2002
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octubre de 2002


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Complacido Con el Ejemplar Sobre la Obra Misional

Quedé complacido al encontrar muchos artículos sobre la obra misional en el ejemplar de la revista Liahona de octubre de 2001, pues me ayudaron a tener una mayor comprensión de lo importante que es la misión y qué se siente al ser misionero regular. Disfruté de la lectura de cada artículo y éstos fortalecieron mi deseo de servir en una misión.

Christián Herrera Mejía, Barrio Framboyanes, Estaca Izapa, Tapachula, México

Conmovido Por Mi Primera Revista Liahona

Ya tenía el deseo de servir en una misión, pero me conmovió tanto el ejemplar de la revista Liahona (en inglés) de octubre de 2001, que sentí que debía empezar de inmediato a prestar servicio misional. El mes de octubre de 2001 fue el primer mes de nuestra suscripción y la revista me gusta mucho.

Allwyn Arokia Raj Kilbert, Rama Coimbatore 1, Distrito Bangalore, India

Pedí Un Ejemplar

Tras unirme a la Iglesia, seguí oyendo sobre la revista Liahona (en francés), pero en realidad no sabía lo que era, hasta que un día le pedí un ejemplar a un amigo. Después de leerlo, me sentí lleno de gozo y del Espíritu. Gracias a la revista, me estoy preparando para ir a la misión.

Marc Henry Simon, Rama Les Cayes, Distrito Les Cayes, Haití

Un Lector Fiel de Albania

Soy un lector fiel de la revista Liahona (en albanés) y me gustan mucho la información, las noticias, los mensajes y los relatos que se publican en ella. Me siento agradecido por poder leerla en mi propio idioma.

Me bauticé en septiembre de 2001 a los 70 años de edad. Siete años antes quedé paralizado del brazo y de la pierna izquierdos; mientras estaba enfermo, los misioneros llegaron a mi casa y me hallaron confinado en cama, por lo que me dieron bendiciones del sacerdocio y también me enseñaron el Evangelio de Jesucristo. Había perdido el deseo y la voluntad de leer hasta que compartieron conmigo un folleto sobre José Smith. Les pedí cualquier cosa que me pudieran dar para leer. Aunque mi esposa se bautizó pronto, a mí me llevó más tiempo; pero ahora me siento agradecido por ser miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Agim Shehu, Rama Tirana 4, Distrito Tirana, Albania