Daniel 1–7: Lección 142

Daniel 1

“Daniel se propuso […] no contaminarse”

Cuando nos encontramos con situaciones que ponen a prueba nuestra determinación de obedecer los mandamientos del Señor, ¿cedemos o permanecemos firmes? Como siervos en la corte del rey Nabucodonosor, Daniel y sus amigos recibieron instrucciones de quebrantar las leyes de salud reveladas por el Señor, pero ellos permanecieron firmes. Esta lección puede ayudar a los alumnos a fortalecer su compromiso de obedecer la Palabra de Sabiduría del Señor.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a estudiar la reseña de “Palabra de Sabiduría” en Temas y preguntas en la Biblioteca del Evangelio. Anímelos a analizar la forma en que ellos u otras personas han sido bendecidos por guardar la Palabra de Sabiduría del Señor.

Posibles actividades de aprendizaje

¿Qué harías?

Considere comenzar la clase describiendo a un joven al que le encanta aceptar desafíos de probar cosas nuevas, como en el ejemplo siguiente. Podría cambiar el nombre y las actividades para que sus alumnos se identifiquen más con ellas.

Mateo es un miembro activo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Como tiene la reputación de probar cosas nuevas, sus amigos a menudo le hacen desafíos como los siguientes:

• Una vez, un amigo lo desafió a correr un maratón y Mateo aceptó el desafío.

• En cierta ocasión, un amigo lo desafió a zambullirse en un lago helado y Mateo aceptó el desafío.

• En otro momento, un amigo lo desafió a que se presentara a una chica nueva en la escuela y Mateo aceptó el desafío.

  Después de leer el desafío siguiente, haga una pausa y plantee la pregunta que le sigue.

• Un día, los amigos de Mateo lo desafían a beber alcohol en una fiesta.

• ¿Cómo crees que Mateo podrá reaccionar? ¿Por qué?

  Podría preguntar a los alumnos si la presión para quebrantar la Palabra de Sabiduría es habitual en su región. También podrían describir situaciones en las que podrían sentirse presionados a quebrantarla. Considere alentar a los que podrían haber quebrantado ese mandamiento a recordar que el Señor los ayudará a medida que acudan a Él y se arrepientan. Asegúreles que el Señor los ama y los invita a seguir intentándolo.

  A fin de evaluar su propio compromiso de obedecer la Palabra de Sabiduría, los alumnos podrían responder las preguntas siguientes en su diario de estudio.

• ¿Cómo crees que responderías tú en una situación similar? ¿Por qué?

• ¿Cómo crees que responderías si te ofrecieran algo más común, como café o té?

A medida que estudies Daniel 1 hoy, presta atención a los pensamientos y sentimientos que el Padre Celestial podría darte por medio del Espíritu Santo. Busca maneras de fortalecer tu compromiso de obedecer la Palabra de Sabiduría del Señor.

Daniel obedeció al Señor

Alrededor del año 606 a. C., Nabucodonosor, rey de Babilonia, atacó Jerusalén y llevó cautivos a Babilonia a determinados israelitas. El rey mandó que se formara a algunos de los jóvenes israelitas para prestar servicio en su casa. Entre ellos había cuatro llamados Daniel, Ananías, Misael y Azarías. En Babilonia, les cambiaron sus nombres por Beltsasar, Sadrac, Mesac y Abed-nego (véase Daniel 1:1–7).

Cuando los alumnos lean los versículos siguientes, considere hacer una pausa después del versículo 10 para hacer las preguntas a continuación. Como alternativa, podría invitarlos a seguir la lectura en silencio en sus ejemplares de las Escrituras mientras muestra el video “Dios les dio conocimiento” (disponible en LaIglesiadeJesucristo.org) desde 0:52 hasta 5:15, haciendo una pausa en el minuto 4:18 para analizar las preguntas.

Lee Daniel 1:5, 8–14 para saber lo que el rey mandó hacer a Daniel y a sus amigos.

• ¿Por qué ese pedido podría haber representado un desafío para ellos?

• ¿Por qué crees que valdría la pena arriesgarse a despertar la ira del rey por no comer ni beber ciertas cosas?

Podría recordar a los alumnos que en la época de Daniel, los israelitas seguían la ley de Moisés, que incluía ciertas restricciones dietéticas (véase Deuteronomio 14). También podría explicar que “legumbres” se refiere a “alimentos hechos de semillas, granos, etc.” (Daniel 1:12, nota a al pie de página).

Las bendiciones de obedecer al Señor

A fin de ayudar a los alumnos a descubrir cómo bendijo el Señor a Daniel y a sus amigos, podría agruparlos de dos en dos. A medida que lean los versículos siguientes, invite a uno de los integrantes del grupo a buscar la forma en que el Señor bendijo a Daniel y a sus amigos físicamente, y al otro integrante a buscar la forma en que el Señor los bendijo espiritualmente. Luego, invítelos a compartir lo que hayan encontrado. Pídales que marquen las bendiciones físicas y espirituales de dos maneras distintas (por ejemplo: resaltándolas con diferentes colores o subrayando una y resaltando la otra).

Lee Daniel 1:15–20 para determinar la forma en que el Señor bendijo a Daniel y a sus amigos por su obediencia.

Cuando los alumnos reconocen los atributos y las características de Jesucristo, pueden aumentar su deseo de confiar en Él y obedecerle. Una manera de ayudarlos a hacer esto es crear preguntas de búsqueda, como las siguientes, para que las mediten.

(Para obtener capacitación adicional sobre cómo crear preguntas de búsqueda que ayuden a los alumnos a reconocer los atributos y las características de Jesucristo, véase “Crear preguntas de búsqueda que permitan a los alumnos reconocer funciones, títulos, símbolos, atributos y características de Jesucristo” en Habilidades para el desarrollo del maestro).

Lee los versículos 15–20 una vez más, pero esta vez medita en lo que aprendas sobre el Padre Celestial y Jesucristo.

• ¿Qué te enseñan estos versículos sobre Dios?

• ¿Cómo podría ese entendimiento fortalecer tu deseo de confiar en Él y obedecerlo?

Podría explicar que, al igual que en los días de Daniel, en la actualidad el Señor ha revelado una ley de salud para Sus hijos y se conoce como la Palabra de Sabiduría (véase Doctrina y Convenios 89).

La actividad siguiente podría ayudar a los alumnos a estudiar la Palabra de Sabiduría. Considere proporcionar papel y materiales artísticos, así como ejemplares de Para la Fortaleza de la Juventud: Una guía para tomar decisiones para aquellos que no tengan acceso a la Biblioteca del Evangelio. Podría limitar el tiempo que dedique a esta actividad a fin de dejar tiempo para la experiencia al final de la lección.

Imagina que te han pedido que crees un póster que describa algo único sobre tu religión y decides crear el tuyo sobre la Palabra de Sabiduría. Utiliza algunas o todas las fuentes siguientes para determinar qué incluir:

1. Doctrina y Convenios 89:18–21

2. Daniel 1:15–20

3. “Palabra de Sabiduría” en la Guía para el Estudio de las Escrituras o en Temas y preguntas (Biblioteca del Evangelio) o en la sección “¿Y qué hay acerca de…?” de Para la Fortaleza de la Juventud: Una guía para tomar decisiones (2022).

4. “La Palabra de Sabiduría: Qué es y qué no es”, Liahona, agosto de 2019, págs. 60–61.

Asegúrate de incluir en tu póster una declaración de verdad sobre la Palabra de Sabiduría. Esta verdad puede provenir de la experiencia de Daniel o de otras fuentes.

Invite a los alumnos a compartir sus pósteres y declaraciones de verdad con la clase. Entre las verdades que podrían compartir, recalque la siguiente: A medida que guardemos el mandamiento del Señor de obedecer la Palabra de Sabiduría, Él nos bendecirá física y espiritualmente.

(Nota: En la Lección 160: “Evalúa tu aprendizaje 10”, los alumnos repasarán los pósteres que crearon. Podría ser útil juntar los pósteres o exhibirlos hasta que enseñe la lección para que tengan acceso a ellos).

Las personas que aún no comprenden el propósito de la Palabra de Sabiduría podrían verla como restricciones innecesarias impuestas por la Iglesia. Dedica un minuto a meditar en las bendiciones que se reciben al guardar la Palabra de Sabiduría y en los resultados que quebrantarla trae a las personas, las familias y la sociedad.

• ¿De qué manera crees que la Palabra de Sabiduría demuestra el amor de Dios por Sus hijos?

Comprométete ahora a obedecer al Señor

A fin de ayudar a los alumnos a fortalecer su compromiso de obedecer la Palabra de Sabiduría del Señor, podría invitarlos a completar las siguientes oraciones en sus diarios de estudio. Mientras ellos se preparan para escribir, pídales que consideren la manera en que su compromiso de obedecer la Palabra de Sabiduría puede fortalecer su relación con el Padre Celestial y Jesucristo.

Quiero obedecer la Palabra de Sabiduría porque…

Algo que puedo hacer que me ayudará a obedecer la Palabra de Sabiduría es…

Para concluir, podría compartir su testimonio de Jesucristo y las bendiciones que ha visto por obedecer Su Palabra de Sabiduría.

Recursos adicionales

¿Por qué es importante cuidar de mi cuerpo físico?

El presidente Russell M. Nelson compartió lo siguiente:

A pesar de lo grandioso que es el cuerpo, su propósito principal, como se dijo antes, es mucho mayor: servir de morada de nuestro espíritu eterno.

El espíritu recibió un cuerpo y llegó a ser un alma viviente para pasar por la vida terrenal y las pruebas y desafíos que esta conlleva. Parte de esa prueba consiste en determinar si el espíritu puede llegar a dominar los apetitos del cuerpo en el que mora.

Cuando comprendamos nuestra naturaleza y nuestro propósito en la tierra, y que nuestro cuerpo es un templo físico de Dios, nos daremos cuenta de que es un sacrilegio dejar que entre en él cualquier cosa que pueda profanarlo (“El cuerpo: Un don magnífico que debemos apreciar”, Liahona, agosto de 2019, págs. 53–54).

¿Cómo puede bendecirme el comprometerme a obedecer la Palabra de Sabiduría?

El élder Ronald A. Rasband, del Cuórum de los Doce Apóstoles, compartió lo siguiente:

Una noche, cuando [yo] era joven, mi madre se sentó conmigo al pie de su cama y habló seriamente sobre la importancia de vivir la Palabra de Sabiduría. Dijo: “Desde hace años, conozco, por la experiencia de otras personas, la pérdida de espiritualidad y sensibilidad que causa el no obedecer la Palabra de Sabiduría”. Me miró directamente a los ojos y sentí que sus palabras me penetraban el corazón: “Prométeme hoy, Ronnie [ella me llamaba Ronnie], que vivirás siempre la Palabra de Sabiduría”. Le hice esa promesa de modo solemne y la he mantenido todos estos años.

Aquel compromiso me benefició mucho durante la juventud y, en años posteriores, al estar en ámbitos de negocios en los que ciertas sustancias fluían con liberalidad. Tomé de antemano la decisión de seguir las leyes de Dios, y jamás tuve que reconsiderarla. El Señor ha dicho: “Yo, el Señor, estoy obligado cuando hacéis lo que os digo; mas cuando no hacéis lo que os digo, ninguna promesa tenéis” [Doctrina y Convenios 82:10]. ¿Qué les dice Él a quienes observan la Palabra de Sabiduría? Que tendremos promesas de salud, fortaleza, sabiduría, conocimiento y ángeles que nos protegerán (“Ser fieles a nuestras promesas y convenios”, Liahona, noviembre de 2019, pág. 55).

¿Dónde puedo aprender más acerca de la Palabra de Sabiduría?

Para aprender más acerca de la Palabra de Sabiduría, véase el ejemplar de agosto de 2019 de la revista Liahona.

Actividades de aprendizaje complementarias

Daniel 1:8. “Daniel se propuso en su corazón”

A medida que los alumnos estudien la historia de Daniel, podría serles de utilidad pensar en su compromiso de obedecer al Señor. Considere invitarlos a marcar la frase “Daniel se propuso en su corazón”, en Daniel 1:8, y luego haga las preguntas siguientes:

• ¿Cuándo creen que Daniel decidió obedecer al Señor?

• ¿Cómo podría haber influido esa decisión en la respuesta de Daniel ante una situación difícil?

Analicen el ejemplo de Daniel de decidir de antemano obedecer al Señor y cómo el seguir ese ejemplo puede ayudarnos a obedecer la Palabra de Sabiduría en circunstancias difíciles.

Bendiciones físicas y espirituales

A fin de ayudar a los alumnos a reconocer la manera en que el Señor puede bendecirnos tanto física como espiritualmente, y lo hará, podría mostrar “Un nuevo año: La salud física” desde 0:53 hasta 4:19.

Quizá también desee compartir las siguientes enseñanzas del presidente Boyd K. Packer (1924–2015), del Cuórum de los Doce Apóstoles:

He llegado a creer que el propósito fundamental de la Palabra de Sabiduría está íntimamente ligado a la revelación […].

Si una persona que se encuentra presa de los efectos de las mencionadas substancias apenas puede entender unas simples palabras, ¿cómo podría percibir los susurros del Espíritu que penetran hasta lo más íntimo de su ser?

Pese a lo valioso de la Palabra de Sabiduría como la ley de salud, puede resultar para ustedes de mayor valor en lo espiritual que en lo físico (“El don de saber escuchar”, Liahona, enero de 1980, pág. 30).

La Palabra de Sabiduría no les promete una salud perfecta, sino que enseña la manera de mantener el cuerpo con el que nacimos en la mejor condición posible, y la mente alerta para recibir la suave inspiración del Espíritu (“La Palabra de Sabiduría: El principio y las promesas”, Liahona, mayo de 1996, pág. 19).

• ¿Qué bendiciones físicas o espirituales han recibido ustedes o alguien a quien conozcan por obedecer la Palabra de Sabiduría?

Podría recordar a los alumnos que las bendiciones del Señor llegan de acuerdo con Su voluntad y Su tiempo.