Voces de los jóvenes
Mi trastorno alimentario vs. mi verdadera identidad
Durante mucho tiempo luché con un trastorno alimentario llamado anorexia nerviosa, en el que comes cada vez menos y te preocupa aumentar de peso. Te afecta mentalmente: comienzas a sentirte culpable por comer y no comprendes las necesidades de tu cuerpo. Algo que no me ayudaba era ver constantemente estándares poco realistas en línea o en la escuela y compararme con mi familia y con otras personas que me rodeaban.
Definitivamente, mi trastorno alimentario era algo que ocultaba. Sin embargo, mi mamá notó los cambios en mi alimentación. Se sentó conmigo y me dio todo el tiempo que necesitaba para decirle lo que estaba sucediendo. Hubo muchas lágrimas, pero creo que el Espíritu la guio a saber que necesitaba ayuda. Juntas hicimos un plan y comenzamos poco a poco a trabajar en él.
Durante ese tiempo también decidí recibir mi bendición patriarcal. Quería saber cómo podía ser mi vida fuera de la oscuridad que estaba experimentando. Empecé preguntándole a Dios: “¿Quién soy?”, “¿me amas?” y “¿por qué estoy aquí?”. Lo primero que dijo el patriarca fue una respuesta a esas preguntas. Mi bendición me ayuda a aprender sobre mi verdadera identidad y lo que Dios tiene reservado para mí. Cada vez que la leo, siento el amor del Salvador por mí y recuerdo lo que puedo llegar a ser con Él.
Incluso con el apoyo de mi bendición patriarcal, mi familia, mi Padre Celestial y mi Salvador, me llevó mucho tiempo procesar los sentimientos que tenía acerca de mi cuerpo. Aún es difícil, a veces, aceptarme como soy y aceptar cómo me veo. Sin embargo, gracias a mis momentos difíciles, estoy empezando a apreciar el crecimiento y la luz que recibo al reconocer mi verdadera identidad. Soy una hija de un Padre Celestial y una discípula de Jesucristo; ambos me contemplan con amor y me dan ánimo, y eso es más importante que la opinión de cualquier otra persona.
Annalise B., 17 años, Georgia, EE. UU.
Le gusta trabajar en su pasantía en el hospital y crear arte y música para honrar a Dios y a Sus creaciones.