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Mosíah 11–17: Arrepentirse y volverse al Señor


“Mosíah 11–17: Arrepentirse y volverse al Señor”, Libro de Mormón: Manual del maestro, 2024

“Mosíah 11–17”, El Libro de Mormón: Manual del maestro

Mosíah 11–17

Arrepentirse y volverse al Señor

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Abinadí predicando

Por lo general, tratamos de advertir a nuestros seres queridos en cuanto a decisiones que podrían causarles dolor y sufrimiento. El Señor envió a Abinadí con un mensaje para que el rey Noé y su pueblo se arrepintieran y evitaran el sufrimiento que podía ocurrir debido a su conducta pecaminosa. Esta lección puede ayudarte a aumentar tu deseo de aceptar a los profetas del Señor y de actuar de acuerdo con las invitaciones que hacen en Su nombre.

Prepararse mediante el estudio diligente de las Escrituras. Esfuércese de forma constante por estudiar el contexto y el contenido de los pasajes de las Escrituras. Busque doctrinas y principios que sean significativos y relevantes y que puedan ayudar a los alumnos a amar y a seguir a Jesucristo.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a hacer una breve lista de invitaciones que hayan escuchado de los profetas recientemente. Pídales que acudan a clase preparados para hablar de cómo esas invitaciones demuestran el amor y la preocupación del Señor por ellos.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

El Señor nos advierte del peligro

Considere la posibilidad de crear una situación hipotética con la que los alumnos puedan identificarse a fin de ayudarlos a explorar muchas maneras diferentes en que pueden advertir a otras personas de peligros.

Imagina que acabas de recibir información de que tus amigos y seres queridos están en peligro.

  • ¿De qué maneras podrías enviarles un mensaje de advertencia?

El Señor tiene muchas maneras de advertirnos, piensa en las siguientes:

Considere mostrar en la pizarra la lista que se encuentra a continuación.

  • Los consejos de los padres

  • La guía de los profetas y otros líderes de la Iglesia

  • Las enseñanzas que se encuentran en las Escrituras, en la Iglesia o en Seminario

  • Los pensamientos o sentimientos que provienen del Espíritu Santo

  • Otras opciones:

Dé a los alumnos un momento para reflexionar sobre lo siguiente:

Piensa en cuán bien estás evitando el pecado y el peligro debido a la forma en que escoges responder a las advertencias del Señor.

  • ¿Qué tipos de advertencia te parecen más difíciles de aceptar? ¿Por qué?

  • ¿Qué nos enseña acerca del Señor el hecho de que se comunique con nosotros de diferentes maneras?

Si lo desea, escriba la verdad siguiente en la pizarra y explique a los alumnos que la estudiarán más profundamente en esta lección: El Señor nos habla por medio de Sus profetas para invitarnos a arrepentirnos y a acudir a Él.

El Señor llamó a Noé y a su pueblo al arrepentimiento

Recuerda que Zeniff condujo a un grupo de personas desde Zarahemla hasta la tierra de Nefi. Antes de que Zeniff muriera, confirió el reino a su hijo Noé (véanse Mosíah 9–10). Noé y los sacerdotes que él escogió llevaron una vida inicua y convencieron al pueblo con mentiras y palabras lisonjeras para que pecara (véase Mosíah 11:7, 11).

Lee Mosíah 11:2, 14–15, 19 y busca los pecados que cometieron Noé y su pueblo. (El versículo 19 describe la manera en que reaccionaron después de protegerse de un ataque de los lamanitas). También podrían ver el video “Alma relata la iniquidad del rey Noé | Mosíah 11–12, 17” (2:26), disponible en ChurchofJesusChrist.org.

A lo largo de esta lección, busque maneras de ayudar a los alumnos a comparar las Escrituras a nuestros días. Una forma de hacerlo consiste en hacer las preguntas siguientes.

  • ¿Cómo se pueden comparar las decisiones de Noé y su pueblo con las decisiones de las personas en la actualidad?

  • ¿Cuáles son algunas de las posibles consecuencias de vivir como ellos lo hicieron?

El Señor llamó a un profeta llamado Abinadí para que comunicara un mensaje a Noé y a su pueblo a fin de ayudarlos a ver las consecuencias de sus acciones.

Lee el mensaje de Abinadí en Mosíah 11:20–25 y busca las consecuencias de las que el Señor les advirtió. La palabra “ay” en el versículo 20 expresa tristeza o dolor.

  • ¿Cuáles son algunas de las consecuencias que encontraste sobre las que el Señor advirtió al pueblo?

Observa las frases repetidas “a menos que se arrepientan” y “a menos que este pueblo se arrepienta”. Si lo deseas, marca esas palabras y piensa en lo que puedes aprender de ellas acerca del Señor.

Lee Mosíah 11:26–29 para saber cómo reaccionaron el rey Noé y otras personas frente a Abinadí.

Percibir el arrepentimiento como un don de amor del Señor

Invite a los alumnos a presentar un informe de su preparación para la clase y a hacer una lista en la pizarra de invitaciones que el Señor ha hecho en nuestros días para que nos arrepintamos y cambiemos. Prepárese para compartir dos o tres invitaciones recientes de la conferencia general. Este es otro momento en que puede ayudar a los alumnos a comparar las Escrituras a sí mismos.

  • ¿Cuáles son algunas similitudes o diferencias entre la reacción de las personas en la época de Abinadí y la reacción de las personas en nuestros días frente a los profetas? ¿Cuál podría ser la razón de dicha reacción?

Dé tiempo a los alumnos para que mediten en silencio en cuanto a su compromiso personal de escuchar a Dios, sobre todo cuando Él les advierte del pecado y sus consecuencias por medio de Sus profetas. Es posible que, al meditar, sus alumnos piensen y sientan de maneras diferentes acerca de los profetas. La declaración siguiente puede ayudar a los alumnos a percibir a los profetas como una evidencia del amor de Dios.

El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó el modo en que podríamos percibir la invitación de los profetas a arrepentirnos.

Hace mucho tiempo que me ha impresionado, y también he sentido, el anhelante amor de los profetas de Dios cuando nos advierten en contra del pecado. No los motiva el deseo de condenar. Su verdadero deseo refleja el amor de Dios; de hecho, es el amor de Dios. Aman a aquellos a quienes son enviados, quienesquiera que sean y como sean. Al igual que el Señor, Sus siervos no quieren que nadie padezca los dolores del pecado y las malas decisiones (D. Todd Christofferson, “El amor de Dios”, Liahona, noviembre de 2021, pág. 17).

  • ¿De qué manera el entender esto acerca de los profetas podría influir en tu deseo de actuar de acuerdo con sus invitaciones?

Misericordiosamente, el Señor dio tiempo al pueblo para que se volviera a Él y se arrepintiera de sus pecados. Sin embargo, cuando Abinadí regresó dos años después, nuevamente se enojaron y procuraron acusarlo (véase Mosíah 12:1, 9, 19).

Con valentía, Abinadí testificó que los sacerdotes no estaban enseñando al pueblo a obedecer los mandamientos de Dios (véanse Mosíah 12:33–37; 13:12–25). También testificó que Jesucristo vendría a redimir a todas las personas y que la salvación solo era posible por medio del Redentor (véase Mosíah 15:1, 19). Cuando Abinadí terminó de testificar de Jesucristo, su vida estuvo nuevamente en peligro, pero en esa ocasión también estaba en peligro la vida de uno de los sacerdotes: Alma.

Lee Mosíah 17:1–4 y busca las respuestas de Noé y de Alma al testimonio que Abinadí dio de Cristo.

  • ¿Qué podrían ayudarnos a entender estas respuestas sumamente distintas?

Después de pasar tres días en prisión, Abinadí fue llevado de nuevo ante el rey Noé, quien dijo que mataría a Abinadí a menos que estuviera dispuesto a negar las verdades que había enseñado (véase Mosíah 17:5–8).

Lee Mosíah 17:9–10, 13 y busca la respuesta de Abinadí a la petición del rey de que negara su testimonio. O bien, podrías ver el video “Abinadí padece la muerte a causa de su fe | Mosíah 16–17” (4:28), disponible en ChurchofJesusChrist.org.

  • ¿Qué aprendes del ejemplo de Abinadí?

  • ¿Cómo podría influir eso en la forma en que respondes al Señor y a Sus profetas?

Podría compartir un testimonio de la función de los profetas de testificar de Jesucristo y de invitarnos a arrepentirnos.