar a que lleguen las lluvias y, finalmente, la cosecha, los justos deben predicar el Evangelio con paciencia y nutrirse los unos a los otros, sabiendo que la salvación llegará finalmente.

Santiago 5:13–16

¿Cuál es el propósito de ungir con aceite?

El presidente Dallin H. Oaks explicó:

“En el Nuevo Testamento leemos que los Apóstoles de Jesús ‘ungían con aceite a muchos enfermos y los sanaban’ (Marcos 6:13). En el libro de Santiago se enseña la función de la unción en relación con los otros elementos de una bendición de salud por la autoridad del sacerdocio […].

“Cuando alguien ha sido ungido por la autoridad del Sacerdocio de Melquisedec, la unción es sellada por esa misma autoridad. Sellar algo significa afirmarlo, hacerlo vinculante para el propósito que se ha dispuesto. Cuando los élderes ungen a una persona enferma y sellan la unción, abren las ventanas de los cielos para que el Señor derrame la bendición que Él desea para la persona afligida […].

“La fe es esencial para sanar mediante los poderes del cielo. En el Libro de Mormón incluso se enseña que ‘si no hay fe entre los hijos de los hombres, Dios no puede hacer ningún milagro entre ellos’ (Éter 12:12)”.

Más información

Preguntar a Dios

  • David A. Bednar, “Pedir con fe”, Liahona, mayo de 2008, págs. 94–97

La religión pura

  • W. Christopher Waddell, “La religión pura”, Liahona, abril de 2015, págs. 26–29

La fe y las obras

Palabras y habla

Bendiciones del sacerdocio

Multimedia

Videos

“La fe y las obras” (8:25)

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“La lengua es un fuego” (2:28)

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