Pioneros en toda tierra
Vicky Tadić
Una de las primeras conversas en Bosnia y Herzegovina
“¿Fue el Espíritu Santo?”, preguntó Vicky.
“¡Ven!”, la llamó su hermano. “¡Vamos a jugar con los Rowe!”.
Los Rowe eran sus nuevos vecinos. Se habían mudado de los Estados Unidos a Bosnia y Herzegovina. Tenían hijos de las mismas edades que Vicky y sus hermanos, pero no hablaban bosnio. Vicky era la única en su familia que hablaba inglés y ella traducía para que pudieran jugar juntos.
Vicky se sentó en el porche junto a la señora Rowe mientras los demás niños jugaban.
“Su familia parece ser diferente”, le dijo Vicky. “En el buen sentido”.
La señora Rowe sonrió. “¿Te gustaría venir a la Iglesia con nosotros? Eso te podría ayudar a ver por qué somos diferentes. Nuestra Iglesia no tiene un edificio aquí, en Bosnia, así que asistimos a la Iglesia en casa con nuestra familia”.
Vicky sintió curiosidad cuando llegó a casa de los Rowe el domingo. En primer lugar, cantaron una canción; uno de los hijos hizo una oración y luego el señor Rowe oró y repartió pan y agua a cada persona. Dijeron que eso se llamaba la Santa Cena. Después de eso, su hija Jessie dio un discurso.
“El Padre Celestial nos ama. Nos habla por medio del Espíritu Santo”, dijo Jessie. “A veces el Espíritu Santo nos da un sentimiento de paz, o a veces nos trae a la mente un pensamiento”.
Al día siguiente, Vicky fue caminando hasta la tienda para comprar pan. Al regresar a casa, cuando estaba a punto de pasar cerca de unos contenedores de basura, una voz en su mente la hizo detenerse. Aléjate, le dijo.
Vicky se detuvo. De pronto, un auto sin control dio vuelta a la esquina. ¡PUM! Se estrelló contra los contenedores de basura.
Vicky respiró profundamente. ¡Se sintió tan afortunada de haber escuchado la voz!
Más tarde, Vicky le contó la historia a la señora Rowe. “¿Fue el Espíritu Santo?”.
“Así parece. A veces el Espíritu Santo nos advierte sobre el peligro”.
“Dios me protegió”, dijo Vicky. “Siempre escucharé al Espíritu Santo”.
Vicky continuó asistiendo a la Iglesia en casa de los Rowe cada domingo. Más tarde, compartió el Libro de Mormón con su mamá. Pronto, toda su familia se encontraba aprendiendo acerca del Evangelio con los Rowe. Vicky traducía para todos ellos.
Un día, el señor Rowe hizo una pregunta a la familia de Vicky y luego ella la repitió en bosnio: “¿Seguirán el ejemplo de Jesucristo por medio del bautismo?”.
Vicky esperó; quería ser bautizada, pero se sentía nerviosa por lo que diría su familia.
Finalmente, el papá de Vicky habló: “Da”.
“Da”, dijo su familia.
Vicky estaba tan feliz que sentía que el corazón le iba a estallar. “Sí”, le dijo al señor Rowe. “Sí, lo haremos”.
Una semana después, Vicky y su familia hicieron un viaje de cinco horas al edificio de la Iglesia más cercano. Vicky se sentía feliz mientras entraba en el agua para bautizarse. Se sintió aún más feliz cuando fue confirmada miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Ahora tendría el Espíritu Santo siempre con ella.
En Bosnia y Herzegovina hay 73 miembros de la Iglesia.
El templo más cercano a Bosnia y Herzegovina es el Templo de Roma, Italia.
Bosnia y Herzegovina se encuentra en el sureste de Europa.
A Vicky le encanta estar al aire libre; ir en caminatas es una de sus cosas favoritas.
Se bautizó a los 16 años.
Cuando Vicky creció, se casó en el templo. Ahora tiene dos hijos.
Ilustraciones por Zhen Liu.