2021
¿Cómo vas a dejar todo por servir en una misión?
Diciembre de 2021


Historias de Fe

¿Cómo vas a dejar todo por servir en una misión?

Cuando conocí por primera vez La Iglesia de Jesucristo de los Santos Últimos Días fue impresionante, dos misioneros me contactaron en la calle. Gracias a sus enseñanzas acepté una fecha de bautismo. Después de 6 meses de ser miembro de la Iglesia, al compartir el Evangelio con mi familia, mis padres decidieron bautizarse y ser miembros de la Iglesia.

Recuerdo cuando el obispo me llamó para dialogar y me propuso para salir a una misión de tiempo completo. En ese momento me quedé impresionada y me puse a pensar en las cosas temporales que tenía en ese momento y que tendría que dejar. Me preguntaba cómo podría dejar mis estudios, mi trabajo, mi familia; entonces el obispo me invitó a que realizara una oración y que preguntara al Señor si tenía que servir en una misión de tiempo completo.

Esa noche, leí mis Escrituras, me arrodillé y realicé mi oración con verdadera intención, y en ese momento pude tener mi respuesta. Sentí, por medio del Espíritu Santo, una calidez tan única en mi corazón, de la misma manera que cuando recibí la respuesta de aceptar bautizarme; sentí la confirmación que debía servir en una misión.

Le comenté esta experiencia a mi familia y se quedaron muy impactados por la decisión que había tomado; me preguntaron: “¿cómo vas a dejar todo por servir en una misión?”.

Al inicio, pensé en ello porque me esforcé tanto para terminar mi carrera y obtener el puesto de trabajo con todos mis beneficios y dejarlo todo. En ese momento recordé a los misioneros que me enseñaron, cuando me comentaron que confiara en el Señor, así que decidí poner al Señor primero en todas las cosas y salí a servir una misión. Cuando llegó mi llamamiento, a la Misión de Guatemala, me sentí muy contenta. Debido a la pandemia, me reasignaron a la Misión Perú Lima Oeste, y mi alegría y júbilo permanecen intactas, pues adonde me mande iré.

Sé que esta es la obra más grande y sé que nuestro Padre Celestial protege a nuestras familias mientras servimos en Su obra. He visto grandes bendiciones y milagros en mi familia, y puedo ver cómo ellos ahora también comparten el evangelio de Jesucristo. Esta es mi pequeña historia y la comparto en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén.