Samuel Instructing Saul [Samuel instruye a Saúl], por Ted Henninger
1 Samuel 8–10; 13; 15–16
Los israelitas querían tener un rey “como tienen todas las naciones” (1 Samuel 8:5) en lugar de que el Señor reinara sobre ellos. En respuesta, Jehová mandó a Samuel que ungiera a Saúl como rey. Saúl reinó rectamente por un tiempo, pero finalmente fue rechazado por Jehová como rey debido a su desobediencia. Luego, Jehová guio a Samuel para que escogiera a David, un humilde pastor, como el siguiente rey de Israel. Por medio de esa experiencia, Samuel aprendió que el Señor nos ve de una manera diferente a como las personas normalmente se ven unas a otras.
Recursos adicionales
Ayudas para las Escrituras: Antiguo Testamento, “1 Samuel 8–10; 13; 15–16”
Nota: La “Introducción al curso” ofrece orientación sobre cómo utilizar los elementos estándar de la lección que se presentan a continuación.
Fomentar el estudio personal
Antes de la clase, considere enviar a los alumnos uno o más de los mensajes siguientes, o bien cree uno usted mismo:
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¿Cómo puedes reaccionar cuando las influencias populares contradicen el consejo del Señor? Medita en eso a medida que estudies 1 Samuel 8.
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“La vida de Saúl comenzó con un gran futuro, pero tuvo un final desafortunado y trágico” (Dieter F. Uchtdorf, “Cuestión de solo unos grados“, Liahona, mayo de 2008, pág. 58). Al estudiar 1 Samuel 13:5–14 y 15:1–28, ¿qué encuentras que contribuyó a la decadencia espiritual de Saúl? ¿Cómo puede ayudarte el relato de Saúl a evitar el peligro espiritual?
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¿Qué problemas pueden surgir cuando juzgamos a otras personas basándonos únicamente en lo que podemos ver? Al estudiar 1 Samuel 16, piensa en cómo te ve el Señor y en qué se diferencia eso de cómo te ven los demás.
Hacer preguntas y compartir
Dé tiempo a los alumnos para que hagan preguntas y expresen las reflexiones y verdades que hayan descubierto en su estudio personal de 1 Samuel 8–10; 13; 15–16.
Capacitación en técnicas de estudio
La actividad de aprendizaje de 1 Samuel 15 podría ser un buen momento para emplear la técnica “Etiquetar pasajes de las Escrituras y otras enseñanzas del Evangelio” de Técnicas de estudio de las Escrituras.
Opciones de actividades de aprendizaje
Se proporcionan varias opciones de aprendizaje para usted y sus alumnos. Con espíritu de oración, elija qué opción u opciones serán las más significativas para su clase. También podría pedir la opinión de sus alumnos.
Cómo mejorar la enseñanza y el aprendizaje
Prepárese espiritualmente. Cuando los maestros se preparan espiritualmente para enseñar, son más capaces de escuchar y seguir la guía del Espíritu Santo al enseñar y preparar las lecciones. A fin de obtener más información sobre cómo se preparaba el Salvador para enseñar, véase “El Salvador se preparó espiritualmente para enseñar” (Enseñar a la manera del Salvador, págs. 16–17).
¿Cómo puedo responder cuando me encuentre con malas influencias que contradigan el consejo del Señor?
Considere comenzar analizando la siguiente declaración de la hermana Elaine S. Dalton, quien fue Presidenta General de las Mujeres Jóvenes:
Si desean marcar una diferencia en el mundo, deben ser diferentes del mundo (“¡Ahora es el tiempo de levantarse y brillar!”, Liahona, mayo de 2012, pág. 124).
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¿Qué desafíos podrían afrontar al escoger ser diferentes del mundo?
Invite a los alumnos a meditar en cuán dispuestos suelen estar a sobresalir cuando se encuentran con valores que difieren de los del Señor. Invítelos a que busquen verdades en su estudio de hoy, que puedan ayudarlos en sus esfuerzos por seguir a Jesucristo.
Recuerde a los alumnos que los israelitas fueron dirigidos por jueces durante los primeros siglos después de entrar en la tierra prometida. El profeta Samuel fue uno de los últimos de estos jueces. Dirigió fielmente a Israel bajo la dirección del Señor durante muchos años.
Invite a los alumnos a leer 1 Samuel 8:1–9 para saber lo que deseaban los ancianos de Israel cuando Samuel envejeció. Pídales que compartan lo que hayan encontrado. También podría preguntar lo siguiente:
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¿Por qué querían los ancianos un rey? (Según sea necesario, señale que los israelitas pensaban que era mejor tener un rey, en parte, porque eso era lo que “todas las naciones” a su alrededor estaban haciendo. Véase el versículo 20).
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¿Por qué creen que las razones de los israelitas para querer un rey desagradaban a Samuel?
Para resumir los versículos 10–18, explique que Jehová le dio a Samuel advertencias específicas sobre los peligros de tener un rey.
Invite a los alumnos a estudiar 1 Samuel 8:19–22 y luego la siguiente declaración del presidente Jeffrey R. Holland, para saber cómo respondieron los israelitas a las advertencias de Samuel.
La dolorosa ironía aquí es que ya tenían un rey que iba delante de ellos y peleaba sus batallas. Era Jehová, el Rey de todos, pero ellos ya no deseaban que Él los gobernara ni que peleara sus batallas, y, como sucede con el tema de tantas lecciones de la historia, las dolorosas consecuencias llegaron cuando ya era demasiado tarde para evitarlas. El pueblo más tarde se lamentó: “… porque a todos nuestros pecados hemos añadido este mal de pedir un rey para nosotros” (1 Samuel 12:19). (“Escoge al Señor y a Su profeta”, Liahona, junio de 2022, pág. 6).
Invite a los alumnos a compartir verdades que aprendan de este relato que puedan ayudarlos con las situaciones que afronten. Este es un ejemplo de una verdad que podrían reconocer: Elegir seguir las ideas populares en lugar del consejo del Señor conducirá al sufrimiento y al remordimiento.
Considere mostrar las preguntas siguientes e invitar a los alumnos a analizarlas con un compañero o con un grupo pequeño:
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¿Cuáles son algunas ideas o valores comúnmente aceptados que podrían alejar a los jóvenes adultos de Dios?
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¿Qué saben acerca de Jesucristo que pueda ayudarles a vencer la tentación de seguir este tipo de ideas?
Podría invitar a algunos alumnos a compartir las reflexiones que tuvieron durante sus análisis. También podría considerar analizar juntos una pregunta como la siguiente:
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¿En qué ocasión se sintieron más cerca del Salvador porque escogieron seguir Su consejo de vivir de manera diferente al mundo?
Para concluir, considere compartir la siguiente declaración del presidente Holland e invitar a los alumnos a considerar cómo podría aplicarse a ellos:
Como miembros de esta casa de Israel ampliamente definida, se nos ha mandado no ser como otras personas, no ser como el mundo, pero, al igual que el pueblo de Dios en los días de Samuel, afrontamos el fuerte deseo de ser como las personas con normas inferiores, que se dejan vencer por las modas del mundo en conducta o en creencia […].
Se nos ha llamado a apartarnos de la iniquidad […] y a ser la levadura espiritual para el mundo sin ser arrasados espiritualmente por él (“Escoge al Señor y a Su profeta”, págs. 6, 7).
Anime a los alumnos a determinar la forma en que podrían poner en práctica las verdades que han estudiado hoy. Anímelos a que anoten los pensamientos o las impresiones que provengan del Espíritu Santo.
¿Cómo puedo resistir las tentaciones de justificar la desobediencia a Dios?
Para comenzar, podría compartir la siguiente cita del presidente Russell M. Nelson y podrían analizar la pregunta que sigue:
Se encontrarán con personas que escogerán cuáles mandamientos guardarán e ignorarán otros que han escogido desobedecer. A ese enfoque, lo llamo el “bufé de la obediencia”. Esa práctica de seleccionar y escoger cuáles obedecer no funcionará; los conducirá al sufrimiento. Al prepararse para comparecer ante Dios, uno guarda todos Sus mandamientos. Requiere fe el obedecerlos, y el guardar Sus mandamientos fortalecerá esa fe (véase “Afrontar el futuro con fe”, Liahona, mayo de 2011, págs. 34–35).
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¿Por qué podría alguien decidir no guardar ciertos mandamientos de Dios?
A medida que los alumnos estudien 1 Samuel 15, invítelos a meditar en lo importante que es para ellos guardar todos los mandamientos de Dios. Aliéntelos a lo largo de la actividad de aprendizaje a considerar maneras en que podrían aumentar su obediencia a Dios.
Recuerde a los alumnos que Saúl era humilde y confiaba en Jehová cuando fue ungido rey de Israel (véanse 1 Samuel 9:21; 15:17). Sin embargo, a medida que tuvo más éxito, comenzó a confiar menos en el Señor y a apoyarse más en su propio juicio. Cuando los filisteos amenazaron con atacarlos, Saúl desobedeció a Jehová al ofrecer un sacrificio no autorizado (véase 1 Samuel 13:8–14. “¿Por qué estuvo mal que Saúl efectuara un holocausto?” en Ayudas para las Escrituras: Antiguo Testamento). Una experiencia similar ocurrió en 1 Samuel 15, cuando Saúl y su ejército no obedecieron al Señor con exactitud.
Invite a los alumnos a leer 1 Samuel 15:1–3, 7–9 y a buscar el mandamiento que el Señor dio a Saúl y a su ejército, y cómo reaccionaron ellos.
Podría ser útil reconocer que hay aspectos de este relato que pueden ser difíciles para los lectores modernos. Para obtener más información sobre el mandamiento de destruir a los amalecitas, véase “1 Samuel 15:1–3. ¿Por qué se le mandó a Saúl que “destruy[era] todo lo que t[enían]” los amalecitas?” en Ayudas para las Escrituras: Antiguo Testamento, y “How do we make sense of instances of violence in the scriptures?” en Topics and Questions, “Religion vs. Violence,” Biblioteca del Evangelio.
Señale que aunque no conocemos todas las razones por las que se mandó a Saúl matar a todos los amalecitas y a sus animales, aún podemos aprender lecciones importantes de la manera en que Saúl respondió al mandato de Jehová.
Invite a los alumnos a estudiar 1 Samuel 15:13–26 para saber cómo justificó Saúl sus acciones ante el profeta Samuel. Luego, podrían analizar las siguientes preguntas:
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¿Qué les llama la atención de la excusa de Saúl?
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¿Cuáles son algunos ejemplos de cómo las personas de nuestros días podrían justificar su desobediencia a los mandamientos de Dios?
Pida a los alumnos que compartan verdades que aprendieron del relato de Saúl y Samuel que puedan ayudarnos cuando nos sintamos tentados a justificar nuestra desobediencia. (Una verdad que los alumnos podrían mencionar es algo como esto: Escuchar y obedecer al Señor es mejor que ofrecer sacrificios). Si lo desea, también haga una pregunta como la siguiente:
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¿Qué relación hay entre la obediencia y el sacrificio?
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¿Qué diferencia puede marcar nuestro enfoque en cuanto a los mandamientos de Dios en nuestra relación con Él?
Considere dar tiempo a los alumnos para que busquen algunos pasajes de las Escrituras o citas de los líderes de la Iglesia que puedan ayudarlos a obedecer más plenamente los mandamientos del Padre Celestial y de Jesucristo. (También podría ayudar a los alumnos a practicar la técnica “Etiquetar pasajes de las Escrituras y otras enseñanzas del Evangelio” en Técnicas de estudio de las Escrituras creando una etiqueta llamada “Obediencia” para las enseñanzas que encuentren). Después de darles suficiente tiempo, invite a los alumnos a compartir uno de los pasajes de las Escrituras o citas que encontraron con un compañero o un grupo pequeño.
Invite a los alumnos a pensar en cómo pueden poner en práctica las verdades que estudiaron hoy. Anímelos a anotar las metas o los planes que se hayan propuesto. Testifique de las verdades que han analizado hoy.
¿Qué puede ayudarme a verme a mí mismo y a los demás de la manera en que lo hace el Señor?
Invite a los alumnos a analizar las preguntas siguientes con un compañero:
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¿Qué factores creen que influyen más en la primera impresión que tienen de una persona?
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¿Alguna vez han tenido una primera impresión de alguien que luego se demostró que estaba equivocada? ¿Qué les hizo cambiar de opinión?
Aliente a los alumnos a que, durante su estudio de hoy, presten atención a cualquier impresión del Espíritu Santo que pueda ayudarlos a verse a sí mismos y a los demás de la manera en que los ve Dios.
Explique que, debido a la desobediencia de Saúl, el Señor lo rechazó como rey de Israel (véanse 1 Samuel 13:13–14; 15:26–28). Invite a los alumnos a estudiar 1 Samuel 16:1–13 en busca de palabras y frases que muestren cómo ayudó Jehová a Samuel a encontrar a la persona que Él había escogido para reemplazar a Saúl. Luego podría hacer las preguntas siguientes:
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¿Qué guía importante le dio Jehová a Samuel para ayudarlo a reconocer al siguiente rey? (Los alumnos podrían reconocer una verdad como esta: Las personas miran la apariencia exterior, pero el Señor mira el corazón).
Para ayudar a los alumnos a comprender mejor esta verdad, considere mostrar las siguientes actividades breves e invitar a los alumnos a completar una o ambas:
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Busquen ejemplos en las Escrituras de cómo el Salvador miraba el corazón y el potencial interior de los demás en lugar de su apariencia o acciones externas. Pueden encontrar ejemplos por su cuenta o utilizar uno de los siguientes: Mateo 11:7–11; Lucas 19:1–10; Juan 8:1–11.
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Utilicen la Biblioteca del Evangelio para buscar citas de líderes de la Iglesia relacionadas con vernos a nosotros mismos y a los demás como nos ve Dios.
Invite a los alumnos a hablar con un compañero o en un grupo pequeño sobre lo que descubrieron. Luego, podría pedir a algunos alumnos que compartan sus reflexiones con el resto de la clase. Como parte de este análisis, considere mostrar el video “Oren para tener ojos para ver como Él lo hace” (6:27).
Considere mostrar las preguntas siguientes y dar tiempo a los alumnos para que escriban sus respuestas a una de ellas o a ambas.
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¿Cómo pueden aprender a verse a sí mismos y a los demás de la manera en que el Señor los ve?
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¿En qué ocasiones los ha ayudado el Señor a verse a sí mismos o a los demás como Él lo hace?
Después de darles suficiente tiempo, invite a algunos alumnos que así lo deseen a compartir respuestas que hayan anotado y que no sean demasiado personales.
Testifique de las verdades que han analizado durante el día de hoy. Anime a los alumnos a buscar la ayuda del Padre Celestial para verse a sí mismos y a los demás más como Él los ve.