Josué 1–8; 23–24: Lección 63

Josué 23–24

“Escogeos hoy”

Al final de su vida, Josué les recordó a los israelitas quién es el Señor y lo que Él había hecho por ellos. Josué los invitó a escoger servir al Señor en lugar de a dioses falsos. Esta lección puede ayudar a los alumnos a escoger servir al Señor por encima de otras influencias.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a llevar una piedra pequeña a clase. La usarán como recordatorio del plan que elaborarán durante la lección.

Posibles actividades de aprendizaje

La influencia de las distracciones

Valore la posibilidad de invitar a los alumnos a elaborar una lista con las cinco cosas principales que pueden distraer a los jóvenes de la elección de servir al Señor. Los alumnos podrían trabajar de forma individual o en grupo. Pida a los alumnos que compartan sus listas.

• ¿Qué aspectos de esas distracciones podrían hacer que parezcan más atractivas o más importantes que servir al Señor?

  Podría explicar que, si no tenemos cuidado, esas distracciones pueden convertirse en una versión actual de adorar y servir a dioses que no sean el Señor.

• ¿Cuál podría ser el efecto a largo plazo de escoger continuamente esas influencias en lugar del Señor?

  Invite a los alumnos a reflexionar sobre las preguntas siguientes o a anotar sus respuestas en sus diarios de estudio.

• ¿De qué manera podrías estar sirviendo al Señor o sirviendo a algo o a alguien que no sea Él con tus decisiones diarias?

• ¿Cuál podría ser el efecto a largo plazo si continúas tomando esas decisiones?

Invite a los alumnos a buscar la ayuda del Espíritu a fin de reconocer qué decisiones pueden tomar para servir al Señor.

El Señor nuestro Dios

Un alumno podría leer el párrafo siguiente para resumir Josué 5–24.

Después de guiar a los israelitas a través del río Jordán sobre tierra seca (véase Josué 3–4), el Señor bendijo a los israelitas en sus muchas batallas contra los cananeos. Los israelitas tomaron posesión de la tierra que Dios les había prometido (véanse Josué 5–12). La tierra se dividió entre las doce tribus (véanse Josué 13–22). Al final de su vida, Josué dio un último mensaje a los israelitas (véanse Josué 23–24).

Para la actividad siguiente, podría invitar a la mitad de la clase a leer Josué 23:3–11 y a la otra mitad a leer Josué 24:3–11. Los alumnos podrían marcar lo que encuentren en sus ejemplares de las Escrituras.

Lee Josué 23:3–11 y 24:3–11 para saber lo que Jehová había hecho y haría por Israel.

Invite a los alumnos a hablar al respecto. Para ello, podría escribir sus respuestas en la pizarra a medida que ellos compartan o pedir a los alumnos que pasen a la pizarra para escribir lo que encontraron.

Luego, para ayudar a los alumnos a reflexionar sobre la manera en que han visto al Señor actuar en su vida, haga la pregunta siguiente. Podría invitarlos a pensar en ejemplos de la historia de la Iglesia, de la conferencia general, de su propia vida o de la vida de alguien de su barrio o de su familia.

• ¿Cuáles son algunos ejemplos de cómo el Señor nos ha bendecido hoy en día?

Josué 24:15 es un pasaje del Dominio de la doctrina. Podría invitar a los alumnos a marcar los pasajes del Dominio de la doctrina de forma particular para que puedan encontrarlos con facilidad.

Para ayudar a los alumnos a entender Josué 24:14–15, podría invitarlos a reescribir con sus propias palabras lo que Josué enseñó. Podrían reescribir los versículos de dos en dos o en grupos pequeños.

Lee Josué 24:14–15. Reescribe lo que Josué enseñó como si estuviera enseñando lo mismo hoy.

Invite a los alumnos a comentar cómo reescribieron el consejo de Josué. Los alumnos podrían decir algo así: “¡Deja de seguir todas esas otras influencias que te rodean y elige seguir al Señor! Tú puedes elegir lo que quieras, pero yo voy a servir al Señor”.

Para ayudar a los alumnos a reconocer un enunciado de una verdad clara, podría hacer una pregunta como la siguiente.

• ¿Cómo resumirías las enseñanzas de Josué en el versículo 15?

  Los alumnos podrían resumir el versículo 15 usando palabras como las siguientes: Podemos usar nuestro albedrío para escoger servir al Señor.

  Al hacer la pregunta siguiente, considere remitir a los alumnos a las respuestas que anotaron en el cuadro.

• ¿Cuáles son las maneras en que podemos servir al Señor en la actualidad?

• Lo que sabes sobre el Señor, ¿cómo puede ayudarte a elegir servirle?

Escoger servir al Señor

Lee Josué 24:24–25 y busca lo que los israelitas decidieron hacer.

Para ayudar a los alumnos a relacionar lo que han aprendido con sus decisiones personales, considere pedirles que escriban respuestas a las preguntas siguientes.

En tu diario de estudio, responde una de las preguntas siguientes:

• ¿Qué quieres recordar acerca del Señor que pueda ayudarte a servirle cuando podría resultarte difícil? ¿Cómo te podría ayudar el recordar al Señor en esos momentos?

• ¿Qué comenzarás a hacer o dejarás de hacer para elegir servir al Señor? ¿Qué bendiciones podrías recibir al hacerlo?

Si lo desea, pida a los alumnos que estén dispuestos a que comenten lo que escribieron. Recuérdeles que no deben compartir información demasiado personal. También podría dar su testimonio del Señor y explicar por qué elige amarlo y servirle en lugar de a otras cosas.

Lee Josué 24:26–27 para saber lo que hizo Josué a fin de recordarles a los israelitas su decisión de servir al Señor.

Si los alumnos llevaron una piedra a clase, pueden sacarla ahora. O bien, podrían hacer un dibujo de una piedra. Analicen dónde puso Josué la piedra (debajo de una encina) y por qué la puso allí (para recordar a los hijos de Israel el convenio que hicieron de servir al Señor). Pregunte a los alumnos dónde pueden poner la piedra para recordar su plan de servir al Señor. Invítelos a colocar la piedra en un lugar prominente que vean con frecuencia. También podrían escribir algo en la piedra que les recuerde al Señor o su plan para servirle, por ejemplo, “Serviré al Señor”.

Si lo desea, muestre la declaración siguiente a los alumnos. Testifique del efecto a largo plazo de elegir servir al Señor.

El élder Dale G. Renlund, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó acerca del efecto a largo plazo de elegir servir al Señor:

Necesitamos escoger a quién serviremos. La magnitud de nuestra felicidad eterna depende de que elijamos al Dios viviente y nos unamos a Él en Su obra. […]

Elegir seguir el plan del Padre es la única forma en que podemos convertirnos en herederos en Su reino (“Escogeos hoy”, Liahona, noviembre de 2018, pág. 106).

Memorizar

Podría ayudar a los alumnos a memorizar la referencia y la frase clave del Dominio de la doctrina durante esta lección y a repasarlas en lecciones futuras. La frase clave del pasaje de las Escrituras correspondiente a Josué 24:15 es: “Escogeos hoy a quién sirváis”. En los materiales del apéndice que se encuentran bajo el encabezado “Actividades de repaso del Dominio de la doctrina” hay ideas para las actividades de memorización.

Recursos adicionales

¿Por qué fueron destruidos los cananeos?

En Deuteronomio 7:1–2, el Señor mandó a los israelitas “destru[ir] del todo” a los heteos, gergeseos, amorreos, cananeos, ferezeos, heveos y jebuseos (a quienes se suele llamar cananeos porque vivían en Canaán, la tierra prometida). Las Escrituras dan pocas razones para ese mandamiento. En Deuteronomio 9:4–5 se enseña que Jehová expulsó a los cananeos de la tierra a causa de su iniquidad (véase también Deuteronomio 20:16–18). En el Libro de Mormón, Nefi enseñó a sus hermanos que esos pueblos “habían rechazado toda palabra de Dios, y habían llegado a la madurez de la iniquidad; y la plenitud de la ira de Dios estaba sobre ellos” (1 Nefi 17:35).

Los actos malvados de los cananeos eran tan contagiosos y destructivos que permitirles permanecer en la tierra habría destruido espiritualmente a Israel. La historia de Israel prueba que eso es verdad. Al no obedecer el mandamiento de Jehová de destruir “del todo” a los cananeos (Jueces 1:21–36), con el tiempo, Israel adoptó sus creencias falsas y prácticas inicuas, las cuales finalmente condujeron a Israel a la ruina espiritual y a su destrucción física (véase Old Testament Student Manual Genesis–2 Samuel, 3.ª edición, 2003, pág. 219).

Si no he estado eligiendo al Señor, ¿es demasiado tarde para elegirlo ahora?

El élder Dale G. Renlund, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó lo siguiente:

Cuando descubrimos que nos hemos salido del camino, podemos permanecer alejados o, debido a la Expiación de Jesucristo, podemos optar por dar la vuelta y regresar al camino. […]

No importa cuánto tiempo nos hayamos apartado del camino o cuán lejos nos hayamos desviado, en el momento en el que decidimos cambiar, Dios nos ayuda a regresar. Desde la perspectiva de Dios, mediante el arrepentimiento sincero y avanzando con firmeza en Cristo, una vez que estemos de regreso en el camino, será como si nunca nos hubiésemos apartado de él (véase “Escogeos hoy”, Liahona, noviembre de 2018, pág. 106).

Actividades de aprendizaje complementarias

Jesucristo es la roca

Cuando analicen Josué 24:24–27, podría invitar a los alumnos a correlacionar o vincular Salmo 18:2 y Helamán 5:12. Pídales que comenten por qué una piedra podría ser un buen símbolo de Jesucristo o la manera en que Él ha sido una roca para ellos.

Josué 6. Las bendiciones de la obediencia

Para aprender acerca de las bendiciones de obedecer al Señor, los alumnos podrían estudiar el relato de la batalla de Jericó. Podría pedir a los alumnos que piensen en lo que sucedería si alguien no siguiera un protocolo, por ejemplo, un cirujano que no limpia bien sus instrumentos, un agricultor que no ara el campo correctamente, etc. Invite a los alumnos a pensar en por qué es importante seguir las instrucciones que recibimos con exactitud.

Luego, podría pedirles que lean Josué 6:1–5, 10. Pídales que marquen las instrucciones que el Señor dio a Israel para la batalla contra Jericó. Pregunte a los alumnos qué hubieran pensado si fueran uno de los israelitas que recibió esas instrucciones.

Invite a los alumnos a leer Josué 6:12–16, 20 para saber cómo respondieron los israelitas. Pida a los alumnos que comenten lo que los haya impresionado de la batalla y las verdades que encuentren en ese relato. Los alumnos podrían reconocer una verdad como la siguiente: Cuando obedecemos fielmente al Señor con exactitud, Él nos bendice. Podría invitar a los alumnos a comentar en qué ocasiones han visto que el Señor los ha bendecido a ellos o a otras personas por su obediencia.

Josué 7. Las consecuencias de la desobediencia

Para analizar las consecuencias negativas de desobedecer al Señor, podría ayudar a los alumnos a estudiar el relato de Acán. Explique que el Señor mandó a los israelitas que no guardaran nada para sí mismos después de que derrotaron a la ciudad de Jericó (véase Josué 6:18–19). Lamentablemente, un israelita llamado Acán se llevó prendas de vestir, oro y plata de la ciudad (véase Josué 7:1, 21).

Invite a los alumnos a leer Josué 7:1–7, 10–13, para saber cómo afectó la desobediencia de Acán al pueblo de Israel. Luego, ayude a los alumnos a reconocer una verdad como la siguiente: Cuando elegimos desobedecer los mandamientos del Señor, acarreamos consecuencias negativas sobre nosotros mismos y sobre los demás. Pida a los alumnos que piensen en la forma en que, con el tiempo, los pequeños actos de desobediencia pueden afectarnos o afectar a las personas de nuestro entorno.