Jehová se aparece a Moisés y a los ancianos de Israel

Ilustración de la aparición de Jehová a Moisés y a setenta ancianos de Israel, por Jerry Harston.

25 abril – 1 mayo

Éxodo 24; 31–34

“Mi presencia irá contigo”

Permita que estas palabras del élder Jeffrey R. Holland guíen su preparación para enseñar: “La mayoría de la gente no va a la Iglesia únicamente para buscar unos cuantos conceptos nuevos del Evangelio […]; van en busca de una experiencia espiritual […]; desean que su fe sea fortalecida y que su esperanza sea renovada” (“Venido de Dios como maestro”, Liahona, julio de 1998, pág. 27).

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Invitar a compartir

Los miembros de la clase podrían imaginarse que un amigo les dice: “Yo no leo el Antiguo Testamento porque no parece tener relación con mi vida”. Pídales que respondan a eso compartiendo algo que hayan encontrado significativo en su estudio reciente del Antiguo Testamento.

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Enseñar la doctrina

Éxodo 31:12–17

Honramos el día de reposo como señal de nuestro compromiso con el Señor.

• Podría comenzar preguntando a los miembros de la clase si alguna vez han tenido que explicar a un familiar o un amigo por qué consideran el domingo de forma distinta a los demás días. Invítelos a compartir lo que hayan dicho o lo que dirían en el futuro. En Éxodo 31:12–17 o en la declaración que se encuentra en “Recursos adicionales” pueden encontrar otras ideas. ¿Cómo demuestran las decisiones que tomamos en el día de reposo nuestro compromiso con Jesucristo?

• Si bien las penalidades que se mencionan en Éxodo 31:14–15 no se ajustan a la actualidad, sí indican la importancia que tiene el día de reposo para el Señor. ¿Por qué es tan importante este mandamiento? El análisis de estos pasajes de las Escrituras podría ayudar: Éxodo 31:12–17; Isaías 58:13–14; Doctrina y Convenios 59:9–13.

  Unas personas caminan frente a un centro de reuniones

  Al honrar el día de reposo, mostramos nuestro amor por el Señor.

Éxodo 32; 34:1–17

El pecado nos aleja de Dios, pero Él nos ofrece una manera de regresar.

• A fin de ayudar a los miembros de la clase a que reflexionen sobre el relato que se encuentra en Éxodo 32 y a que lo personalicen, primero pídales que repasen el capítulo de forma individual o en grupos. Después pida a algunos de ellos que hagan el papel de israelitas que se impacientaron esperando que Moisés volviera y decidieron hacer un ídolo de oro. ¿Qué tipo de sentimientos podrían haberlos llevado a adorar un ídolo? Otros de ellos podrían tratar de persuadirlos a mantenerse fieles al Señor y a Su profeta. Los miembros de la clase podrían hablar de aquello que los inspira a guardar sus convenios. ¿Qué podemos hacer para ayudar a las personas a quienes tal vez se les dificulte guardar sus convenios?

• Cuando las personas leen el Antiguo Testamento, a veces se sorprenden de los estrictos castigos que el Señor imponía por el pecado. El pasaje que se encuentra en Éxodo 34:1–9 puede ayudarles a ver que, si bien Dios no aprueba el pecado, Él también es misericordioso y otorga perdón a quienes se arrepienten. Quizá los miembros de la clase podrían leer ese pasaje y reflexionar sobre preguntas como esta: ¿Qué aprendemos acerca del Señor en esos versículos? ¿Por qué necesitamos saber estas cosas de Él? Podría señalar que en la Traducción de José Smith, Éxodo 34:7 (en Éxodo 34:7, nota al pie de página e) se aclara que Dios no “tendrá por inocente al rebelde”. ¿Qué podría significar eso? Tal vez los miembros de la clase podrían detallar cómo es que han sido testigos de la misericordia de Dios. ¿Cómo es posible para Dios ser perfectamente misericordioso como perfectamente justo? (véase Alma 42:13–15).

• El pasaje que se encuentra en Éxodo 34:6–17 puede considerarse como instrucción para ayudar a los israelitas a arrepentirse del pecado de la idolatría (que se describe en Éxodo 32). ¿Qué encontramos en esos versículos que pudiera haber ayudado a los israelitas a arrepentirse? ¿Qué aprendemos en esa instrucción sobre el Señor y el arrepentimiento?

Éxodo 33:11–17

Necesitamos la presencia de Dios en nuestra vida.

• ¿Cómo ayudará usted a los miembros de la clase a poner en práctica lo que el Señor le dijo a Moisés en Éxodo 33:11–17? Podría comenzar haciendo un repaso de la obra que Dios aún necesitaba que Moisés llevara a cabo (véase Éxodo 33:1–3). ¿Qué encontramos en los versículos 11–17 que debe haber fortalecido y consolado a Moisés? Los miembros de la clase podrían pensar en algo que Dios desee que ellos hagan, como cumplir con un llamamiento en la Iglesia, una responsabilidad familiar o una oportunidad de ministrar. Después podrían volver a leer los versículos. ¿Qué perspectivas obtenemos sobre la manera en que Dios nos apoya?

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Recursos adicionales

El día de reposo es una señal.

El presidente Russell M. Nelson explicó: “En mi juventud estudiaba las listas que otras personas habían recopilado de lo que se podía y lo que no se podía hacer en el día de reposo. No fue sino hasta más adelante que aprendí de las Escrituras que mi conducta y mi actitud en el día de reposo constituían una señal entre mi Padre Celestial y yo [véanse Éxodo 31:13; Ezequiel 20:12, 20]. Con ese entendimiento, ya no necesité más listas de lo que se podía y no se podía hacer. Cuando tenía que tomar una decisión en cuanto a si una actividad era o no era apropiada para el día de reposo, simplemente me preguntaba a mí mismo: ‘¿Qué señal quiero darle a Dios?’. Esa pregunta hizo que mis opciones respecto al día de reposo fueran bien claras” (“El día de reposo es una delicia”, Liahona, mayo de 2015, pág. 130).

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Enseñar mediante el Espíritu. “El objetivo fundamental de todo lo que hace un maestro del Evangelio (cada pregunta, cada pasaje de las Escrituras, cada actividad) es invitar al Espíritu para que edifique la fe e invitar a todos a que vengan a Cristo” (Enseñar a la manera del Salvador, pág. 10).