Campeones de la oración familiar

Por Charlotte Larcabal

Revistas de la Iglesia

Diez ideas de los jóvenes para ayudar a tu familia a alcanzar nuevas alturas al estar de rodillas.

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¿Sabías que la oración familiar es un mandamiento? Jesucristo mandó a los nefitas “… [orar] al Padre en vuestras familias” (3 Nefi 18:21). Desde entonces, los profetas y apóstoles han hecho eco de esa enseñanza. Por ejemplo, el élder Richard G. Scott (1928–2015), del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó que debe ser “… una prioridad no negociable en tu vida diaria”¹.

¡La oración familiar es importante! Es, además, la clave para acercarse mutuamente y al Padre Celestial. Y no depende solamente de mamá y papá; ¡tú puedes ejercer una gran influencia sobre tu familia! Puedes ser un campeón de la oración familiar.

Sé un campeón

¿Qué es un campeón de la oración familiar? Al pensar en los campeones, tal vez imagines a personas que son las mejores en algo. Ese es un tipo de campeón: el ganador del primer premio o el primer lugar en una competencia. Otro tipo de campeón es alguien que lucha por algo, un intercesor o defensor. Así que un campeón de la oración familiar es alguien que lucha a favor de ella, que la protege y que la defiende.

¿Crees que puedes hacer eso?

A continuación figuran algunos consejos para ser un campeón de la oración familiar:

Trata de no hacer oraciones repetitivas cuando sea tu turno de orar. Jeanel S., 14 años, Idaho, EE. UU.
Haz una lista de las cosas sobre las que necesitan orar en familia. Samantha B., 17 años, Alabama, EE. UU.
En mi familia siempre tratamos de expresar gratitud más que pedir cosas. Siempre tratamos de tener un espíritu de agradecimiento a nuestro Padre Celestial, así que trato de ayudar a mis hermanos con eso. Karla S., 17 años, Tijuana, México
Recuérdales a todos. Si en tu familia no tienen la costumbre de orar juntos, un buen comienzo sería hacer oraciones personales. Camille G., 18 años, Alabama, EE. UU.
Levántate unos minutos más temprano para asegurarte de hacer la oración familiar antes de irte. Puedes programar una alarma que te avise cuándo es hora de hacer la oración familiar. Tess Z., 16 años, Texas, EE. UU.
Escucha las palabras que pronuncie la persona que haga la oración, y repítelas en tu mente. Después fíjate qué puedes recordar de la oración. Decir “amén” significa “que así sea” o que estás de acuerdo. Realmente quiero saber y comprender con qué estoy de acuerdo. Grace M., 14 años, California, EE. UU.
Ten una buena actitud en cuanto a la oración familiar. No pienses que es algo que debes tachar de la lista antes de ir a dormir. Recuerda que la oración familiar puede unir a tu familia. Ranoah H., 17 años, Alabama, EE. UU.
Trata de ayudar a todos tus hermanos. Incluso simplemente tener una buena actitud y ser un buen ejemplo ayuda mucho. Will W., 14 años, California, EE. UU.
Piensa sobre qué quieres orar antes de hacer la oración. Lyric A., 13 años, Arkansas, EE. UU.
Recuerda que nada es más importante que eso. Pasar tiempo con tu familia y asegurarte de tener ese tiempo de calidad para leer las Escrituras y orar es realmente importante. Isaac S., 14 años, California, EE. UU.