Antiguo Testamento 2022
23 – 29 mayo. Josué 1–8; 23–24: “Esfuérzate y sé valiente”


“23 – 29 mayo. Josué 1–8; 23–24: ‘Esfuérzate y sé valiente’”, Ven, sígueme — Para la Escuela Dominical: Antiguo Testamento 2022 (2021)

“23 – 29 mayo. Josué 1–8; 23–24”, Ven, sígueme — Para la Escuela Dominical: 2022

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Moisés ordena a Josué

Ilustración de Moisés ordenando a Josué, por Darrell Thomas.

23 – 29 mayo

Josué 1–8; 23–24

“Esfuérzate y sé valiente”

A medida que lea Josué 1–8 y 23–24, considere el consejo: “de día y de noche meditarás en él” (Josué 1:8). Preste atención a las impresiones que reciba, ya que estas podrían proporcionarle ideas para la clase.

Anote sus impresiones

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Invitar a compartir

Invite a los miembros de la clase a que compartan un pasaje de su lectura de esta semana que les haya aumentado la fe en Jesucristo. Por ejemplo, tal vez hayan meditado sobre maneras en que la misión de Josué les recordó a Jesucristo. ¿Por qué sentimos agradecimiento por los relatos del libro de Josué?

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Enseñar la doctrina

Josué 1:1–9

“Esfuérzate y se valiente”

  • A Josué se le dijo varias veces: “esfuérzate y se valiente” (véanse Deuteronomio 31:7, 23; Josué 1:6–7, 9). Para los miembros de la clase podría ser beneficioso un análisis sobre lo que el Señor quiere decir con esa frase. Ellos podrían buscar en Josué 1:1–9 los consejos que el Señor dio a Josué a fin de ayudarle a esforzarse y ser valiente. También podrían dar ejemplos de personas que ellos conozcan que posean esos atributos. ¿De qué forma Josué dio muestras de esfuerzo y valentía en los relatos que se encuentran en el libro de Josué? (por ejemplo, véanse los capítulos 3, 68). Los miembros de la clase podrían comentar sobre cómo tratan de esforzarse y ser valientes por la causa de Cristo.

Josué 1:8

La palabra de Dios puede hacer prosperar nuestro camino.

  • A fin de animar a los miembros de la clase en su estudio personal y familiar de las Escrituras, podrían leer Josué 1:8 como clase. ¿Qué aprendemos en este versículo sobre cómo estudiar las Escrituras? Tal vez los miembros de la clase podrían compartir lo que estén haciendo para “medita[r]” en las Escrituras “de día y de noche”. ¿En qué forma ha hecho el Señor “prosperar [nuestro] camino” y ayudado a que “todo [nos] sal[ga] bien” al estudiar Su palabra?

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    Una mujer lee las Escrituras

    La palabra de Dios puede “ha[cer] prosperar [nuestro] camino” (Josué 1:8).

Josué 3–4

Podemos experimentar las “maravillas” de Dios.

  • A los miembros de la clase podría beneficiarles hacer un breve repaso del relato de cuando los israelitas cruzaron el río Jordán. Podría dividir la clase en grupos de dos e invitar a cada grupo a contarse el relato entre ellos, turnándose para decir un enunciado a la vez (anímelos a que vayan a Josué 3 si necesitan ayuda a fin de recordar el relato). Después podrían analizar como clase los detalles que les hayan llamado la atención. ¿Qué aprendemos de ese relato que nos puede ayudar a experimentar las “maravillas” del Señor en nuestra vida? (versículo 5). ¿Qué “maravillas” ha hecho Él por nosotros? ¿Por qué es importante que cada generación tenga experiencias espirituales que le enseñen que “Jehová es poderos[o]”? (Josué 4:24).

  • Si bien todos necesitamos tener nuestras propias experiencias que nos aumenten la fe, también es importante recordar lo que el Señor ha hecho por nuestros antepasados. Según Josué 4, ¿qué hicieron los israelitas para ayudar a que las generaciones futuras recordaran el cruce del río Jordán? (véase Josué 4:1–7). ¿Qué estamos haciendo para asegurarnos de que las generaciones futuras no olviden las experiencias que nosotros hemos tenido?

Josué 6–8

La obediencia trae el poder de Dios a mi vida.

  • La reseña de esta semana de Ven, sígueme—Para uso Individual y familiar sugiere comparar las batallas de los israelitas contra los cananeos Josué 6–8 con nuestras propias batallas contra la tentación. Podría preguntar a la clase qué ideas o impresiones tuvieron al leer esos capítulos teniendo en mente esa comparación. O bien, podría señalarles versículos específicos que parezcan relevantes en nuestras batallas para evitar el pecado, y podrían hablar de lo que esos versículos enseñan sobre el cómo obtener acceso al poder de Dios en nuestra vida. Algunos de esos versículos podrían ser Josué 6:1–5, 18, 20; 7:11–13.

Josué 23–24

“Escogeos hoy a quién sirváis”.

  • A los miembros de la clase podría ayudarles que relacionen Josué 23–24 con ellos mismos si se imaginan que son israelitas escuchando a Josué dar ese consejo hacia el final de su vida. Podría asignarles algunos versículos para que los lean en silencio y después pedirles que compartan algo de esos versículos que los haya inspirado a permanecer fieles al Señor. También podrían explicar cómo han tomado personalmente la decisión de “a quién s[ervirán]” (Josué 24:15). ¿Por qué tomaron ellos esa decisión?

  • Podría invitar a los miembros de la clase a que escojan una frase de Josué 23–24 que los inspire a escoger servir a Dios y que después elaboren un cartel o un meme con la frase para ponerlo en casa o en las redes sociales.

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Se crece espiritualmente en el hogar. A fin de mantenerse espiritualmente fuertes, los miembros de la clase necesitan tener sus propias experiencias espirituales fuera de la clase. Busque maneras de emplear el breve tiempo que pasa con ellos para inspirarlos a que busquen alimento espiritual en las Escrituras en casa, tanto de forma individual como con su familia (véase Enseñar a la manera del Salvador, pág. 18).