Ven, sígueme 2024
1 – 7 abril: “Reconciliaos con [Dios] por medio de la expiación de Cristo”. Jacob 1–4


“1 – 7 abril: ‘Reconciliaos con [Dios] por medio de la expiación de Cristo’. Jacob 1–4”, Ven, sígueme — Para el hogar y la Iglesia: Libro de Mormón 2024 (2024)

“1 – 7 abril. Jacob 1–4”, Ven, sígueme — Para el hogar y la Iglesia: 2024 (2024)

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Una mujer arrodillada a los pies de Jesús

Forgiven [Perdonada], por Greg Olsen Utilizado con permiso. www.GregOlsen.com

1 – 7 abril: “Reconciliaos con [Dios] por medio de la expiación de Cristo”

Jacob 1–4

Los nefitas consideraban a Nefi su “gran protector” (Jacob 1:10). También los había protegido en contra de los peligros espirituales, al advertirles del pecado y exhortarlos a venir a Cristo. Ahora esa tarea había recaído en Jacob, a quien Nefi había consagrado para ser sacerdote y maestro (véase Jacob 1:18). Jacob sentía la responsabilidad de amonestar osadamente a quienes estaban “empez[ando] a obrar en el pecado”, y a la vez consolar “el alma herida” de aquellos que habían sido heridos por los pecados de otras personas (véase Jacob 2:5–9). ¿Cómo haría ambas cosas? Los guiaría hacia Jesucristo, ya que ambos grupos necesitaban la sanación del Salvador (véase Jacob 4). Al igual que el mensaje de Nefi antes de él, el testimonio de Jacob fue un llamado a “reconcilia[rse] con [Dios] por medio de la expiación de Cristo” (Jacob 4:11).

Ideas para aprender en el hogar y en la Iglesia

Jacob 1:6–8, 15–19; 2:1–11

Tengo un “mandato del Señor”

Para Jacob, enseñar la palabra de Dios era un “mandato del Señor”, así que trabajaba diligentemente para “magnifica[r] [su] oficio” (Jacob 1:17, 19). ¿Qué significan para ti esas palabras que utilizó Jacob? Piensa en las lupas, cuyas lentes aumentan las imágenes. “Magnificar” significa engrandecer. ¿Comprendes la idea? Al meditar en Jacob 1:6–8, 15–19 y 2:1–11, piensa en los mandatos que el Señor podría tener para ti. ¿Qué te sientes inspirado a hacer para “magnificarlos”?

Véanse también “A quien el Señor llama, Él capacita”, en Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Thomas S. Monson, 2022, págs. 209–219; “Elévense a la altura de su llamamiento” (video), Biblioteca del Evangelio.

Jacob 2:12–21

“No permit[á]is que este orgullo de vuestros corazones destruy[a] vuestras almas”

Los nefitas tenían problemas con el orgullo y con centrarse en las riquezas (véase Jacob 2:13), y tales problemas no han sido exclusivos de ellos ni de su época. ¿De qué forma el adversario promueve el amor a las riquezas en la actualidad? Después de leer Jacob 2:12–21, describe con tus propias palabras cómo Dios desea que veas las riquezas materiales. Alguna canción como “Tú me has dado muchas bendiciones, Dios” (Himnos, nro. 137), por ejemplo, podría darte otra perspectiva. ¿Qué te sientes inspirado a hacer con respecto a lo que estás aprendiendo?

Jacob 2:22–35; 3:10–12

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ícono de Seminario
Dios se deleita en la castidad

Al leer Jacob 2:22–35; 3:10–12, ¿qué encuentras que te ayude a entender por qué la castidad es tan importante para Dios? ¿Cuáles son algunas de las consecuencias negativas de la inmoralidad, tanto en la época de Jacob, como en la nuestra? ¿Cuáles son las bendiciones de vivir una vida casta?

El élder David A. Bednar enseñó que vivimos “en un mundo que se burla cada vez más de la santidad de la procreación” (“Creemos en ser castos”, Liahona, mayo de 2013, págs. 41–44). ¿Cómo puedes ayudar a los demás a entender por qué obedeces la ley de castidad? Un buen punto de partida es la explicación de las normas de Dios en cuanto a los sentimientos y las relaciones sexuales que aparece en “Tu cuerpo es sagrado”, en Para la Fortaleza de la Juventud: Una guía para tomar decisiones (páginas 22–29). ¿Qué más encuentras en ese material que pueda ayudarte a explicar por qué vives la ley de castidad?

Podrías encontrar más respuestas en el mensaje del élder Bednar antes mencionado, o bien en el video “Yo escojo ser limpio” (Biblioteca del Evangelio).

¿En qué se diferencia la norma de Dios de la pureza sexual de otros mensajes que podrías encontrar en la vida? ¿Cuáles son las bendiciones de vivir una vida casta?

Véanse también Temas del Evangelio, “Virtud”, Biblioteca del Evangelio; “Atracción hacia personas del mismo sexo”, en la colección “Ayuda para la vida”, en la Biblioteca del Evangelio.

Jacob 4

Puedo reconciliarme con Dios por medio de la expiación de Jesucristo

Jacob rogó a su pueblo que se “reconcilia[ra] con [Dios] por medio de la expiación de Cristo” (Jacob 4:11). Una de las definiciones de reconciliar es restablecer la amistad o la armonía. Al meditar en tu propia vida, piensa en alguna ocasión en la que te hayas sentido distante del Padre Celestial. ¿De qué manera te ayuda el Salvador a restablecer esa relación? ¿Qué consejo puedes hallar en este capítulo que te ayude a reconciliarte con Dios? (Véanse los versículos 4–14).

¿Qué ideas adicionales te brinda Mateo 5:23–24? ¿Cómo puede el Salvador ayudarte a reconciliarte con Dios y con otras personas?

Véase también 2 Nefi 10:24.

Jacob 4:8–18

Puedo evitar la ceguera espiritual al centrarme en el Salvador

Al esforzarse para que su pueblo se volviera de modo más pleno al Señor, Jacob les advirtió que no fueran ciegos espiritualmente y que no despreciaran las “palabras de claridad” del Evangelio (véase Jacob 4:13–14). De acuerdo con Jacob 4:8–18, ¿qué podemos hacer para evitar la ceguera espiritual?

Véase también Quentin L. Cook, “Traspasar lo señalado”, Liahona, marzo de 2003, págs. 20–24.

Cuando enseñaba, el Salvador utilizaba comparaciones con elementos de la vida cotidiana. Las parábolas de Jesús ayudaban a la gente a hallar verdades espirituales en sus experiencias comunes. Trata de hacer lo mismo cuando enseñes. Por ejemplo, cuando enseñes Jacob 4:8–18, podrías preguntar a quienes aprenden si alguna vez les han examinado la vista. ¿De qué modo les evaluó el médico la vista? ¿Cómo podemos evaluar nuestra vista espiritual?

Para obtener más ideas, consulta los ejemplares de este mes de las revistas Liahona y Para la Fortaleza de la Juventud.

Ideas para enseñar a los niños

Jacob 2:8

Dios sana el alma herida

  • A fin de ayudar a los niños a entender cómo un “alma herida” puede ser sanada, podrían analizar juntos la forma en que el cuerpo puede quedar herido y lo que lo ayuda a sanar. Los niños podrían hablar de ocasiones en las que se hayan lastimado y de lo que los haya ayudado a sanar. Hasta podrías mostrarles vendas o medicamentos como parte de la conversación. Tal vez podrías contarles de qué manera el Salvador te ha ayudado cuando tu espíritu necesitaba ser sanado.

Jacob 2:17–19

Al compartir, ayudo a los que tienen necesidades

  • Algunas personas de la época de Jacob eran muy ricas, pero no querían compartir lo que tenían con los demás. A medida que leas a los niños las enseñanzas de Jacob que se hallan en Jacob 2:17–19, podrías entregarles imágenes u objetos que puedan sostener y que coincidan con algunas palabras o frases de esos versículos. Podrías explicarles que estás compartiendo esos objetos con ellos e invitarlos a que los compartan contigo o los unos con los otros. Habla de cómo te sientes cuando compartes lo tuyo. ¿Qué otra cosa podríamos compartir con los demás para ayudarlos a sentirse felices?

  • Después de leer juntos Jacob 2:17, tal vez los niños podrían mencionar algunas de las bendiciones que el Padre Celestial ha compartido con ellos. ¿Por qué desea Él que compartamos los unos con los otros?

Jacob 4:6, 10–11

Puedo fortalecer mi fe en Jesucristo

  • La fe de Jacob en Cristo era tan fuerte que era inquebrantable. Para enseñar a los niños cómo podemos desarrollar una fe como esa, podrías preguntarles qué hacemos para fortalecer el cuerpo. ¿Qué podemos hacer para que nuestra fe en Jesucristo sea más fuerte? Lean Jacob 4:6 juntos para ayudarlos a descubrir lo que Jacob y su pueblo hicieron para que su fe fuera “inquebrantable”.

  • Otra manera de ayudar a los niños a entender el significado de tener una fe “inquebrantable” podría ser buscar un árbol grande y pedirles que sacudan las ramas una a la vez. Luego, indícales que intenten sacudir el tronco. ¿Por qué es más difícil sacudir el tronco? ¿Qué frases o palabras de Jacob 4:6, 10–11 describen lo que podemos hacer para que nuestra fe en Jesucristo llegue a ser inquebrantable?

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    Árbol grande en un parque

    Tal como el tronco de un árbol, nuestra fe en Cristo puede ser “inquebrantable”

  • A fin de encontrar otras comparaciones para enseñar a los niños en cuanto a una fe inquebrantable en Jesucristo, véase Neil L. Andersen, “Torbellinos espirituales” (Liahona, mayo de 2014, págs. 18–21; y el video “Torbellinos espirituales“) o “El sabio y el imprudente” (Canciones para los niños, pág. 132; véase también Mateo 7:24–27).

Para obtener más ideas, consulta el ejemplar de este mes de la revista El Amigo.

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Jacob escribiendo en las planchas de oro

I Will Send Their Words Forth (Jacob the Teacher) [Transmitiré las palabras de ellos (Jacob, el maestro)], por Elspeth Caitlin Young