Ayudas para las Escrituras
Cómo estudiar el Nuevo Testamento


“Cómo estudiar el Nuevo Testamento”, Ayudas para las Escrituras: Nuevo Testamento, 2024

Cómo estudiar el Nuevo Testamento

¿Qué es el Nuevo Testamento?

El Nuevo Testamento es un registro de la vida, las enseñanzas y la misión de Jesucristo. Enseña y testifica de Su sacrificio expiatorio y Su Resurrección. También presenta la narración del ministerio de Sus discípulos al difundir el Evangelio y establecer Su Iglesia.

La palabra traducida como testamento se podría traducir también como convenio. Es por eso que el Nuevo Testamento es el nuevo convenio. El Nuevo Testamento hace hincapié en que Jesucristo cumplió la ley de Moisés, que es el antiguo convenio. El Salvador y Sus discípulos enseñaron el nuevo convenio para ayudar a los hijos de Dios a regresar a vivir en Su presencia.

En el Nuevo Testamento hay 27 libros, que fueron escritos principalmente, aunque no exclusivamente, por apóstoles del Señor Jesucristo. Se divide comúnmente en los Evangelios, los Hechos de los Apóstoles, las epístolas de Pablo, las epístolas generales y el libro de Apocalipsis.

¿Cómo obtuvimos el Nuevo Testamento?

Ya no existen manuscritos originales escritos por los autores del Nuevo Testamento. Los manuscritos más antiguos que existen de libros individuales del Nuevo Testamento son de fechas posteriores al año 200 d. C. Las primeras colecciones de libros del Nuevo Testamento de las que se tiene conocimiento datan del siglo IV.

A partir del siglo I, los cristianos comenzaron a copiar los textos del Nuevo Testamento en forma de códices. Los códices tenían formato de libro y eran páginas individuales cosidas juntas, a diferencia de los rollos, los cuales habían constituido la acostumbrada manera de escribir los textos del Antiguo Testamento. Aquel pudo haber sido un factor importante en el proceso de recopilación de los libros a los que actualmente se conoce como la Santa Biblia. La palabra Biblia proviene del término griego biblia, que literalmente significa “libros”. Con un códice, podía crearse una recopilación de varios libros en un solo tomo encuadernado.

Réplica de un códice griego.

Algunos de los primeros libros del Nuevo Testamento advertían de la apostasía en la Iglesia primitiva. La apostasía sucede cuando una persona o grupos de personas se apartan de los principios del Evangelio. Después de que los apóstoles de Jesucristo fueron asesinados, la apostasía se aceleró. Las verdades y los convenios del Evangelio fueron distorsionados y cambiados. A medida que la apostasía se generalizaba, el Señor retiró de la tierra Sus llaves y Su autoridad del sacerdocio.

Al surgir la apostasía, se establecieron grupos rivales de cristianos, cada uno de los cuales afirmaba que las Escrituras respaldaban sus creencias divergentes. A medida que los debates se intensificaban, los cristianos sintieron la necesidad de hacer una recopilación aceptada de escritos cristianos. Consideraban que algunos de los escritos eran auténticos, mientras que otros eran cuestionables y que algunos eran de mayor valor que otros.

Con el tiempo, los líderes cristianos de los siglos III y IV se esforzaron por determinar cuáles textos debían aceptarse como Escrituras. Uno de los criterios que utilizaron fue evaluar si los textos habían sido escritos por algún apóstol o si se relacionaban con uno de ellos. También tuvieron en cuenta qué tan bien se ajustaban los textos a las creencias cristianas tradicionales. Un tercer criterio empleado fue considerar si los textos contaban con el apoyo generalizado entre las comunidades cristianas.

Basándose en esos criterios, en el año 367 d. C., Atanasio, el obispo de Alejandría en Egipto, recomendó la lista de los veintisiete libros que actualmente se encuentran en el Nuevo Testamento y utilizan la mayoría de los cristianos. Aunque su lista llegó a aceptarse ampliamente, todavía no hay una lista de libros del Nuevo Testamento que sea usada y aceptada por todos los cristianos.

Cientos de años después, se tradujeron diferentes versiones del Nuevo Testamento a los idiomas que utilizamos hoy en día. Muchas de las personas encargadas de traducir y hacer que la Biblia estuviera al alcance de las personas hicieron grandes sacrificios, “aun al grado de morir, para sacar la palabra de Dios de la oscuridad”.

¿Por qué los Santos de los Últimos Días angloparlantes utilizan la versión del rey Santiago de la Biblia?

Entre el año 1604 y el 1611, unos cincuenta eruditos nombrados por el rey Santiago I de Inglaterra emprendieron una nueva traducción de la Biblia al inglés. Esta llegó a conocerse como la versión del rey Santiago y que, en ocasiones, se llama la Versión Autorizada.

Los traductores se basaron en traducciones anteriores de la Biblia al inglés. También consultaron otras fuentes útiles, entre ellas, manuscritos de textos bíblicos en hebreo y griego. La versión del rey Santiago de la Biblia fue la que estudió José Smith. La versión del rey Santiago de la Biblia es de infinito valor para La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Su vocabulario y estilo de lenguaje puede verse a lo largo del Libro de Mormón y Doctrina y Convenios.

El joven José Smith leyendo la Biblia.

La Primera Presidencia escribió:

Aunque otras versiones de la Biblia puedan ser más sencillas de leer que la versión del rey Santiago, en lo referente a cuestiones doctrinales la revelación de los últimos días prefiere la versión del rey Santiago por encima de otras traducciones al inglés. Todos los Presidentes de la Iglesia, desde el profeta José Smith, han respaldado la versión del rey Santiago al fomentar que se siga utilizando en la Iglesia. En vista de lo antes mencionado, esta es la Biblia de habla inglesa usada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

¿Dónde puedo averiguar más sobre las traducciones de la Biblia que se prefieren en otros idiomas que no sean el inglés?

En la colección Escrituras, en la Biblioteca del Evangelio, encontrarás Translations and Formats [Traducciones y formatos]. Selecciona “Holy Bible [Santa Biblia]” para ver la lista de traducciones de la Biblia publicadas o que se prefieren para su uso en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

¿Qué es la Traducción de José Smith de la Biblia?

El profeta José Smith mostró un gran amor por la Biblia a lo largo de su vida. Sin embargo, era consciente de que había problemas con el texto. Él dijo: “Creo en la Biblia tal como se hallaba cuando salió de la pluma de sus escritores originales. Los traductores ignorantes, los escribientes descuidados y los sacerdotes intrigantes y corruptos han cometido muchos errores”.

En el verano de 1830, el Profeta comenzó una revisión o traducción de la versión del rey Santiago de la Biblia en inglés. Él consideraba esto como parte de su llamamiento profético. José terminó la mayor parte de su labor en julio de 1833, aunque continuó haciendo cambios menores a su manuscrito hasta su muerte en 1844.

El Profeta no tradujo la Biblia de un idioma a otro. Tampoco utilizó fuentes hebreas y griegas, ni se basó en diccionarios especializados. En lugar de eso, leía y estudiaba pasajes de la versión del rey Santiago de la Biblia y luego hacía correcciones y adiciones según lo inspiraba el Espíritu Santo. Su primera traducción dio lugar a pasajes más largos que expandían los relatos y las enseñanzas bíblicas. Algunos ejemplos de ello son el libro de Moisés y el de José Smith—Mateo. Otras revisiones incluyeron “cambios menores para mejorar la gramática, aclarar el significado, modernizar el lenguaje, corregir puntos de doctrina o resolver incongruencias”.

Representación artística de José Smith y Sidney Rigdon trabajando en la traducción de la Biblia.

Joseph and Sidney [José y Sidney], por Annie Henrie Nader

El presidente Dallin H. Oaks declaró que la Traducción de José Smith de la Biblia “es miembro de la familia real de las Escrituras. […] Se la debe reconocer y honrar en toda ocasión en la que esté presente”.

Muchas de las revisiones inspiradas del Profeta se pueden encontrar en el Apéndice de la Traducción de José Smith, que se encuentra en Ayudas para el estudio, en la Biblioteca del Evangelio. También se encuentran en las notas al pie de página y en el apéndice de las ediciones Santos de los Últimos Días de la Biblia.

Más información

  • M. Russell Ballard, “El milagro de la Santa Biblia”, Liahona, mayo de 2007, págs. 80–82.

  • Neal A. Maxwell, “The New Testament—a Matchless Portrait of the Savior”, Ensign, diciembre de 1986, págs. 20–27.

  • Shon D. Hopkin, “How New Testament Disciples Built on Old Testament Foundations” (artículo solo en formato digital), Liahona, enero de 2023, Biblioteca del Evangelio.

  • Véase Temas de la historia de la Iglesia, “Traducción de José Smith de la Biblia”, Biblioteca del Evangelio.

Material multimedia

Notas

  1. Véase Guía para el Estudio de las Escrituras, “Convenio”, Biblioteca del Evangelio.

  2. Véase Richard Neitzel Holzapfel et al, Jesus Christ and the World of the New Testament: An Illustrated Reference for Latter-day Saints, 2006, pág. 7.

  3. Véase Lincoln H. Blumell, “The Greek New Testament Text of the King James Version”, en New Testament History, Culture, and Society: A Background to the Texts of the New Testament, editado por Lincoln H. Blumell, 2019, págs. 702–703.

  4. Véase Daniel Becerra, “The Canonization of the New Testament”, en Learn of Me: History and Teachings of the New Testament, editado por John Hilton III y Nicholas J. Frederick, 2022, pág. 778; Holzapfel et al, Jesus Christ and the World of the New Testament, pág. 7.

  5. Véase Guía para el Estudio de las Escrituras, “Biblia”, Biblioteca del Evangelio.

  6. Véanse Hechos 20:29–30; 1 Corintios 1:10–13; Gálatas 1:6–8; 2 Pedro 2:1–3; 3 Juan 1:9–10; Judas 1:3–4, 18–19.

  7. Véase 1 Nefi 13:26–29.

  8. Véanse Dallin H. Oaks, “La Apostasía y la Restauración”, Liahona, julio de 1995, págs. 95–98; M. Russell Ballard, “La verdad restaurada”, Liahona, enero de 1995, págs. 75–78.

  9. Véase Becerra, “The Canonization of the New Testament”, págs. 780–781.

  10. Véase Becerra, “The Canonization of the New Testament”, pág. 782.

  11. D. Todd Christofferson, “La bendición de las Escrituras”, Liahona, mayo de 2010, pág. 32.

  12. Véase Lincoln H. Blumell y Jan J. Martin, “The King James Translation of the New Testament”, en Blumell, New Testament History, Culture, and Society, págs. 673–674, 677.

  13. Véase Blumell y Martin, “The King James Translation of the New Testament”, págs. 674–675.

  14. Véase “History of the Scriptures”, en About the Scriptures, ChurchofJesusChrist.org.

  15. First Presidency Statement on the King James Version of the Bible”, Ensign, agosto de 1992, pág. 80.

  16. Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: José Smith, 2007, pág. 217.

  17. Véase Guía para el Estudio de las Escrituras, “José Smith, Traducción de (TJS)”, Biblioteca del Evangelio.

  18. Temas de la historia de la Iglesia, “Traducción de José Smith de la Biblia”, Biblioteca del Evangelio.

  19. Dallin H. Oaks, “Scripture Reading, Revelation, and the JST”, en Plain and Precious Truths Restored: The Doctrinal and Historical Significance of the Joseph Smith Translation, editado por Robert L. Millet y Robert J. Matthews, 1995, pág. 13.