“1 y 2 Tesalonicenses”, Ayudas para las Escrituras: Nuevo Testamento, 2024
Ayudas para las Escrituras
1 y 2 Tesalonicenses
Pablo y sus compañeros de misión tuvieron éxito predicando al pueblo de Tesalónica. Finalmente, fueron expulsados de la ciudad y, un tiempo después de partir, Pablo se enteró de que los santos tesalonicenses habían permanecido fieles y estaban compartiendo el mensaje del Evangelio con otras personas. En su primera carta a los tesalonicenses, Pablo reiteró su sincera entrega a Dios y a la enseñanza del Evangelio. También dio respuesta a las preocupaciones de los santos sobre la Segunda Venida de Jesucristo. Más adelante, Pablo escribió una segunda carta a los santos tesalonicenses. Se escribió esta carta para corregir ideas falsas acerca de la Segunda Venida de Jesucristo.
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Nota: La cita de una fuente no publicada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no implica que esta o su autor cuenten con el respaldo por la Iglesia ni que representen la posición oficial de la Iglesia.
Antecedentes y contexto
¿Para quiénes se escribieron 1 y 2 Tesalonicenses y por qué?
Tesalónica era una ciudad vibrante que servía como centro de comunicaciones y comercio. Esta ciudad fue construida en un puerto natural del mar Egeo. Estaba conectada con otras ciudades por medio de una carretera principal. Debido a su ubicación, Tesalónica era una base natural para la propagación del Evangelio en Macedonia y Grecia.
Pablo y sus compañeros, Silas y Timoteo, establecieron la Iglesia en Tesalónica a principios de su segundo viaje misional. Sin embargo, los líderes judíos expulsaron a Pablo y a sus compañeros de la ciudad. Después de una breve estadía en Atenas, Pablo fue a Corinto, donde se le unieron nuevamente Silas y Timoteo.
Pablo envió a Timoteo de regreso a Tesalónica para ver cómo estaban los nuevos conversos. Las cartas de Pablo a los tesalonicenses, ambas escritas desde Corinto, eran en respuesta al informe de Timoteo. 1 Tesalonicenses fue escrita alrededor del año 51 d. C. y es posiblemente la más antigua de las cartas de Pablo.
Los temas principales de 1 Tesalonicenses son la Segunda Venida de Jesucristo y la naturaleza de la Trinidad. Además, en esta carta Pablo elogia y felicita a los santos tesalonicenses.
Su segunda epístola fue escrita poco tiempo después, alrededor del año 51 o 52 d. C., y tenía el objetivo de fortalecer la fe y tratar los malentendidos doctrinales. En ella, Pablo también profetizó acerca de una “apostasía” antes de la Segunda Venida del Señor.
¿Cómo reaccionaron Pablo y sus compañeros de misión ante los malos tratos?
En Tesalónica, la resistencia al mensaje del Evangelio provino tanto de judíos hostiles como de gentiles. Pablo señaló que en Filipos él y sus compañeros fueron tratados con afrenta. La versión Reina-Valera de la Biblia señala que respondieron a los malos tratos con valentía en medio de “gran oposición”. Esta frase no significa que Pablo fuera contencioso o conflictivo en su predicación; más bien implica que enseñó el Evangelio frente a la contención y la oposición. Otra traducción de la Biblia dice: “Pero aunque ya habíamos padecido y sido vituperados en Filipos, como sabéis, tuvimos valor en nuestro Dios para anunciaros el evangelio de Dios a pesar de la gran oposición”.
¿Cómo obstaculizó Satanás a Pablo?
Pablo no volvió a Tesalónica después de haber sido expulsado durante su segundo viaje misional. Dijo que no había podido regresar porque Satanás se “lo impidió”. Pablo no dio detalles sobre cómo Satanás le impidió regresar a Tesalónica. Sin embargo, sí sabemos que la persecución por parte de los judíos ya había forzado a Pablo a tomar muchos desvíos en sus labores misionales. En cuanto a la oposición a los siervos del Señor, el presidente Howard W. Hunter señaló: “Satanás siempre está presente y hará todo lo que pueda para obstaculizar, obstruir y derrotar”.
¿Qué enseña Pablo acerca de las relaciones sexuales?
En la época de Pablo, las relaciones sexuales fuera del matrimonio eran toleradas y aceptadas por muchos gentiles. Dado que la mayoría de los nuevos miembros de la Iglesia en Tesalónica eran gentiles, Pablo sintió que era necesario reforzar su comprensión de la conducta que se esperaba de ellos en cuanto al comportamiento sexual. Les enseñó que debían “apart[arse] de la fornicación”. Fornicación es una traducción de la palabra griega porneia y se relaciona con la inmoralidad sexual. Pablo también dijo a los santos que controlaran su cuerpo y no cedieran a las pasiones lujuriosas.
Con respecto a las normas de conducta sexual, el élder David A. Bednar declaró: “La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días tiene una única e inalterable norma de moralidad sexual: las relaciones íntimas son aceptables solo entre un hombre y una mujer en la relación matrimonial prescrita en el plan de Dios. Esas relaciones no son una mera curiosidad para explorar, un apetito que satisfacer, ni un tipo de recreación o entretenimiento que debe procurarse egoístamente […]. Somos agentes bendecidos con el albedrío moral y lo que nos define es nuestra herencia divina como hijos de Dios y no las conductas sexuales, las actitudes contemporáneas ni las filosofías seculares”.
1 Tesalonicenses 4:13–18; 5:1–11
¿Cuál fue el mensaje de Pablo sobre la Segunda Venida de Jesucristo?
En estos pasajes, y en otros del Nuevo Testamento, se utiliza la palabra griega parousia en referencia a la Segunda Venida de Jesucristo. En la cultura grecorromana de la época de Pablo, la palabra parousia describía la llegada de un gobernante o las “manifestaciones poderosas de un dios”. Por ejemplo, la llegada de un emperador romano a una comunidad se esperaba con grandes preparativos. El uso que hizo Pablo de esta palabra lo ayudó a hacer hincapié en la importancia de una adecuada preparación para el regreso de Jesucristo a la tierra.
Las enseñanzas de Pablo en 1 Tesalonicenses 4:13–18 indican que había cierta confusión entre los santos tesalonicenses en cuanto a la Segunda Venida de Cristo. Al parecer, algunos miembros de la Iglesia esperaban que el regreso del Señor fuera pronto. Surgieron preocupaciones cuando no sucedió de inmediato.
Aparentemente, a algunos les preocupaba que aquellos que habían fallecido recientemente no serían parte de la Segunda Venida del Salvador. También les preocupaba lo que les sucedería a los fieles que hubieran muerto cuando Jesucristo regresara.
Pablo enseñó que los que estén vivos cuando Jesucristo regrese no “tendrán ‘ventaja sobre’ […] los que han muerto, porque cuando Jesús vuelva, los que hayan muerto en la fe se levantarán y se encontrarán primero con Cristo. Entonces, después de esto, los que estén vivos podrán ser arrebatados para encontrarse con Jesús y todos estarán juntos de nuevo (ver 1 Tesalonicenses 4:16–17)”.
La preocupación de los santos tesalonicenses por la Segunda Venida del Señor parece haber motivado la segunda carta que Pablo les escribió. En 2 Tesalonicenses 2:1–12, Pablo indicó señales importantes que precederían al regreso del Salvador. También abordó “el comportamiento ocioso de algunos santos, cuya indolencia parece haber sido el resultado de una expectativa poco realista de una inminente Segunda Venida (véase 2 Tesalonicenses 3:6–15)”.
¿Por qué están mejor preparados los “hijos de luz” para la Segunda Venida de Jesucristo?
Pablo comparó la Segunda Venida de Cristo con la llegada inesperada de un ladrón en la noche. Jesucristo había utilizado esta analogía anteriormente y también se encuentra en las Escrituras modernas. La analogía ilustra que la Segunda Venida del Salvador será un acontecimiento repentino e inesperado para muchos.
Los discípulos de Jesucristo, que son los “hijos de luz”, verán las señales del regreso del Señor y no serán tomados por sorpresa.
¿Qué significa apagar el Espíritu?
Como parte de su consejo sobre cómo prepararse para la Segunda Venida de Jesucristo, Pablo advirtió a los santos diciendo: “No apaguéis el Espíritu”. Apagar se traduce de una palabra griega que significa extinguir, entorpecer o frustrar. “Apagar el Espíritu significa resistir Su influencia, como tratar de apagar una fogata. Una de las reglas fundamentales para caminar con Dios es que no debemos decir que no al Espíritu de Dios”.
¿Qué significa “examina[rlo] todo”?
La palabra griega traducida como “examinar” en la versión Reina-Valera de la Biblia significa poner a prueba o discernir. Pablo invitó a los santos tesalonicenses a que pusieran a prueba o “examina[ran] todo”, a que distinguieran entre el bien y el mal, y a que “ret[uvieran] lo bueno”.
¿Por qué mandó Pablo a los santos que se saludaran con un beso?
Un erudito de la Biblia escribió: “El mandato de Pablo de que los santos se saludasen unos a otros ‘con beso santo’ se habría considerado una señal de hermandad cómoda y familiar en su antiguo contexto mediterráneo, pero en el contexto cultural occidental de los Estados Unidos en la década de 1800, el Señor inspiró a José Smith a adaptar este mandato del Nuevo Testamento a ‘saludaos con salutación santa’, tal vez como una manera de aplicar este concepto a Su pueblo que vivía en una época y en un lugar distintos, donde los besos no se consideraban una forma cómoda de saludo en una comunidad eclesiástica”.
¿Qué enseñó Pablo acerca de la Apostasía?
Al igual que en su primera carta a los tesalonicenses, Pablo se refirió los malentendidos acerca de la Segunda Venida de Jesucristo. Explicó que antes de la Segunda Venida de Cristo habría una “apostasía”. “Apostasía” es la traducción de la palabra griega apostasia, que también puede significar “rebelión” o “motín”. Pablo hablaba de una lucha generalizada e intencional contra el Evangelio del Señor y Su Iglesia.
El presidente Russell M. Nelson enseñó lo siguiente:
“Antes de Su Crucifixión, el Señor Jesucristo estableció Su Iglesia, la cual comprendió apóstoles, profetas, setentas, maestros, etc. Y el Maestro envió a Sus discípulos a todo el mundo a predicar Su Evangelio.
“Con el paso del tiempo, la Iglesia que estableció el Señor cayó en la decadencia espiritual. Sus enseñanzas fueron modificadas y sus ordenanzas, cambiadas. Llegó la gran apostasía como lo había predicho Pablo, quien sabía que el Señor no vendría ‘sin que antes v[iniese] la apostasía’ (2 Tesalonicenses 2:3).
“Esa gran apostasía siguió el modelo que había puesto fin a cada una de las dispensaciones anteriores. La primera dispensación tuvo lugar en la época de Adán. Posteriormente, vinieron las dispensaciones de Enoc, de Noé, de Abraham, de Moisés y otras. Cada profeta tuvo el encargo divino de enseñar acerca de la divinidad y de la doctrina del Señor Jesucristo. En cada dispensación, esas enseñanzas tuvieron por objeto ayudar a las personas, pero la desobediencia de estas tuvo como resultado la apostasía. De ese modo, todas las dispensaciones anteriores estuvieron limitadas tanto con respecto al tiempo como al lugar. Estuvieron limitadas con respecto al tiempo debido a que cada una terminó en apostasía, y estuvieron limitadas con respecto al lugar ya que se restringieron a un segmento relativamente pequeño del planeta Tierra.
“Así vemos que era necesaria una restauración total. Dios el Padre y Su Hijo Jesucristo llamaron al profeta José Smith a ser el profeta de esta dispensación. Todos los poderes divinos de las dispensaciones anteriores debían restaurarse por conducto de él. Esta dispensación del cumplimiento de los tiempos no había de ser limitada en lo referente a tiempo ni a lugar, puesto que no terminaría en apostasía y llenaría todo el mundo”.
¿Quién es el “hijo de perdición”?
La Traducción de José Smith deja claro que Pablo se refería a Satanás en estos versículos. La palabra perdición proviene del latín perdere, que significa “destrucción”. Es un título que se le dio a Lucifer cuando fue expulsado de la presencia de Dios en la vida preterrenal. Todos los que siguieron a Satanás y se rebelaron contra Dios en la vida preterrenal fueron expulsados y se convirtieron en hijos de perdición. Pablo describió al “hombre de pecado” como alguien que “[se opone] y [se levanta] contra todo lo que se llama Dios”.
¿Por qué enviaría Dios poderosos engaños a los inicuos?
Pablo advirtió que aquellos que deliberadamente rechacen y se aparten de la verdad experimentarán un poderoso engaño. Sin el Espíritu Santo, creerán en una mentira. El profeta Alma describió cómo las personas pueden perder la luz del entendimiento: “El que endurece su corazón recibe la menor porción de la palabra; y al que no endurece su corazón le es dada la mayor parte de la palabra, hasta que le es concedido conocer los misterios de Dios al grado de conocerlos por completo. Y a los que endurecen sus corazones les es dada la menor porción de la palabra, hasta que nada saben concerniente a sus misterios”.
Más información
La Segunda Venida de Jesucristo
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Russell M. Nelson, “El futuro de la Iglesia: Preparar al mundo para la Segunda Venida del Salvador”, Liahona, abril de 2020, págs. 6–11
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Neil L. Andersen, “Venga tu reino”, Liahona, mayo de 2015, págs. 119–123
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Temas y preguntas, “Segunda Venida de Jesucristo”, Biblioteca del Evangelio
La Apostasía
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Temas y preguntas, “Apostasía”, Biblioteca del Evangelio
Multimedia
Imágenes
Segunda Venida
The Second Coming [La Segunda Venida], por Harry Anderson
He Comes Again to Rule and Reign [Él viene de nuevo a gobernar y reinar], por Mary R. Sauer
Christus Consolator [Cristo el Consolador], por Carl Heinrich Bloch
Videos
“La Apostasía y la Restauración” (1:44)
“Dispensaciones: La secuencia de apostasía y restauración” (6:55)