“Apocalipsis 6–14”, Ayudas para las Escrituras: Nuevo Testamento, 2024
Ayudas para las Escrituras
Apocalipsis 6–14
Como parte de su revelación, Juan tuvo una visión en la que vio que el Cordero de Dios abría los seis primeros sellos de un libro sellado. Registró profecías sobre acontecimientos importantes y preocupantes que ocurrirán justo antes de la Segunda Venida de Cristo. Vio a dos profetas que serían asesinados en Jerusalén y que resucitarían tres días y medio después. Juan describió la guerra en los cielos y los esfuerzos de Satanás por destruir a los seguidores de Jesucristo en la tierra. También profetizó sobre la restauración de la Iglesia del Salvador y la separación de los justos y los inicuos.
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Nota: La cita de una fuente no publicada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no implica que esta o su autor cuenten con el respaldo de la Iglesia ni que representen la posición oficial de la Iglesia.
Antecedentes y contexto
¿Qué sabemos sobre los primeros seis sellos?
El libro o rollo con siete sellos representa siete mil años de historia humana y cada sello representa mil años. Jesucristo fue el único ser digno de abrir cada sello. Después de abrirse cada sello, Juan tuvo visiones de acontecimientos de la historia de la humanidad. Un erudito observó: “Las imágenes de los sellos son símbolos que muestran un esquema general de cómo fluirá la historia, pero no deben tomarse de forma demasiado literal. En conjunto, muestran la tendencia general descendente de la humanidad que resultará en la gran batalla de los últimos días”.
El siguiente cuadro muestra el primer período de seis mil años y ofrece posibles interpretaciones de los símbolos que vio Juan.
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Sello |
Posibles interpretaciones |
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Primer sello (Apocalipsis 6:1–2) |
Por lo general, el color blanco simboliza la pureza. El arco, como arma, puede simbolizar la guerra. La corona puede simbolizar la victoria. El primer sello puede referirse a una época en la que se produjo “el mayor triunfo de la rectitud que el mundo haya alcanzado. Durante este período, Enoc y su pueblo pusieron los cimientos de Sion y la justicia estaba verdaderamente a la vanguardia”. |
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Segundo sello (Apocalipsis 6:3–4) |
El color rojo “sugiere que el jinete lleva la muerte a través de la violencia y el derramamiento de sangre”. En la mano del jinete hay una espada, que simboliza “la muerte violenta junto con toda la furia de la guerra y también conlleva la idea de autoridad para castigar las maldades”. El segundo sello puede referirse a la iniquidad y la violencia generalizadas de los días de Noé; esa iniquidad fue tan grande en esa época que el pueblo trató de matar al profeta Noé. |
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Tercer sello (Apocalipsis 6:5–6) |
El color negro simboliza “la agonía y la muerte debido a la pestilencia, el hambre, las enfermedades y la sequía”. La “balanza” se utilizaba en tiempos de grave hambruna para pesar el pan. Dos medidas de trigo alimentaban a un adulto por un día y costaban un denario. Un denario era el salario de un día, por lo que se requería un día completo de trabajo para pagar un día de comida. El tercer sello podría referirse a los días de Abraham, Isaac y Jacob, que se caracterizaron por la hambruna. |
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Cuarto sello (Apocalipsis 6:7–8) |
La palabra griega traducida como amarillo se utilizaba a menudo para describir a alguien que estaba enfermo o muerto. El Hades, que probablemente se refiere a la prisión espiritual, simboliza el lugar de los muertos. El cuarto sello parece referirse a la época de los imperios en guerra de Asiria, Egipto, Babilonia, Persia, Grecia y Roma. Por haber rechazado las advertencias de los profetas, los reinos de Israel y de Judá a menudo fueron víctimas de esos imperios conquistadores. Israel y Judá también lucharon entre sí, lo que resultó en la muerte de muchas personas. |
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Quinto sello (Apocalipsis 6:9–11) |
En su visión, Juan vio bajo un altar personas muertas por causa de su testimonio de Dios. En la época del Antiguo Testamento, los altares de la casa de Jehová se usaban para sacrificar animales y la sangre de esos sacrificios se utilizaba de diferentes maneras. Un erudito señaló: “En algunos rituales la sangre se recogía en un cuenco y se derramaba al pie del altar del sacrificio (véase Levítico 4 para encontrar algunos ejemplos). El derramamiento de la sangre sugiere un compromiso total y voluntario de vida hacia el Señor […]. Las almas que Juan vio bajo el altar habían dado libremente todo al Señor […], habían derramado sus vidas en el altar de Dios”. Muchos de los primeros cristianos, entre ellos casi todos los Doce Apóstoles originales, dieron su vida por el Evangelio de Jesucristo y se les dieron vestiduras blancas, que simbolizaban la pureza y eran “señal de su victoria moral y también la promesa [del Señor] de gloria eterna en el futuro”. |
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Sexto sello (Apocalipsis 6:12–17; 7:1–17) |
El sexto sello representa el tiempo anterior a la Segunda Venida de Jesucristo. Juan señaló siete acontecimientos que ocurrirán durante ese tiempo: habrá un terremoto, el sol se oscurecerá, la luna se volverá como sangre, caerán las estrellas, el cielo se abrirá como un pergamino, los montes y las islas se moverán de sus lugares y las personas buscarán esconderse. Acontecimientos similares se han registrado en otras partes de las Escrituras. Juan también se refirió a siete tipos de desastres naturales y a siete clases de personas que se esconderán. El número siete a menudo representa totalidad y podría indicar que ningún enemigo de Dios escapará de Su ira en los últimos días. |
¿Qué sabemos acerca de los cuatro ángeles y del ángel que subía de donde sale el sol?
El Señor reveló al profeta José Smith que es Dios quien envía a los cuatro ángeles que Juan vio en su visión. A esos cuatro ángeles se les ha “dado poder sobre las cuatro partes de la tierra, para salvar la vida y para destruir; son los que tienen el evangelio eterno para darlo a toda nación, tribu, lengua y pueblo, y tienen el poder de cerrar los cielos, de sellar para vida o de echar abajo a las regiones de las tinieblas”. El “ángel que asciende del oriente es aquel a quien es dado el sello del Dios viviente sobre las doce tribus de Israel”.
¿Qué significa poner un sello en la frente de los siervos de Dios?
(Compárese con Apocalipsis 9:4).
En la antigüedad, se utilizaban sellos “para indicar propiedad y proporcionar protección”. En este pasaje, el sello colocado en la frente de los siervos de Dios “es un símbolo de la protección divina que mantendrá a salvo a los justos durante el próximo período de conflicto y destrucción”. Este sello incluye protección tanto física como espiritual. Un erudito sugirió: “El sellamiento permite que [los siervos de Dios] respondan con fe a las pruebas por las que pasan, de modo que estas pruebas se convierten en los instrumentos mismos por los cuales pueden incluso ser fortalecidos en su fe”.
El profeta José Smith explicó que poner un sello en la frente de los siervos de Dios “significa sellar la bendición sobre su cabeza, es decir, el convenio sempiterno, haciendo así firme su vocación y elección”. (Para obtener más información sobre este sellamiento, véase “Apocalipsis 22:4. ¿Cuál es el significado de que los siervos de Dios tengan Su nombre en sus frentes?”).
¿Quiénes son los 144 000?
(Compárese con Apocalipsis 14:1–5).
El Señor explicó a José Smith que los 144 000 “son sumos sacerdotes, ordenados según el santo orden de Dios para administrar el evangelio eterno; porque son estos los que son ordenados de entre toda nación, tribu, lengua y pueblo, por los ángeles a quienes es dado poder sobre las naciones de la tierra para traer a cuantos quieran venir a la iglesia del Primogénito”. La labor de los 144 000 sumos sacerdotes podría hacer una referencia simbólica a la obra que se efectúa bajo las llaves del sacerdocio en los templos de los últimos días. La Iglesia del Primogénito se refiere a aquellos que son fieles a sus convenios con Jesucristo y llegan a ser partícipes de Su gloria. (Véase Hebreos 12:22–23. ¿Qué son el monte Sion y la iglesia de los primogénitos?”).
¿Quiénes son las personas vestidas de ropas blancas?
Las personas vestidas de blanco que están de pie delante del trono son las personas justas que los 144 000 han reunido de todas las naciones. Se encuentran en la presencia del Padre y del Hijo, habiendo recibido su exaltación. La imagen del pueblo justo con ramas de palmera en las manos es similar a la entrada triunfal del Salvador en Jerusalén. Las ramas de palmera pueden simbolizar la victoria y el gozo. Las ropas lavadas y “blanquead[as] en la sangre del Cordero” simbolizan a las personas justas que son purificadas mediante la Expiación de Jesucristo.
¿Qué sabemos acerca de los siete ángeles con trompetas?
La apertura del séptimo sello en la visión de Juan va acompañada de aterradoras representaciones de destrucción. El Señor reveló que los siete ángeles que tocan sus trompetas representan el tiempo en que el “Señor Dios santificará la tierra, consumará la salvación del hombre […]; y el son de las trompetas de los siete ángeles es la preparación y terminación de su obra al comenzar el séptimo milenio, la preparación de la vía antes de la hora de su venida”. El número siete a menudo representa culminación.
¿Qué es el ajenjo?
El ajenjo es una planta de sabor amargo y puede simbolizar los “problemas, calamidades y desastres amargos que se desarrollarán” en los últimos días.
¿Qué es el pozo del abismo?
La palabra griega para abismo significa “profundidad” o “fondo”. En la época del Nuevo Testamento, muchos habrían entendido que el pozo del abismo era una “vasta región subterránea que era el hogar de los muertos”.
El profeta José Smith aclaró que la llave del pozo del abismo no se le dio a Satanás, sino al “ángel”. Este dato hace hincapié en que Dios tiene el control en última instancia y que Satanás tiene poder solo en la medida en que Dios lo permite.
¿Cuál es el significado de las langostas y los escorpiones?
Las langostas, o saltamontes, eran una terrible plaga en las sociedades agrícolas antiguas, ya que podían destruir rápidamente los cultivos y causar hambruna. Por ejemplo, en Éxodo 10:12–15 y Joel 1:2–7 se ofrecen relatos del poder destructivo de las langostas. “La combinación de la imagen de las langostas con la de los escorpiones confiere una cualidad de gran nocividad y, por lo tanto, aumenta la sensación de terror que crea la escena”.
¿Quiénes serán protegidos de las calamidades de los últimos días?
El apóstol Juan vio en su visión que ciertas calamidades que precederían a la Segunda Venida afectarían “solamente a los […] que no tuviesen el sello de Dios en sus frentes”. Esto coincide con otras promesas de las Escrituras de que, en los últimos días, quienes sean fieles serán protegidos al final.
Aunque el Señor les promete protección a los justos en los últimos días, el profeta José Smith aclaró que algunos quizás no sean protegidos físicamente del daño: “Expliqué en cuanto a la venida del Hijo del Hombre; y también de que es falsa la idea de que los santos se escaparán de todos los juicios, mientras los inicuos sufren; porque toda carne está sujeta al padecimiento, ‘y los santos apenas escaparán’ [véase Doctrina y Convenios 63:34]. Aun así, muchos de los santos se librarán, pues los justos por la fe vivirán [véase Habacuc 2:4]; sin embargo, muchos de los justos caerán presa de las enfermedades, las pestilencias, etc., por motivo de la debilidad de la carne, mas no obstante, se salvarán en el Reino de Dios”.
¿Cuál es el significado de Abadón y Apolión?
Abaddon es una palabra hebrea que significa “lugar de destrucción”. Apollyon es una palabra griega que significa “destruir”. Estas palabras indican que el objetivo del rey del pozo del abismo es utilizar su ejército para destruir.
¿Cuántos morirán en la batalla?
Los mensajeros de Dios desatarán una terrible destrucción durante los últimos días antes de la Segunda Venida del Salvador. Juan declaró que un ejército de “doscientos millones” (200 000 000) de personas peleará en una batalla. No sabemos si ese número es simbólico o literal. Juan también registró que se dará muerte a “la tercera parte de los hombres”. Sobre esta profecía, el élder Bruce R. McConkie declaró lo siguiente: “Los muertos constituirán una tercera parte de los habitantes de la tierra misma, sin importar cuántos miles de millones de personas puedan llegar a ser”.
¿Qué simboliza el librito que se comió Juan?
El Señor reveló lo siguiente sobre el librito que se comió Juan: “Hemos de entender que fue una misión y ordenanza para él, de recoger a las tribus de Israel; he aquí, este es Elías, el cual, como está escrito, tiene que venir y restaurar todas las cosas”. El hecho de que Juan se comiera el librito probablemente indica que aceptó su misión de recoger a las tribus de Israel. El hecho de que el libro fuera “dulce […] como la miel” en la boca de Juan pero “amarg[o]” en su vientre puede sugerir que su misión incluiría experiencias gozosas y dolorosas.
¿Cuál es el significado de los períodos de tiempo en la visión de Juan?
“Hollarán” la ciudad santa durante cuarenta y dos meses, es decir, tres años y medio. Asimismo, los dos testigos profetizarán y testificarán de Jesucristo durante 1260 días, o aproximadamente tres años y medio. Los dos testigos serán asesinados y sus cuerpos yacerán en la calle durante tres días y medio. En las Escrituras, en particular en Apocalipsis, el número tres y medio a menudo describe un tiempo de tribulación durante el cual a Satanás se le permite hacer su obra. Dado que tres y medio es la mitad de siete, que simboliza la perfección y la culminación, puede representar algo que se interrumpe en su curso o que no se completa. También podría sugerir que Dios no ha terminado de llevar a cabo Su obra y que la obra del diablo no perdurará.
¿Qué podemos aprender de la Traducción de José Smith acerca de la mujer, el hijo de la mujer y el dragón?
En su visión, Juan vio a una mujer, al hijo de la mujer y a un dragón. El profeta José Smith proporcionó las siguientes ideas:
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Símbolo |
Lo que representa |
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Símbolo Una mujer (Apocalipsis 12:1) | Lo que representa “La iglesia de Dios” (Traducción de José Smith, Apocalipsis 12:7 [Biblioteca del Evangelio]) |
Símbolo El hijo de la mujer (Apocalipsis 12:2) | Lo que representa “El reino de nuestro Dios y su Cristo” (Traducción de José Smith, Apocalipsis 12:7 [Biblioteca del Evangelio]) |
Símbolo Un dragón (Apocalipsis 12:3) | Lo que representa “[El] Diablo, […] que también se llama Satanás” (Traducción de José Smith, Apocalipsis 12:8 [Biblioteca del Evangelio]) |
La Traducción de José Smith deja claro que Satanás no prevalecerá en su guerra contra el Reino de Dios en la tierra.
Actualmente, la Iglesia de Dios es una organización eclesiástica, pero cuando el Salvador venga de nuevo y “haya destruido por completo a todas las naciones”, el Reino de Dios también tendrá jurisdicción política sobre todas las personas de la tierra.
¿Qué sabemos sobre la batalla en el cielo?
Satanás trató de destruir nuestro albedrío y deseó la gloria de Dios para sí mismo. Cuando el Padre Celestial escogió a Jesucristo para que fuera nuestro Salvador, Satanás se rebeló y comenzó la guerra en los cielos, en la cual “Satanás y sus seguidores lucharon contra Jesucristo y los seguidores del Señor”. Debido a su rebelión, Satanás y sus seguidores fueron expulsados del cielo y se les negó el derecho de recibir cuerpos mortales.
El presidente Russell M. Nelson enseñó lo siguiente: “La guerra que hubo en el cielo no fue de efusión de sangre; fue una guerra de ideas opuestas: el origen de la contención”. También señaló que el motivo de Satanás era “lograr aclamación personal aun sobre Dios mismo”.
Sobre el esfuerzo continuo de Satanás por destruirnos, el élder Dale G. Renlund dijo lo siguiente: “Lucifer es un acusador o un fiscal […]. Él habló contra nosotros en la existencia premortal, y continúa condenándonos en esta vida; él pretende degradarnos; quiere que experimentemos aflicción interminable; es quien nos dice que no estamos a la altura, el que nos dice que no somos lo suficientemente buenos, el que nos dice que no se puede reparar un error; es el matón supremo, el que nos da patadas cuando hemos caído”.
Más información
Libro de Apocalipsis
-
David A. Edwards, “José Smith y el libro de Apocalipsis”, Liahona, diciembre de 2015, págs. 14–19
Vencer al acusador
-
Dale G Renlund, “Escogeos hoy”, Liahona, noviembre de 2018, págs. 104–107
La guerra en los cielos
-
Gordon B. Hinckley “Un conflicto interminable, una victoria asegurada”, Liahona, junio de 2007, págs. 2–7
-
Larry R. Lawrence, “La guerra continúa”, Liahona, abril de 2017, págs. 30–37
-
Dieter F. Uchtdorf, “Su gran aventura”, Liahona, noviembre de 2019, págs. 86–90
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Temas y preguntas, “Guerra en los cielos”, Biblioteca del Evangelio
Multimedia
Video
“La guerra en los cielos” (2:04)
Imágenes
Four Horsemen of the Apocalypse [Los cuatro jinetes del Apocalipsis], por Viktor Vasnetsov
The Grand Council [El Gran Concilio], por Robert T. Barrett