2022
Disfrutar del día de reposo
Junio de 2022


Mensaje del Área

Disfrutar del día de reposo

Cuando escuchamos la palabra “delicia”, la asociamos con cosas que nos gusta mucho y que son placenteras; además, nos producen algo agradable en el ánimo y en los sentidos, y que disfrutamos.

En Isaías 58:13–14 leemos:

“Si retraes del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamas delicia, santo, glorioso de Jehová, y lo veneras, no andando en tus propios caminos, ni buscando tu propia voluntad ni hablando tus propias palabras,

“entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré cabalgar sobre las alturas de la tierra y te daré a comer la heredad de Jacob, tu padre, porque la boca de Jehová lo ha hablado”.

El Señor nos invita no solamente a guardar Su día de reposo, sino a que sea una delicia para nosotros, un disfrute, y esto requiere una búsqueda y un esfuerzo constante hasta llegar a “saborear” espiritualmente este día. A lo largo de mi vida, mi comprensión del mandamiento de guardar el día de reposo fue cambiando a medida que buscaba sinceramente hacer la voluntad del Señor y a la vez disfrutaba de este día maravilloso. Me gustaría compartir algunas cosas que hicimos como familia, que quizás los ayuden como individuos y como familia a deleitarse en él.

ESTUDIAR LA DOCTRINA. Estudien y analicen la doctrina relacionada con este mandamiento en las Escrituras y en las palabras de los profetas, y hagan el esfuerzo de aplicar lo que aún no están haciendo. Esto puede requerir un intento tras otro con sacrificio, oración, arrepentimiento, pero a medida que vayan haciendo pequeños cambios comenzarán a saborear lo delicioso de este día y comenzarán a “cabalgar sobre las alturas de la tierra” al recibir las bendiciones prometidas.

PREPARARSE ESPIRITUALMENTE. Comiencen a prepararse el lunes para el domingo siguiente. Esto puede incluir una o varias noches de hogar sobre el tema, además del estudio diario de las Escrituras, leer citas de profetas sobre el día de reposo. Esforzarnos en la semana por ser mejores seguidores de Jesucristo; así el domingo podremos ir a Su casa de oración y ofrecerle como sacrificio un corazón quebrantado y un espíritu contrito.

PREPARARSE TEMPORALMENTE. Algunas rutinas que marcan la diferencia: Los niños y los jóvenes deberían tener sus tareas de escuela y estudios completados el sábado, al igual que los adultos no debemos dejar trabajo para el domingo, salvo algunas excepciones. Planeemos y hagamos las compras de nuestros alimentos del domingo el viernes o el sábado. Preparemos la ropa que usaremos; debemos pensar que vamos a adorar al Señor y presentarnos ante Él para renovar nuestros convenios, por lo que mostramos reverencia al vestirnos formalmente con ropa limpia y adecuada para la ocasión (no es un evento casual).

CREAR NUESTRAS PROPIAS TRADICIONES DEL DÍA DE REPOSO. Estudiar las Escrituras, trabajar en historia familiar, visitar familiares, hermanos o hermanas solos o con necesidades, disfrutar de la naturaleza. Estas tradiciones fortalecerán nuestro testimonio y hallaremos que el día de reposo es una delicia.

Pregunté a algunos de nuestros hijos qué cosas habían aprendido en el hogar que los habían ayudado a deleitarse en el día de reposo, en su niñez y adolescencia.

Respondieron:

“El hecho de almorzar todos juntos. Luego salir a caminar y hablar de lo que habíamos aprendido en las clases”.

“Yo creo, que el ejemplo que nos dieron y nos enseñaron de ser rigurosos en la observancia fue determinante. Y más específicamente el hecho de que la asistencia a la Iglesia no fuera opcional, y lo mismo con el no hacer compras ni trabajar, siempre lo tuvimos como parte clave del día de reposo”.

“Siempre recuerdo la importancia de no mirar la televisión, porque no me ayudaba a centrarme en el día de reposo. Cuando tuve mi hogar pude ver la importancia de eso en mis hijos”.

“Aprendí que no se trata de una lista de cosas de qué hacer y no hacer, sino de una actitud de reverencia hacia el Señor; es un día donde nos olvidamos de las cosas mundanas y podemos elevar nuestros pensamientos; es un día para nutrir y fortalecer relaciones con nuestras familias tanto de este lado del velo como del otro”.

El presidente Russell M. Nelson nos enseña: “¿Cómo pueden asegurarse de que su comportamiento en el día de reposo les traiga gozo y regocijo? Además de ir a la Iglesia, participar de la Santa Cena y ser diligentes en sus llamamientos, ¿qué otras actividades ayudarían a que el día de reposo fuera una delicia para ustedes? ¿Qué señal le darán al Señor para mostrarle el amor que sienten por Él?…

“Además de pasar tiempo con la familia, ustedes pueden experimentar una verdadera delicia durante el día de reposo al hacer la obra de historia familiar.…

“Hagan del día de reposo una delicia al prestar servicio a otras personas, especialmente a quienes no se sientan bien o estén solos o necesitados. Levantar el ánimo de ellos también levantará el de ustedes.…

“El no buscar nuestra ‘propia voluntad’ en el día de reposo requiere autodisciplina y tal vez tengan que dejar de hacer algo que les guste, pero si escogen deleitarse en Jehová, no se permitirán tratarlo como otro día cualquiera. La rutina y las actividades recreativas se pueden hacer en otro momento”1.

Testifico que podemos disfrutar del día de reposo haciendo aquellas cosas que nos ayudan a estar más cerca del Señor. Él nos ama y desea darnos todas Sus bendiciones, pero para ello debemos hacer los cambios necesarios en nuestras vidas. Jesucristo es nuestro Salvador y Redentor y Su evangelio ha sido restaurado a través del profeta José Smith. De esto testifico en el sagrado nombre de Jesucristo. Amén.

Nota

  1. Russell M. Nelson, “El día de reposo es una delicia”, Liahona, mayo de 2015, pág. 130–132.