27 febrero – 5 marzo

Somos responsables de nuestro propio aprendizaje

Conforme lea y medite los pasajes de las Escrituras que se indican en esta reseña, anote las impresiones espirituales que reciba. Ven, sígueme para uso individual y familiar y esta reseña didáctica pueden ayudarle a entender estos pasajes de las Escrituras.

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Modifique las actividades según las edades de los niños a los que enseñe. Los niños más pequeños a menudo necesitan explicaciones detalladas, pero a medida que van creciendo pueden contribuir más y es posible que les resulte más fácil compartir lo que piensan. Conceda a los niños oportunidades para compartir, testificar y participar, y bríndeles ayuda según sea necesario. (Véase Enseñar a la manera del Salvador, págs. 29–30).

Invitar a compartir

La mejor forma de ayudar a los niños a aprender es inspirar en ellos el deseo de aprender por su propia cuenta. Anímelos a compartir sus sentimientos y experiencias sobre los principios y los relatos que estén aprendiendo.

Enseñar la doctrina

Niños pequeños

Las Escrituras son verdaderas

Los niños pueden obtener un testimonio de las Escrituras incluso antes de que tengan la suficiente edad para leerlas. A medida que estudie las Escrituras con los niños este año, puede ayudarles a saber por sí mismos que las Escrituras son verdaderas.

Posibles actividades

Muestre a los niños algunos libros de cuentos y pregúnteles cuáles son sus cuentos favoritos. Muéstreles las Escrituras y testifique que, a diferencia de los libros de cuentos, las Escrituras hablan de personas que realmente vivieron y de cosas que realmente sucedieron.
Comparta el mensaje de Josué 1:8 y de Moroni 10:4–5; para ello, ayude a los niños a repetir unas cuantas frases de esos pasajes y a entender que el Padre Celestial desea que estudiemos las Escrituras.
Lea uno de sus pasajes favoritos de las Escrituras a los niños y dígales por qué es especial para usted. Exprese su testimonio de que las Escrituras son verdaderas.
Canten juntos “Escudriñar, meditar y orar” (Canciones para los niños, pág. 66). Ayude a los niños a comprender el significado de la canción, piense o invente movimientos que acompañen la letra. Haga hincapié en la línea que dice “sé que ellas son la verdad”.

El Señor desea que yo aprenda acerca de Él.

Al leer Jeremías 29:12–13, piense en diferentes formas de ayudar a los niños a los que enseña a comprender cómo el Señor les ayudará a aprender acerca de Él.

Posibles actividades

Ayude a los niños a entender el significado de las palabras que se utilizan en Jeremías 29:12–13 que nos ayudan a saber cómo aprender sobre el Padre Celestial: invocaréis, oraréis, escucharé, buscaréis, hallaréis.
Permita que los niños coloreen la hoja de actividades de esta semana.
Esconda una lámina del Salvador y dé pistas a los niños para ayudarles a encontrarla. Ayude a los niños a darse cuenta de la forma en que las Escrituras son como “pistas” que nos ayudan a encontrar al Señor. Deje que se turnen para esconder la lámina y dar pistas a los otros niños.

Enseñar la doctrina

Niños mayores

Tengo que obtener mi propio testimonio de las Escrituras

Los niños a quienes enseña necesitarán su propio testimonio si han de mantener su fe fuerte cuando se les presente la adversidad. ¿Qué principios encuentra en Josué 1:8 y en Moroni 10:3–5 que pudieran ayudar a los niños a entender la forma de obtener su propio testimonio?

Posibles actividades

Lleve libros a la clase y pida a los niños que expliquen la diferencia entre los libros que son de ficción y los que no lo son. ¿El Antiguo Testamento es ficción o no? Comparta su testimonio de que el Antiguo Testamento es verdadero y anime a los niños a que ellos obtengan su propio testimonio de él.
Ayude a los niños a encontrar formas en que puedan fortalecer su testimonio de los principios que se encuentran en Josué 1:8 y en Moroni 10:3–5.
Pida a los niños que busquen en la letra de “Escudriñar, meditar y orar” (Canciones para los niños, pág. 66) maneras de fortalecer su testimonio de las Escrituras.
Pida a los niños que le ayuden a rotular cubos con frases que describan cosas que podemos hacer para edificar nuestro testimonio. Permítales “edificar” un testimonio usando los cubos.

Puedo estudiar las Escrituras por mí mismo.

Es posible que los niños no tengan confianza en su capacidad de estudiar las Escrituras. Conforme lea versículos con ellos y les haga preguntas, puede ayudarles a que se den cuenta de que ellos mismos pueden aprender de las Escrituras y encontrar tesoros valiosos.

Posibles actividades

¿Qué se enseña en Esdras 7:10 y en Salmos 119:105 sobre la manera de estudiar las Escrituras?
Lleve algo que proporcione luz, tal como una linterna o una lámpara (véase Salmos 119:105). Ayude a los niños a darse cuenta de la forma en que las Escrituras son como esos objetos.
¿Qué bendiciones podemos recibir cuando estudiamos las Escrituras? Pregunte si uno de los niños está dispuesto a compartir una bendición que haya recibido gracias al estudio de las Escrituras.

El Señor desea que yo aprenda acerca de Él.

Mientras lea Jeremías 29:12–13, piense en cuanto a la forma que usted aprende sobre el Señor. ¿Qué puede hacer para ayudar a los niños a aprender acerca de Él? ¿Cómo puede ayudarles a sentir que Él desea que lo busquen?

Posibles actividades

Invite a los niños a hablar sobre algún amigo que tengan y de cómo llegaron a ser amigos. Lean juntos Jeremías 29:12–13 para aprender cómo podemos llegar a conocer al Señor, aun cuando no podamos verlo. ¿En qué ocasiones se han sentido los niños cerca de Él?
Lleven a cabo un juego en el que se tenga que buscar, tal como buscar una palabra oculta entre otras palabras o buscar objetos ocultos en un dibujo (véase la hoja de actividades de esta semana). Hablen sobre lo que significa buscar a Dios “con todo vuestro corazón” (Jeremías 29:13).
Cante con los niños “Buscaré al Señor” (Canciones para los niños, pág. 67). ¿Qué significa buscar al Señor? ¿Cómo podemos hallarlo?

Alentar el aprendizaje en el hogar

¿De qué manera puede instar a los niños y a sus padres a aprender el Antiguo Testamento en el hogar? Por ejemplo, podría animar a los niños a memorizar “[Buscadme] con todo vuestro corazón” (Jeremías 29:13) y a compartir el versículo con su familia.

Tiempo para compartir

Tiempo de música

Los niños recordarán los mensajes de la música que aprendan en la Primaria a lo largo de su vida. Utilice Canciones para los niños para seleccionar una variedad de canciones que reafirmen la doctrina que los niños estén aprendiendo. A continuación figuran algunas que se relacionan con los principios que se enseñan en marzo, pero usted puede elegir otros:

“Soy un hijo de Dios”, Canciones para los niños, págs. 2–3.
“Escudriñar, meditar y orar”, Canciones para los niños, pág. 66.

Haga que los niños pongan atención a la letra de las canciones que enseñe doctrina y ayúdeles a definir cualquier palabra que desconozcan.

Oportunidades para compartir

Cree oportunidades para que los niños compartan la forma en que están aprendiendo y viviendo el Evangelio.

Niños pequeños

Invite a los niños a que hablen de regalos favoritos que hayan recibido en sus cumpleaños o en otros días de fiesta. Lleve un ejemplar de las Escrituras envuelto en papel de regalo, permita que un niño lo abra y testifique de que las Escrituras son un regalo que el Padre Celestial nos da.
Pida a algunos niños que hablen acerca de una habilidad nueva que hayan aprendido recientemente. Ayúdeles a darse cuenta de que el Padre Celestial nos envió a la tierra a aprender cómo llegar a ser como Él. Pídales que compartan lo que sepan en cuanto al Padre Celestial e ínstelos a hacer uso del tiempo para compartir como un momento en el que pueden expresar lo que estén aprendiendo acerca de Él.

Niños mayores

Ayude a los niños a elaborar calendarios sencillos que puedan utilizar para marcar cuán a menudo leen las Escrituras. Esos calendarios podrían ayudarles a leer las Escrituras todos los días.
Invite a los niños y a los maestros a compartir su pasaje favorito de las Escrituras. ¿Por qué son importantes para ellos esos pasajes de las Escrituras? ¿Cómo llegaron a saber que las Escrituras son verdaderas?