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Unidad 6, Día 3: Mateo 25


Unidad 6 Día 3

Mateo 25

Introducción

Mientras enseñó en privado a Sus discípulos en el monte de los Olivos, Jesucristo enseñó la parábola de las diez vírgenes y la de los talentos. También explicó que Él separará a los justos de los inicuos cuando regrese.

Mateo 25:1–13

Jesús enseña la parábola de las diez vírgenes

Imagínate cómo te sentirías si fueras el joven de la siguiente historia que relató el élder Jeffrey R. Holland, del Cuórum de los Doce Apóstoles, quien escuchó a ese joven exmisionero compartir una experiencia personal en una reunión de testimonios.

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Elder Jeffrey R. Holland

“Dijo que… poco después de haber sido ordenado élder a los 18 años… regresó a casa luego de haber salido con una jovencita. Algo había ocurrido en esa ocasión de lo que no se sentía orgulloso. No entró en detalles, ni tendría que haberlo hecho en público. Hasta el día de hoy desconozco la naturaleza del incidente, pero para él fue lo suficientemente importante como para que afectara su espíritu y su autoestima.

“Mientras se encontraba sentado en su automóvil en la entrada de su casa, meditando y sintiendo gran pesar por lo ocurrido, fuese lo que fuese, su madre, que no era miembro de la Iglesia, salió corriendo desesperada de la casa y corrió hacia el auto donde él estaba. En un instante, le comunicó que su hermano menor se acababa de caer, se había golpeado la cabeza con fuerza y parecía estar teniendo convulsiones. El padre, que tampoco era miembro, había llamado de inmediato para que enviaran una ambulancia, pero la ayuda tardaría en llegar.

“‘Ven y haz algo’, le suplicó. ‘¿No hay algo que hagan en tu Iglesia en momentos como éste? Tú tienes el sacerdocio de ellos. Ven y haz algo’. “…esa

noche, cuando alguien a quien él tanto amaba necesitaba de su fe y de su ayuda, este joven no pudo responder. Debido a los sentimientos con los que acababa de luchar y la situación comprometida en la que sintió que se había puesto —cualquiera que haya sido— no tuvo el valor de ir ante el Señor y suplicar la bendición que se necesitaba” (“La confianza que brinda la dignidad” Liahona, abril de 2014, págs. 58–59).

Si fueras el joven en esa situación, ¿en qué estarías pensando? ¿Por qué es tan importante que siempre estés preparado?

Mateo 25 es una continuación de las enseñanzas del Salvador en el monte de los Olivos, e incluye tres parábolas de preparación que nos enseñan cómo estar listos para reunirnos con el Señor cuando venga nuevamente.

Mientras se encontraba en el monte de los Olivos, Jesucristo enseñó a Sus discípulos acerca de Su segunda venida (véase Mateo 24). Por medio de la parábola de las diez vírgenes, Jesús enseñó que nos debemos preparar para Su segunda venida.

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foolish and wise virgins with lamps

Lee Mateo 25:1–4 para localizar los elementos principales de la parábola. Si lo deseas, marca lo que encuentres.

De acuerdo con las costumbres judías para las bodas, el “novio, acompañado de sus amigos cercanos, iría por la noche a la casa de la novia. Al concluir las ceremonias de boda, la fiesta de boda tendría lugar en la casa del novio, con un banquete. Se esperaba que los invitados de la boda que se unían a la procesión llevaran sus propias lámparas o antorchas” para indicar que eran parte de la fiesta de bodas y para agregar brillo y belleza a la ocasión (New Testament Student Manual [manual del Sistema Educativo de la Iglesia, 2014], pág. 78).

Lee el resto de la parábola en Mateo 25:5–13 para averiguar qué hicieron las cinco vírgenes prudentes y qué hicieron las cinco vírgenes insensatas.

En lugar de leer Mateo 25:5–13, puedes ver una porción del video “Aquellos que son prudentes” (en el minuto 0:00–5:46), que muestra la parábola de las diez vírgenes. El video está disponible en LDS.org. Mientras ves el video, busca lo que hicieron las cinco vírgenes prudentes y las cinco vírgenes insensatas.

Considera los siguientes elementos de la parábola y escribe lo que crees que cada uno podría representar:

El novio

Las vírgenes prudentes

Las vírgenes insensatas

Lámparas

Aceite

Las frases “tardándose el novio” (Mateo 25:5) y “a la medianoche se oyó un clamor” (Mateo 25:6) hacen referencia a la segunda venida de Jesucristo. Medita qué puedes aprender de esos versículos acerca de la Segunda Venida. Si lo deseas, escribe Jesucristo en el margen, junto a los versículos 5–6.

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Elder Dallin H. Oaks

El élder Dallin H. Oaks, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó a quién representan las diez vírgenes: “Las diez vírgenes obviamente representan a los miembros de la Iglesia de Cristo porque todas fueron invitadas a las fiestas de bodas y todas sabían lo que se requería para ser admitidas cuando el esposo llegara, pero solo la mitad estuvo lista cuando Él llegó” (“La preparación para la Segunda Venida”, Liahona, mayo de 2004, pág. 8).

Si lo deseas, escribe miembros de la Iglesia en el margen, junto a Mateo 25:1–2.

Revisa Mateo 25:8–9 y medita por qué las vírgenes prudentes no le dieron de su aceite a las insensatas. El presidente Spencer W. Kimball enseñó lo que puede representar el aceite y por qué no se puede compartir:

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President Spencer W. Kimball

“No se trató de egoísmo o falta de bondad de parte de las prudentes. El tipo de aceite que se necesita para iluminar el camino y alumbrar en la oscuridad no es del que se puede compartir así nada más. ¿Cómo se podría compartir la obediencia a la ley del diezmo, una mente tranquila como producto de una vida recta o la acumulación de conocimiento? ¿Cómo se podrían compartir la fe o el testimonio? ¿Cómo se podrían compartir nuestras actitudes o nuestra castidad o la experiencia de haber servido en una misión? ¿Cómo se podrían compartir con otros los privilegios del templo? Cada uno debe obtener esa clase de aceite por sí mismo…

“En la parábola, el aceite se puede comprar en el mercado. En nuestra vida, el aceite de la preparación se acumula gota a gota por medio de una vida de rectitud… cada acto de dedicación y obediencia constituye una gota que se agrega a nuestra reserva” (Faith Precedes the Miracle, 1972, págs. 255–256).

  1. Medita qué representa el aceite de la parábola. En tu diario de estudio de las Escrituras, haz una lista de los actos de dedicación y obediencia que podrían completar la siguiente oración: De acuerdo con el presidente Spencer W. Kimball, algunas de las cosas que el aceite de la parábola puede representar son…

La siguiente es una verdad que podemos aprender de la parábola y de los comentarios del presidente Kimball: No podemos pedir prestada la preparación espiritual de los demás. La preparación espiritual incluye el testimonio, la conversión, la fe y otros dones que vienen personalmente por medio del Espíritu Santo.

El élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó:

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Elder David A. Bednar

“Ahora quiero utilizar una de las muchas interpretaciones posibles de la parábola de las diez vírgenes a fin de destacar la relación que existe entre el testimonio y la conversión. Diez vírgenes, cinco que fueron prudentes y cinco insensatas, tomaron sus lámparas y fueron a recibir al novio. Por favor consideren las lámparas que usaron las vírgenes como la lámpara del testimonio. Las vírgenes insensatas tomaron sus lámparas del testimonio pero no llevaron consigo aceite. Consideren que el aceite que se describe es el aceite de la conversión. …“¿Fueron

egoístas las cinco vírgenes prudentes por no estar dispuestas a compartir, o indicaban correctamente que el aceite de la conversión no se puede pedir prestado? ¿Puede darse a otra persona la fortaleza espiritual que proviene de la obediencia constante a los mandamientos? ¿Puede transmitirse a la persona que lo necesite el conocimiento que se obtiene al estudiar con diligencia y meditar las Escrituras? ¿Puede la paz que le brinda el Evangelio al fiel Santo de los Últimos Días transferirse a la persona que esté pasando adversidades o grandes desafíos? La respuesta clara a cada una de estas preguntas es no.

“Como apropiadamente lo recalcaron las vírgenes prudentes, cada uno de nosotros debe ‘comprar para uno mismo’. Esas mujeres inspiradas no describían una transacción de negocios; más bien, recalcaban la responsabilidad individual que tenemos de mantener viva la lámpara de nuestro testimonio y de obtener una provisión suficiente del aceite de la conversión. Este valioso aceite se adquiere una gota a la vez: ‘línea por línea [y] precepto por precepto’ (2 Nefi 28:30), con paciencia y perseverancia. No hay atajos; no es posible la preparación a último momento.

“Por lo tanto, sed fieles, orando siempre, llevando arregladas y encendidas vuestras lámparas, y una provisión de aceite, a fin de que estéis listos a la venida del Esposo’ (D. y C. 33:17)” (“Convertidos al Señor”, Liahona, noviembre de 2012, pág. 109).

La siguiente es otra verdad que podemos aprender de la parábola: Nos preparamos para la Segunda Venida al incrementar nuestro testimonio y conversión por medio de la rectitud diaria.

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oil lamp
  1. Haz un dibujo grande de una lámpara de aceite en tu diario de estudio de las Escrituras. Teniendo en mente que el aceite de la parábola representa la preparación para la segunda venida de Jesucristo, haz una lista dentro de la lámpara de maneras en las que puedes agregar “aceite” a tu “lámpara”. De ser posible, comparte tus ideas con los miembros de tu familia o con amigos y pregúntales qué es lo que te sugieren que agregues a tu lista.

Para comprender otras maneras en las que puedes acumular aceite gota a gota al vivir rectamente, puedes ver el resto del video “Aquellos que son prudentes” (en el minuto 5:46–8:44). A medida que veas el video, añade cosas a la lista de ideas en tu diario de estudio de las Escrituras.

En la revelación moderna el Señor confirmó que “en aquel día [la Segunda Venida], cuando yo venga en mi gloria, se cumplirá la parábola que hablé acerca de las diez vírgenes” (D. y C. 45:56).

Lee Mateo 25:10–12 para averiguar lo que el novio les dijo a las vírgenes insensatas. Podría ser útil saber que la Traducción de José Smith clarifica que el novio dijo: “…no me conocéis” (Traducción de José Smith, Mateo 25:11 [en Mateo 25:12, nota a al pie de página]).

¿Qué nos dice la declaración “no me conocéis” acerca de las cinco vírgenes insensatas? ¿Cómo el conocer al Señor es diferente a simplemente saber acerca de Él? (Véase Juan 17:3).

De esos versículos aprendemos que para estar listos para la segunda venida del Señor y ser dignos de permanecer en Su presencia debemos llegar a conocerlo.

  1. Contesta las siguientes preguntas en tu diario de estudio de las Escrituras:

    1. ¿De qué maneras has llegado a conocer mejor al Salvador?

    2. El conocer al Salvador, ¿cómo puede influir en tu preparación espiritual para Su segunda venida?

Siguiendo la historia del inicio de la lección —acerca del joven poseedor del sacerdocio que no estaba preparado en el momento que se le requería— el élder Holland explicó que el joven se apresuró a ir a casa de un hermano mayor de su barrio. El hombre le dio al hermano menor del joven una bendición que estabilizó su condición hasta que llegaron los paramédicos. El élder Holland continuó:

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Elder Jeffrey R. Holland

“Entonces el ex misionero del que estoy hablando dijo: ‘[Quien] no haya pasado por lo que yo pasé esa noche sabrá jamás la vergüenza y el pesar que sentí por no sentirme digno de ejercer el sacerdocio que poseía. El recuerdo es aún más doloroso para mí porque era mi propio hermanito el que me necesitaba, y mis amados padres, que no eran miembros y estaban tan angustiados, tenían el derecho de esperar más de mí. Pero hoy, ante ustedes, les puedo asegurar esto’, dijo él: ‘No soy perfecto, pero a partir de esa noche nunca he hecho nada que me impidiera presentarme ante el Señor con confianza y pedir Su ayuda cuando era necesaria. La dignidad personal es una lucha en este mundo en el que vivimos’, indicó, ‘pero es una batalla que estoy ganando. He sentido el dedo de la condenación señalándome una vez en mi vida, y no tengo la intención de volver a sentirlo jamás, si puedo hacer algo al respecto. Y, por supuesto’, concluyó, ‘puedo hacer todo lo necesario para que así sea’” (véase “La confianza que brinda la dignidad”, pág. 59).

Considera qué necesitas hacer para estar preparado espiritualmente para la venida del Señor. Puedes encerrar en un círculo una o dos de las acciones que escribiste en tu dibujo de la lámpara de aceite y ponerte la meta de actuar en maneras que incrementarán tu preparación espiritual.

Mateo 25:14–46

Jesucristo enseña a Sus discípulos la parábola de los talentos y la de las ovejas y los cabritos

Si tus padres entraran al salón de clase y te dieran una suma grande de dinero, ¿qué harías con ella?

Conforme el Salvador continuó enseñando a Sus discípulos acerca de Su segunda venida, Él relató la parábola de los talentos. En esa parábola un hombre iba a salir a un viaje y le dio dinero a tres de sus siervos: al primer siervo cinco talentos, al segundo dos y al tercero uno. (Un talento es una suma de dinero).

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ancient coins

Lee Mateo 25:16–18 para determinar lo que los siervos hicieron con su dinero.

En Mateo 25:19–23 aprendemos que cuando el maestro regresó, pidió a sus siervos que le dieran un informe de lo que habían hecho con su dinero. Los siervos con cinco y dos talentos los habían usado para duplicar el dinero de su amo. Pero el siervo con un talento lo había escondido y como consecuencia no tenía ningún incremento que dar a su amo.

Lee Mateo 25:24–25 para conocer por qué el siervo escondió el talento.

En esa parábola, los talentos se pueden comparar a los dones y habilidades que el Señor nos ha dado. El miedo puede impedir que usemos los dones y las habilidades que el Señor nos ha dado.

¿Qué crees que sucede si no desarrollamos nuestros dones y habilidades por causa del miedo?

Lee Mateo 25:26–30 para averiguar lo que le ocurrió al siervo inútil.

Una verdad que podemos aprender de esa parábola es que si no desarrollamos y usamos nuestros dones espirituales para hacer el bien, entonces los perderemos.

Piensa en algunas maneras en las que puedes usar tus dones y habilidades a fin de impulsar la obra del Señor. Tu testimonio es un talento que puedes usar (véase D. y C. 60:2–3). Podrías hacer un plan para usar y desarrollar fielmente tus dones y habilidades.

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goat grazing among sheep

En Mateo 25:31–46 aprendemos que al tiempo de Su segunda venida Jesús separará a los justos de los inicuos, de la misma manera que un pastor separa las ovejas de los cabritos. ¿Cómo determina el Señor la diferencia que existe entre aquellos que lo aman (ovejas) y aquellos que no lo aman (cabritos)?

Lee Mateo 25:40 para saber lo que el Salvador enseñó acerca de cómo mostramos nuestro amor por Él.

De ese versículo aprendemos que a medida que servimos a los demás, mostramos nuestro amor por el Señor.

Para comprender mejor cómo mostramos nuestro amor por el Señor al amar y servir a los demás, ve el video “El abrigo: Una historia sobre la caridad”, que muestra un acontecimiento de la niñez del presidente Heber J. Grant. A medida que veas el video, averigua a quién servía el niño y a quién la madre.

Medita sobre la manera en la que has tratado a los demás durante las últimas veinticuatro horas. Considera si elegirías actuar diferente si en el futuro te encontraras en una situación similar. Durante las próximas veinticuatro horas busca oportunidades para seguir las impresiones del Espíritu Santo y servir a los demás.

  1. Escribe lo siguiente en el diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:

    He estudiado Mateo 25 y he terminado esta lección el (fecha).

    Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con el maestro: