El apóstol Pablo abordó el tema de las preocupaciones que los santos de Corinto tenían en cuanto al uso de recursos de la Iglesia para proporcionar un subsidio para sus gastos para vivir. Él explicó que el propósito de su predicación era para llevar la salvación a los hijos de Dios. Los exhortó a evitar pecar, así como a ofender a otras personas por sus creencias religiosas.
Pablo predica el Evangelio para que él y sus oyentes puedan ser salvos
¿Alguna vez has tenido dificultad para despertar por la mañana y por ello perdiste algo importante? ¿Qué sientes al darte cuenta de que te perdiste algo o que no lograste algo importante porque no te preparaste?
Lo más importante en esta vida por lo que debemos esforzarnos es la oportunidad de ser dignos de la vida eterna.
En tu diario de estudio de las Escrituras escribe por qué la vida eterna es algo que deseas.
Así como la dificultad para despertar por la mañana puede resultar en que nos perdamos cosas importantes o no podamos lograr cosas importantes, algunos comportamientos pueden ser el motivo de que no logremos la cosa más importante de todas: la vida eterna. Al estudiar 1 Corintios 9, busca un principio que te ayude a saber cómo asegurarte de que lograrás la vida eterna.
En 1 Corintios 9:1–21, Pablo dio respuesta a varias preguntas de los santos de Corinto. Él escribió que a pesar de que estaría totalmente justificado de que los miembros de la Iglesia proveyeran para él en sus asuntos temporales, no había dependido de ellos para sus gastos para vivir. Explicó que al adaptarse a circunstancias diferentes sin comprometer las normas del Evangelio, había podido ayudar a judíos, a gentiles y a cualquier persona que fuera débil en el Evangelio para aceptar dicho Evangelio.
Lee 1 Corintios 9:17 para saber cómo predicaba Pablo el Evangelio.
Lee 1 Corintios 9:22–23 y fíjate por qué Pablo predicaba el Evangelio de su propia voluntad.
Piensa en un momento en el que hayas practicado o entrenado para un evento. ¿Cuán extenso fue tu horario de práctica o tu programa de entrenamiento? ¿Cómo te motivó el trabajar para lograr una meta?
Pablo explicó que los atletas pueden superar la tentación de no entrenar al centrarse en su meta. Lee 1 Corintios 9:24–25 para descubrir el contexto atlético que Pablo usó para enseñar a los santos de Corinto.
¿Qué cualidad o característica dijo Pablo que necesitan los corredores para alcanzar el éxito?
Abstenerse de todo requiere autodominio y autocontrol. La corona incorruptible que Pablo dice que durará para siempre es la vida eterna.
De 1 Corintios 9:25 podemos aprender el siguiente principio: Para obtener la vida eterna debemos aprender a ejercer el autodominio en todas las cosas. No obstante, al final la vida eterna solo se recibe mediante “los méritos, y misericordia, y gracia” de Jesucristo (2 Nefi 2:8) en vez de nuestro propio autodominio.
Contesta las siguientes preguntas en tu diario de estudio de las Escrituras:
¿Por qué piensas que ejercer el autodominio es necesario para obtener la vida eterna?
¿En qué aspectos de la vida tenemos que ejercer todos el autodominio a fin de alcanzar la vida eterna?
¿Qué piensas que Pablo quiso decir en el versículo 27 cuando escribió: “…golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, no sea que, habiendo predicado a otros, yo mismo venga a ser descalificado”?
Reflexiona en las siguientes declaraciones del presidente Brigham Young:
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President Brigham Young
“No podremos heredar la vida eterna a menos que nuestros apetitos se sometan al espíritu que mora en nuestro interior, ese espíritu que nuestro Padre Celestial nos ha dado. Me refiero al Padre del espíritu de cada uno de nosotros, ese espíritu que Él ha colocado en estos tabernáculos [cuerpos]. Nuestros tabernáculos deben someterse al espíritu por completo; de lo contrario, nuestro cuerpo no podrá levantarse para heredar la vida eterna… Debemos buscar diligentemente hasta que todo esté sometido a la ley de Cristo” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Brigham Young, 1997, pág. 215).
“Si el espíritu se doblega al cuerpo, se corrompe; pero si el cuerpo se doblega al espíritu, se vuelve puro y santo” (Enseñanzas: Brigham Young,pág. 217).
Contesta la siguiente pregunta en tu diario de estudio de las Escrituras: ¿Cuáles son algunas cosas que puedes hacer para ayudar a que tu cuerpo se someta a tu espíritu?
Pablo advierte a los santos de Corinto que eviten el pecado y ofender a los demás
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President James E. Faust
El presidente James E. Faust, de la Primera Presidencia, advirtió: “Uno de los grandes mitos de la vida se produce cuando [las personas] se creen invencibles. Hay demasiados que piensan que son de acero, lo bastante fuertes para resistir cualquier tentación, y se engañan a sí mismos al pensar: ‘No puede sucederme a mí’” (“No puede sucederme a mí”, Liahona, julio de 2002, pág. 51).
Piensa en situaciones en las que las personas podrían exponerse a la tentación, pensando que son suficientemente fuertes para soportarla.
Como se encuentra escrito en 1 Corintios 10:1–5, Pablo hizo referencia a algunas cosas que los hijos de Israel vivieron en la época de Moisés que debería haberlos hecho espiritualmente fuertes. Aunque el Señor los bendijo en el desierto y presenciaron muchos milagros, el Señor no estaba complacido con muchos de ellos, y fueron castigados.
Lee 1 Corintios 10:6–11 para ver lo que Pablo quería que aprendieran los santos de Corinto del ejemplo de los antiguos israelitas.
Aunque los antiguos israelitas recibieron grandes bendiciones, optaron por ceder a la tentación. Pablo deseaba advertir a los santos corintios con el fin de que evitaran repetir los pecados de los antiguos israelitas.
Lee 1 Corintios 10:12 y haz un resumen del mensaje de Pablo con tus propias palabras:
Lee 1 Corintios 10:13 para ver lo que Pablo enseñó en cuanto a la tentación. Si lo deseas, marca lo que encuentres.
¿Qué podemos aprender acerca de la tentación de ese versículo?
Reflexiona sobre la siguiente pregunta: Si Dios no permitirá que se nos tiente más allá de nuestra capacidad para resistir, ¿por qué cedieron los israelitas antiguos a la tentación?
Lee 1 Corintios 10:14 para averiguar lo que Pablo enseñó a los santos corintios que hicieran. La idolatría era un pecado con el que tenían problemas tanto los antiguos israelitas como los santos corintios.
De 1 Corintios 10:13–14 podemos aprender que Dios proporcionará una manera para que nos libremos de la tentación, pero debemos elegir apartarnos de ella.
Lee Alma 13:28 para ver lo que podemos hacer para apartarnos nosotros mismos de la tentación. Podrías escribir esta referencia correlacionada en tu ejemplar de las Escrituras junto a 1 Corintios 10:13–14.
Contesta lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras:
De lo que has aprendido de 1 Corintios 10:13–14 y de Alma 13:28, escribe un titular de un periódico o el eslogan de un cartel que diga cómo pueden las personas librarse de la tentación.
¿Cómo puede ayudarnos a apartarnos de la tentación el humillarnos y el velar y orar continuamente?
Quizás no siempre puedas evitar la tentación. Es por eso que debemos decidir ahora mismo cómo actuaremos al enfrentarnos a la tentación. Piensa en las siguientes declaraciones del presidente Spencer W. Kimball:
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President Spencer W. Kimball
“Las decisiones correctas son más fáciles de tomar cuando se toman con bastante anticipación y con nuestros objetivos finales en mente; eso nos evita mucha angustia [en momentos de decisión], cuando estamos cansados y la tentación es grande…
“ Este es el momento de decidir que no nos conformaremos con nada menos que una oportunidad de vivir eternamente con nuestro Padre, a fin de que toda decisión que tomemos se base en nuestra determinación de no dejar que nada nos impida alcanzar esa meta final” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Spencer W. Kimball,, 2006, pág. 121).
“Desarrollen el autodominio de manera que, al enfrentarse repetidamente con una misma tentación, no tengan que tomar cada vez una decisión al respecto. ¡Algunas decisiones tienen que tomarse sólo una vez!
El no tener que darle mil y una vueltas respecto a una tentación es una gran bendición. Ese tipo de dilema es un desperdicio de tiempo y algo muy arriesgado” (Enseñanzas: Spencer W. Kimball,pág. 121).
“El momento para abandonar las malas prácticas es antes de que empiecen. El secreto de la buena vida consiste en la protección y la prevención. Aquellos que ceden a la maldad usualmente son los que se han colocado… en una posición vulnerable” (Enseñanzas: Spencer W. Kimball,pág. 122).
Piensa en cuáles son las tentaciones con las que tienes más dificultad. ¿Qué cambios puedes hacer para evitar la tentación incluso antes de enfrentarla?
Toma un momento para leer un tema de Para la Fortaleza de la Juventud que te ayude a saber cómo apartarte de la tentación. Según lo que leas, podrías escribir una meta y llevarla contigo durante un tiempo para que te recuerde huir de la tentación.
En 1 Corintios 10:15–33 Pablo aconsejó a los santos de Corinto que respetaran las prácticas religiosas de los demás sin comprometer las suyas propias, y volvió a escribir que estaba predicando con el fin de ayudar a salvar a muchos.
Escribe lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:
He estudiado 1 Corintios 9–10 y he terminado esta lección el (fecha).
Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con el maestro: