“Lección 2: La Primera Visión de José Smith”, La historia de los Santos de los Últimos Días: 1815–1846, Material para el maestro, 2018
“Lección 2”, La historia de los Santos de los Últimos Días: 1815–1846, Material para el maestro
Lección 2
La Primera Visión de José Smith
Introducción y cronología
En su juventud, José Smith procuró comprender lo que debía hacer para recibir la salvación y a qué iglesia debía unirse. Mientras leía la Biblia, sintió la inspiración de pedir guía a Dios. Cuando José Smith oró en una arboleda cerca de su casa, Dios el Padre y Jesucristo se le aparecieron y hablaron con él. Después de la experiencia de la visión, José Smith afirmó su veracidad, incluso cuando otras personas escogieron no creerle y lo persiguieron (véase José Smith—Historia 1:27).
23 de diciembre de 1805José Smith nace en Vermont.
Invierno de 1816–1817La familia Smith se traslada a Palmyra, Nueva York.
Alrededor de enero de 1819La familia Smith se traslada a una granja en Manchester, Nueva York.
Primavera de 1820José Smith ve a Dios el Padre y a Su Hijo Jesucristo y habla con Ellos.
Lecturas para el alumno
Santos: La historia de la Iglesia de Jesucristo en los últimos días, tomo I, El estandarte de la verdad, 1815–1846, 2018, capítulos 1–2.
Sugerencias para la enseñanza
José procura entender lo que debe hacer para recibir la salvación y a qué iglesia debe unirse
Escriba la siguiente frase en la pizarra: Guerra de palabras y tumulto de opiniones.
¿Qué pensamientos o imágenes les trae a la mente la frase “guerra de palabras y tumulto de opiniones”?
Si fuera necesario, explique que José Smith usó esa frase para describir los debates religiosos que presenció cuando tenía entre 12 y 14 años (véase José Smith—Historia 1:9–10).
¿Cuáles son algunos ejemplos de cómo las personas tienen guerras de palabras y tumulto de opiniones en nuestros días?
¿Cómo pueden estas guerras de palabras y opiniones hacer difícil que alguien encuentre o reconozca la verdad?
Invite a los alumnos a que, mientras estudian sobre la búsqueda de la verdad de José Smith, encuentren principios y doctrina que les puedan ayudar a encontrar y reconocer la verdad.
Muestre el mapa adjunto: “Nordeste de los Estados Unidos”.
Explique que, cuando José Smith tenía 11 años, su familia se trasladó de Vermont a Palmyra, Nueva York. Un poco más de un año después, los Smith hicieron arreglos para comprar 40 hectáreas de una tierra boscosa en Manchester, justo al sur de Palmyra. La familia preparó la tierra para que fuera una granja y, con el tiempo, edificaron una casa en la propiedad. (Quizás desee mostrar una imagen de la cabaña reconstruida de la familia Smith).
Explique que, en la región donde vivía la familia Smith cuando José era joven, había “una agitación extraordinaria sobre el tema de la religión” (José Smith—Historia 1:5). Muestre la siguiente declaración del profeta José Smith (1805–1844), que se registró en su historia de 1832, y pida a un alumno que la lea en voz alta:
Imagen
José Smith
Más tarde escribió: “Cuando tenía alrededor de 12 años, comencé a inquietarme seriamente con respecto a todo lo importante que tenía que ver con el bienestar de mi alma inmortal.
“… meditaba muchas cosas en el corazón sobre la situación del mundo de los humanos, las contenciones y divisiones, la maldad y las abominaciones, y la oscuridad que impregnaba la mente del género humano. Mi mente se turbó en gran manera, pues me sentí culpable de mis pecados […] Sentí pesar por mis pecados y por los pecados del mundo” (véase “Joseph Smith’s Accounts of the First Vision”, Circa Summer 1832 History, josephsmithpapers.org).
Explique que la preocupación de José por el bienestar de su alma lo motivó a asistir a reuniones de varias denominaciones religiosas durante los siguientes dos años de su vida.
¿Cómo contribuyó lo que afirmaban las diferentes denominaciones religiosas a la confusión de José? (Si fuera necesario, también podría dirigir a los alumnos a José Smith—Historia 1:5–10).
Basándose en su lectura del capítulo 1 de Santos: tomo I, ¿en qué forma la búsqueda de José de la verdad entre varias denominaciones religiosas lo llevó a tener una experiencia importante con las Escrituras?
Tal vez desee mostrar la siguiente declaración del élder B. H. Roberts (1857–1933), de los Setenta, e invitar a un alumno a leerla en voz alta:
Imagen
B. H. Roberts
“El reverendo Lane, de la iglesia metodista, predicó un sermón sobre el tema: ‘¿A qué iglesia me debo unir?’. Citó [Santiago 1:5]…
“El texto causó una profunda impresión en la mente de [José Smith]. Al volver a casa, lo leyó y lo meditó en profundidad” (B. H. Roberts, A Comprehensive History of the Church, tomo I, págs. 52–53; véase también Santos: tomo I, págs. 12–13).
Divida la clase en grupos de dos o grupos pequeños. Pídales que estudien José Smith—Historia 1:11–16 en su grupo y vean qué principios podemos aprender de la experiencia de José Smith que nos puedan ayudar en la búsqueda de la verdad. Invítelos a considerar la posibilidad de marcar lo que encuentren.
Cuando los alumnos hayan tenido suficiente tiempo de estudiar y analizar los versículos 11–16, invite a algunos alumnos a dar un informe de un principio que hayan reconocido. Al hacerlo, podría pedirles que expliquen cómo nos puede ayudar ese principio en nuestra búsqueda de la verdad.
Si los alumnos no lo mencionan, resalte el principio que se enseña en Santiago 1:5 (como se encuentra registrado en José Smith—Historia 1:11): Si pedimos a Dios, Él nos dará la sabiduría que buscamos. Muestre la siguiente declaración del presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia, y pida a un alumno que la lea en voz alta:
Imagen
Henry B. Eyring
“El criterio humano y el razonamiento lógico no serán suficientes para obtener respuestas a las preguntas más importantes de la vida. Necesitamos revelación de Dios” (Henry B. Eyring, “Revelación continua”, Liahona, noviembre de 2014, pág. 70).
¿Cuáles son algunas formas en las que han sido bendecidos al saber que pueden preguntar a Dios y recibir sabiduría mediante la revelación?
Aliente a los alumnos a acudir a Dios cuando tengan necesidad de sabiduría y revelación.
Dios el Padre y Su Hijo, Jesucristo, se aparecen a José Smith en respuesta a su oración
Invite a varios alumnos a turnarse para leer en voz alta José Smith—Historia 1:17–19, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para saber cómo se contestó la oración de José Smith.
¿Qué verdades podemos aprender de los versículos 17–19? (Los alumnos podrían reconocer diferentes verdades, entre ellas la siguiente: Dios el Padre y Su Hijo, Jesucristo, se aparecieron a José Smith y hablaron con él. Escriba esa verdad en la pizarra).
Haga referencia a la frase “guerra de palabras y tumulto de opiniones”, que está en la pizarra.
¿Cómo nos puede ayudar nuestro conocimiento de la visión de José Smith del Padre Celestial y Jesucristo a superar la confusión que resulta de las guerras de palabras y tumultos de opiniones de nuestros días?
Explique que, además del relato de la Primera Visión que se registró en 1838 y que más adelante se publicó en José Smith—Historia, el profeta José Smith también registró un relato en su historia de 1832, dictó un relato para su diario en 1835, y dictó otro relato en 1842 en una carta dirigida a un editor de periódico llamado John Wentworth. También hay cinco descripciones secundarias de la Primera Visión que registraron contemporarios de José Smith (véase “Relatos de la Primera Visión”, Temas del Evangelio, topics.ChurchofJesusChrist.org).
Muestre la siguiente declaración e invite a un alumno a leerla en voz alta:
“Los varios relatos de la Primera Visión narran una historia uniforme, aunque naturalmente difieren en énfasis y detalle. Los historiadores anticipan que cuando una persona vuelve a contar una experiencia en varios entornos a diferentes audiencias a lo largo de muchos años, cada relato hará hincapié en diversos aspectos de la experiencia y contendrá detalles únicos. De hecho, existen diferencias similares a las de los relatos de la Primera Visión en los múltiples relatos de las Escrituras de la visión de Pablo en el camino a Damasco y de la experiencia de los apóstoles en el Monte de la Transfiguración. Sin embargo, a pesar de las diferencias, existe una uniformidad básica a través de todos los relatos de la Primera Visión. Algunos han argumentado erróneamente que cualquier variación en el relato de la historia es evidencia de que es una invención. Pero, por el contrario, el abundante registro histórico nos permite aprender más acerca de este notable acontecimiento de lo que podríamos si estuviera menos documentado” (“Relatos de la Primera Visión”, Temas del Evangelio, ChurchofJesusChrist.org/topics).
Para ayudar a los alumnos a entender mejor la experiencia de José Smith de ver y hablar con el Padre Celestial y Jesucristo, divida la clase en tres grupos, y ofrezca a cada alumno una copia del volante adjunto: “Otros relatos de la Primera Visión que dio José Smith”. Asigne a cada grupo que estudie uno de los relatos de la Primera Visión en el volante y que busquen los detalles que les ayuden a entender mejor lo que sucedió durante la Primera Visión. Invite a los alumnos a marcar los detalles que les llamen la atención.
Otros relatos de la Primera Visión que dio José Smith
“Clamé al Señor pidiendo misericordia, porque no existía nadie más a quien dirigirme para obtenerla. El Señor escuchó mi ruego en aquel lugar solitario y, mientras me encontraba en actitud de acudir al Señor, en el decimosexto año de mi vida, una columna de luz, más brillante que el sol, descendió hasta descansar sobre mí y fui lleno del Espíritu de Dios. El Señor abrió los cielos sobre mí y vi al Señor.
“Y Él me habló y me dijo: ‘José, hijo mío, tus pecados te son perdonados. Sigue tu camino, anda en mis decretos y guarda mis mandamientos. He aquí, Yo soy el Señor de gloria. Fui crucificado por el mundo para que todos los que crean en mi nombre puedan tener la vida eterna. He aquí, en este momento el mundo yace en el pecado y no hay quien haga lo bueno, ni siquiera uno. Se han apartado de mi Evangelio y no guardan mis mandamientos; con sus labios me honran, pero su corazón está lejos de mí. Mi ira está encendida en contra de los habitantes de la tierra y caerá sobre ellos de acuerdo con su impiedad y para llevar a cabo aquello que se ha declarado por boca de los profetas y los apóstoles. He aquí, vendré pronto, como está escrito, en las nubes y revestido de la gloria de mi Padre’.
“Y mi alma se llenó de amor, y por muchos días me regocijé y sentí una gran dicha”.
Diario, del 9 al 11 de noviembre de 1835
“Pude elevar al Señor una ferviente oración. Apareció una columna de fuego arriba de mi cabeza; esta gradualmente descendió hasta descansar sobre mí y fui lleno de un gozo indescriptible. Un Personaje surgió de entre medio de esa columna de fuego, la cual se extendía a todas partes y, aun así, no había consumido nada. Enseguida apareció otro Personaje, de la misma manera que lo hizo el Primero. Él me dijo: ‘Tus pecados te son perdonados’, y me testificó que Jesucristo es el Hijo de Dios. Y vi muchos ángeles en esa visión”.
“Historia de la Iglesia”, 1º de marzo de 1842 (La Carta a Wentworth)
“Me retiré a un lugar aislado en el bosque y comencé a invocar al Señor. Mientras me encontraba concentrado en ferviente súplica, mi mente fue apartada de todo lo que me rodeaba y me envolvió una visión celestial, y vi a dos gloriosos Personajes, que se asemejaban exactamente el uno al otro en rasgos y apariencia, rodeados de una luz brillante que eclipsó la del sol al mediodía. Me dijeron que todas las denominaciones religiosas creían doctrinas incorrectas y que ninguna era reconocida por Dios como Su Iglesia y reino; y se me mandó expresamente ‘no seguirlas’, al mismo tiempo que recibí la promesa de que la plenitud del Evangelio se me daría a conocer en un tiempo futuro”.
Después de que los alumnos hayan tenido suficiente tiempo para estudiar, invite a los alumnos de cada grupo a dar un informe a la clase de lo que encontraron.
¿Cómo les ayudan los detalles de los diferentes relatos que hemos analizado a entender mejor la experiencia de José Smith de la Primera Visión?
Basándose en estos relatos, ¿cómo ayudó el mensaje del Salvador a José con sus preocupaciones sobre el bienestar de su alma?
Invite a los alumnos a meditar en las siguientes preguntas y a registrar sus respuestas en sus diarios de estudio:
¿Cómo han llegado a saber que José Smith vio al Padre Celestial y a Jesucristo, y habló con Ellos?
¿Cómo ha influido en ustedes el tener un testimonio de la Primera Visión?
Invite a uno o más alumnos a compartir sus respuestas con la clase si se sienten cómodos de hacerlo.
José Smith afirma la veracidad de la Primera Visión
Explique que un predicador y otras personas en la comunidad de José Smith rechazaron su testimonio y lo persiguieron cuando él les contó acerca de la visión que había tenido (véase José Smith—Historia 1:21–23).
Invite a un alumno a leer en voz alta José Smith—Historia 1:24–25. Pida a la clase que siga la lectura para saber cómo respondió José Smith cuando las personas escogieron no creer su testimonio. Invite a los alumnos a marcar las frases que les llamen la atención.
¿Qué frases en los versículos 24–25 les llaman la atención? ¿Por qué?
¿Qué principios podemos aprender del ejemplo de José Smith de permanecer fiel a su testimonio? (Los alumnos podrían reconocer principios como el siguiente: El conocimiento que recibimos de Dios es verdadero aun cuando el mundo lo rechace. Podemos escoger permanecer fieles a nuestro testimonio aun cuando se nos odie o se nos persiga por hacerlo. Causamos desagrado a Dios y estamos bajo condenación si no permanecemos fieles al testimonio que Él nos ha dado).
Resalte que, tal como en la época de José Smith, hay personas hoy en día que procuran desacreditar la veracidad del testimonio de José Smith sobre la Primera Visión. Muestre la siguiente declaración del presidente Gordon B. Hinckley (1910–2008) sobre la Primera Visión, y pida a un alumno que la lea en voz alta:
Imagen
Gordon B. Hinckley
“Durante más de siglo y medio, enemigos, críticos y algunos que se consideran eruditos han malgastado su vida intentando desacreditar la validez de aquella visión. Claro que no pueden entenderla. Las cosas de Dios se entienden por el Espíritu de Dios. No había habido nada de semejante magnitud desde que el Hijo de Dios había caminado sobre la tierra durante Su vida terrenal. Sin ello como piedra angular de nuestra fe y de nuestra organización, no tenemos nada. Con ello, lo tenemos todo.
“Se ha escrito mucho y aún mucho se escribirá en un esfuerzo por desmentir esa visión […] mas el testimonio del Espíritu Santo, que han experimentado gran cantidad de personas desde que ocurrió, testifica que es verdad, que sucedió tal como José Smith dijo que sucedió” (Gordon B. Hinckley, “Cuatro piedras angulares de fe”, Liahona, febrero de 2004, pág. 5).
¿En qué maneras es la Primera Visión de José Smith una “piedra angular” de nuestra fe?
¿Qué podemos hacer que nos ayudará a permanecer fieles a nuestro testimonio de la Primera Visión?
Comparta su testimonio de las verdades que se han analizado en esta lección. Aliente a los alumnos a actuar de acuerdo con esas verdades.
Invite a los alumnos a leer los capítulos 3–4 de Santos: tomo I como preparación para la siguiente clase.
Imagen
Volante: Otros relatos de la Primera Visión que dio José Smith
