“11 – 17 octubre. Doctrina y Convenios 115–120: ‘Su sacrificio será más sagrado para mí que su ganancia’”, Ven, sígueme — Para la Primaria: Doctrina y Convenios 2021 (2020)
“11 – 17 octubre. Doctrina y Convenios 115–120”, Ven, sígueme — Para la Primaria 2021
Far West, por Al Rounds.
11 – 17 octubre
Doctrina y Convenios 115–120
“Su sacrificio será más sagrado para mí que su ganancia”
Permita que el Espíritu lo guíe hacia los principios que los niños necesitan más. Podría encontrar ideas útiles en las actividades para niños pequeños o para niños mayores.
Anotar sus impresiones
Invitar a compartir
De vez en cuando, podría ayudar que hable de antemano con los padres de uno de los niños y sugerirles que su niño vaya a la clase preparado para compartir algo que él o ella hayan aprendido en el hogar. El niño podría disfrutar al dirigir en la clase una actividad que él o ella hayan hecho con sus familias.
Enseñar la doctrina: Niños pequeños
Pertenezco a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
¿Cómo puede ayudar a los niños a reconocer las bendiciones de ser parte de la Iglesia de Jesucristo?
Posibles actividades
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Pregunte a los niños si alguno de ellos se sabe el nombre completo de la Iglesia. Muéstreles el logotipo de la Iglesia (en una publicación de la Iglesia o una placa de misionero), escriba el nombre en la pizarra o léalo en Doctrina y Convenios 115:4. Pídales que digan el nombre junto con usted, conforme señale cada palabra. Recalque en el nombre las palabras significativas y ayúdelos a comprender por qué son importantes (véase “Capítulo 43: Jesucristo da el nombre a Su Iglesia”, Relatos de Doctrina y Convenios, pág. 164).
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Entonen juntos “La Iglesia de Jesucristo” (Canciones para los niños, pág. 48) y comparta con los niños cómo se siente usted por ser miembro de la Iglesia de Jesucristo. Permítales que expresen lo que sienten en cuanto a la Iglesia.
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Invite a los niños a que se pongan de pie cuando usted lea la palabra “levantaos” en Doctrina y Convenios 115:5. Invítelos a que estiren los dedos como rayos de sol cuando lea la palabra “brillad”. Entonen juntos una canción que hable de ser una luz para los demás, como “Yo soy como estrella” (Canciones para los niños, pág. 84). Recuérdeles que nuestra luz proviene de Jesucristo y ayúdelos a pensar en maneras en las que pueden “brilla[r]”.
Jesucristo hizo la tierra y todo lo que hay en ella.
Con el fin de animar a William Marks y Newel K. Whitney a que sacrificaran sus propiedades y se mudaran a Misuri, el Señor les recordó que Él creó todas las cosas que hay en la tierra. ¿Cómo podría bendecir a los niños el hecho de saber esa verdad?
Posibles actividades
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Lleve o dibuje ilustraciones de las creaciones que se mencionan en Doctrina y Convenios 117:6 y que el Señor dijo que Él creó (o invite a los niños a que hagan sus propios dibujos). Invítelos a que levanten o señalen las ilustraciones conforme usted lea el versículo. Dígales por qué es importante para usted saber que Jesucristo creó esas cosas.
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Entonen juntos una canción que hable de las creaciones de Dios, como “Mi Padre Celestial me ama” (Canciones para los niños, págs. 16–17). Permítales que hablen de algunas cosas que Dios ha creado que los ayuden a sentir Su amor.
Los diezmos ayudan a que la Iglesia lleve a cabo la obra de Dios.
Muchos de los niños a quienes enseña probablemente sean demasiado pequeños para ganar dinero y pagar diezmos, pero es bueno que ellos comprendan la forma en que estos contribuyen a la gran labor que la Iglesia realiza en todo el mundo.
Posibles actividades
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Explique la manera en que pagamos el diezmo y en qué se utiliza (véase “Capítulo 44: El diezmo”, Relatos de Doctrina y Convenios, págs. 165–166, o el video correspondiente en ChurchofJesusChrist.org). Dibuje 10 monedas en la pizarra y pida a los niños que le ayuden a contarlas. Determine cuántas de ellas se le dan al Señor de diezmo.
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Entonen juntos una canción sobre el diezmo, tal como “Mi diezmo al Señor daré” (Liahona, octubre de 2006, pág. A13), y diga a los niños por qué usted elige pagar su diezmo. Si es posible, cuénteles una anécdota personal
Enseñar la doctrina: Niños mayores
Mi ejemplo puede servir a otras personas a venir a Cristo y hallar seguridad.
Es probable que los niños a quienes enseña conozcan a personas que estén siendo afectadas por las tormentas de la vida y necesiten el “refugio” (versículo 6) que la Iglesia ofrece. Considere la forma en que inspirará a los niños a “levanta[rse] y brilla[r]” (versículo 5), y compartir su luz con esas personas.
Posibles actividades
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Pase entre los niños una linterna, una ilustración del sol u otro objeto que represente la luz del evangelio del Salvador. A medida que les toque sostener la luz, invítelos a que lean Doctrina y Convenios 115:4–5 y digan algo que pueden hacer para “brilla[r]” como una luz para los demás (véase 3 Nefi 18:24).
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Invite a los niños a que hagan un dibujo que represente el versículo Doctrina y Convenios 115:6. Por ejemplo, podrían dibujar una tormenta con personas refugiándose en un edificio de la Iglesia. ¿Qué cosas podría representar la tormenta? ¿De qué manera ofrece refugio la Iglesia de esas cosas?
Mis sacrificios son sagrados para el Señor.
En la sección 117, el Señor aconsejó a William Marks y Newel K. Whitney que sacrificaran las posesiones que tenían en Kirtland para que recibieran mayores bendiciones en Misuri. También le reconoció a Oliver Granger los sacrificios que hizo. ¿Qué siente que los niños pueden aprender de esos ejemplos?
Posibles actividades
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Invite a los niños a que se imaginen que son los exitosos dueños de una tienda en Kirtland, como Newel K. Whitney. ¿Cómo se sentirían si el Señor les pidiera que dejaran la tienda y se mudaran a otro lugar? Léales Doctrina y Convenios 117:1–11, y pídales que lo detengan en cuanto escuchen algo, que podría ayudarlos a tener la fe necesaria para hacer sacrificios y obedecer al Señor. ¿Qué sacrificamos en la actualidad para obedecer al Señor?
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Cuénteles brevemente a los niños por qué tuvieron que salir los santos de Kirtland, o bien, permita que uno de ellos lo cuente (véase “Capítulo 41: Problemas en Kirtland”, Relatos de Doctrina y Convenios, págs. 158–160). Explique que el Señor le pidió a Oliver Granger que se quedara en Kirtland y pagara las deudas de la Iglesia. ¿Por qué sería esa una labor difícil? ¿Qué dijo el Señor en Doctrina y Convenios 117:13 que podría haber ayudado a Oliver —o a cualquiera de nosotros— a hacer sacrificios para obedecer al Señor?
Los diezmos ayudan a que la Iglesia lleve a cabo la obra de Dios.
Reflexione en cuanto a la manera en que ayudará a los niños a comprender la manera en que los diezmos —por pequeña que sea la cantidad que ellos den— contribuyen a la edificación del reino de Dios (véase Leales a la Fe, págs. 60–61).
Posibles actividades
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Invite a los niños a que se imaginen que un amigo de ellos mira un edificio de la Iglesia y pregunta: “¿Cómo costea tu Iglesia ese edificio?”. ¿Cómo le explicaríamos a ese amigo en cuanto al diezmo? Al considerar esa pregunta, sugiérales que consulten Doctrina y Convenios 119:4; 120:1.
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Ayude a los niños a pensar en cosas que la Iglesia puede hacer gracias a los diezmos. ¿Cómo nos bendicen esas cosas? Comparta sus sentimientos en cuanto a la ley del diezmo y la forma en que lo haya bendecido.
ImagenNiño pagando el diezmoAl pagar el diezmo, mostramos el amor que sentimos por Dios y ayudamos en Su obra.
Alentar el aprendizaje en el hogar
Invite a los niños a que presten atención a lo que sintieron en el corazón o a las ideas que les acudieron a la mente hoy durante la Primaria. Anímelos a que compartan esos sentimientos e ideas con su familia.
Cómo mejorar nuestra enseñanza
Apoye a los padres. Busque maneras de hablar con los padres sobre lo que los niños están aprendiendo en la Primaria y pregúnteles cómo puede apoyarlos en su labor de padres (véase Enseñar a la manera del Salvador, pág. 25).