Compartir el Evangelio
Ideas para la coordinación misional semanal


Ideas para la coordinación misional semanal

Ejemplo de agenda para una reunión

Las reuniones semanales de coordinación misional tienen la capacidad de ayudar a su barrio o rama a bendecir la vida de muchas personas. Las instrucciones para estas reuniones semanales se encuentran en el Manual General: Servir en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 23.4 (Biblioteca del Evangelio), y en Predicad Mi Evangelio: Una guía para compartir el Evangelio de Jesucristo, 2023, págs. 229–230. A continuación encontrará un ejemplo de agenda, ejemplos en video e ideas adicionales.

Personas*

Nombre(s) y próxima ordenanza

¿Qué actividad, experiencia o compromiso puede ayudarle esta semana?

¿Quién está asignado para ayudar?

¿Quién está asignado a hacer seguimiento?

Personas*

Personas a las que se está enseñando

Nombre(s) y próxima ordenanza

P. ej., Sam (bautismo)

¿Qué actividad, experiencia o compromiso puede ayudarle esta semana?

Invitarlo y ayudarlo a inscribirse en FSY

¿Quién está asignado para ayudar?

Mike/presidencia del cuórum de maestros

¿Quién está asignado a hacer seguimiento?

Mike

Personas*

Recién bautizado

Personas*

Miembros que regresan a la actividad y familias en las que no todos son miembros

Personas*

Encontrar personas para enseñar

*Véase el informe Progreso en Mi senda de los convenios para obtener una lista de:

  • Algunas de las personas a las que los misioneros están enseñando.

  • Personas que se han bautizado recientemente.

  • Miembros que vuelven a la actividad.

Principios para una coordinación eficaz

Vea un ejemplo de cómo dirigir una reunión semanal de coordinación y participar en ella.

  • Reunirse semanalmente: Las reuniones breves periódicas y el uso de un chat grupal para mantenerse en contacto entre una reunión y otra pueden ayudarlo a bendecir a más personas con más frecuencia. ¡Conozca a las personas invitadas a la reunión y anímelas a asistir con regularidad!

  • Tomar notas: Puede ser útil pedirle a alguien que tome notas sobre las asignaciones y las acciones a realizar.

  • Hacer planes específicos: Cada semana, planifique maneras específicas de ayudar a las personas a progresar y de encontrar nuevas personas.

  • Realizar un seguimiento: Verifique el progreso de los planes entre una reunión y otra.

  • Involucrar a los jóvenes: ¡Pídales ideas, escúchelas y proporcióneles asignaciones significativas!

  • Actuar más allá de la reunión: La obra más importante se realiza fuera de las reuniones. Dedique tiempo cada semana a ayudar a las personas de las que hablaron.

  • Involucrar a otras personas: Incluya a otros miembros del barrio en la obra y coordine con el consejo de barrio y los líderes o consultores de templo e historia familiar.

  • Compartir experiencias: Busque maneras breves e inspiradoras en que el Señor bendice a las personas a las que está sirviendo y compártalas en su reunión o en un mensaje de texto grupal.

Si en este momento no se le está enseñando a nadie ni hay miembros nuevos, céntrese en los demás aspectos de la agenda, incluso en la planificación para ayudar a:

  • Que los miembros del barrio compartan el Evangelio con más personas, sin importar si viven dentro o fuera de los límites del barrio o la rama.

  • Las familias en las que no todos son miembros y a los miembros que regresan a la actividad.

  • Los miembros que no han asistido a la iglesia recientemente. Considere de qué manera usted y el barrio pueden actuar de acuerdo con los principios de amar, compartir e invitar y ayude a los miembros a asistir a la iglesia o a las actividades y sentirse bienvenidos y amados.

Ejemplos adicionales de coordinación misional de barrio

Ejemplos de grupos de coordinación que analizan los cuatro grupos de personas de la agenda.

2:10

Un grupo de coordinación delibera en consejo y planifica para ayudar a las personas a sentirse amadas y bienvenidas en su comunidad de la Iglesia.

Consejos para encontrar nuevas personas a las que enseñar

  • Piense en familias en las que no todos son miembros de la Iglesia a las que pueda prestar servicio y ayudar. El obispado, el secretario de barrio u otros miembros del consejo de barrio pueden ayudar a proporcionar listas de esas familias y personas a las que usted podría visitar, servir e invitar a participar.

  • Eche un vistazo a las próximas actividades, reuniones y clases a las que el barrio podría invitar a personas a asistir. Considere publicar esas actividades en la página web de su barrio, donde esté disponible (véase “Compartir actividades de barrio”), y anime a los miembros a invitar a personas que conocen poco de la Iglesia a asistir.

  • Planifique a qué miembros u organizaciones del barrio podría alentar a seguir a Cristo al vivir los principios de amar, compartir e invitar (véase Predicad Mi Evangelio, págs. 170–172). Planifique cómo y quién puede compartir esos principios con ellos, y cómo hacer un seguimiento y brindarles apoyo constante (véase “Maneras de amar, compartir e invitar”).

  • Anime a los miembros a simplemente invitar a las personas a asistir a la iglesia con nosotros.

Evite convertir los principios de amar, compartir e invitar en un programa. Busque maneras de alentar a los miembros a hacer que esos principios sean una parte constante de su forma de vivir debido a que aman al Salvador y son Sus discípulos. A continuación, se incluyen más ideas sobre cómo hacerlo.

Quince ideas para alentar a su barrio o rama a compartir el Evangelio

A continuación, se presentan quince ideas que el grupo de coordinación semanal podría utilizar para alentar a los miembros a amar, compartir e invitar. ¡Utilícelas como inspiración o aplique lo que funcionaría mejor en su barrio!

  1. Visitar una clase: Dedique unos minutos a visitar una clase, un cuórum o una organización al comienzo de la segunda hora para indicar las próximas oportunidades de amar, compartir e invitar. Considere compartir una breve experiencia en la que el vivir esos principios haya bendecido a quienes no están familiarizados con la Iglesia.

  2. Ponerse en contacto: Envíe mensajes a los miembros expresando amor y agradecimiento. Pregúnteles si recientemente han pensado en alguien que necesite sentir su amor o participar con ellos en una actividad en su hogar o en la iglesia. Ya sea que hayan pensado en alguien o no, continúe alentándolos a orar y a buscar oportunidades de amar, compartir e invitar.

  3. Conocer el calendario: Recuérdeles a los miembros acerca de las próximas oportunidades para compartir con amigos y vecinos (por ejemplo: una reunión sacramental especial como el programa de la Primaria, una actividad de barrio, una cena o noche de hogar en su casa, un servicio bautismal, una noche de deportes, clases de autosuficiencia, etc.).

  4. Ayudar a los discursantes a invitar a amigos: Póngase en contacto con los miembros a los que se les haya pedido que hablen en la reunión sacramental y anímelos a que inviten a alguien que conoce poco de la Iglesia para que vaya a escucharlos.

  5. Planificar visitas: Cada semana, en la reunión de coordinación, podrían decidir a qué miembros podrían visitar para analizar los principios de amar, compartir e invitar y pedirles que piensen en las oportunidades que tienen de vivir esos principios y compartir el Evangelio. En la reunión de coordinación, ¡asegúrese de haber planificado quién hará el seguimiento de esas familias!

  6. Ayudar a los misioneros: ¡Ayude a los miembros a acompañar a los misioneros a una cita! Mientras estén juntos, acérquense a saludar a un vecino o amigo.

  7. Compartir actividades: Si su barrio utiliza la página web de actividades (véase la página Compartir actividades), asegúrese de que los miembros estén al tanto de ella y de que el obispado anuncie a menudo que en esa página hay actividades a las que podemos invitar a amigos y vecinos a asistir.

  8. Redes Sociales: Aliente a los miembros que utilizan las redes sociales a incluir aspectos del Evangelio que forman parte de su vida cotidiana y a entablar conversaciones con aquellos que les den “Me gusta” y comenten las publicaciones.

  9. Amar al prójimo: Anime a los miembros a estar al tanto de cualquier vecino que haya tenido un acontecimiento importante en su vida (por ejemplo: que se haya casado, tenido un hijo o se haya mudado recientemente, etc.). Hagan un plan sencillo para servirles y mostrarles amor.

  10. Personas que se mudan al barrio: Aliente a los miembros a compartir con el líder misional de barrio las personas que se están mudando y los nuevos proyectos de construcción de vivienda que hay. Coordine cómo invitar a los miembros a dar la bienvenida a esas personas al área, ofrecer ayuda y compartir información sobre el vecindario, las reuniones dominicales y las actividades de barrio (véase Compartir actividades). Involucre a los misioneros.

  11. Ser acogedores: Preséntese con las personas que no conozca en la iglesia o que estén asistiendo por primera vez. ¡Ayúdelas a sentirse bien recibidas y amadas! Anime a los miembros del barrio a hacer lo mismo.

  12. Mantenerse en contacto: Aliente a los miembros a mantenerse en contacto con las personas que viven lejos. Si alguien tiene una necesidad en la que los misioneros puedan ayudar, los miembros pueden comunicársela a los misioneros con esta herramienta en línea.

  13. Proyectos de servicio: Organice un proyecto de servicio e invite a vecinos y amigos. ¡Incluya una oración y un breve pensamiento espiritual en algún momento! Podría hacer lo mismo con una noche deportiva periódica.

  14. Rutina diaria: Anime a los miembros a pensar en las personas con las que se relacionan debido a su rutina diaria. Intercambien ideas sobre cómo podrían vivir los principios de amar, compartir e invitar con esas personas.

  15. Contactos telefónicos o de redes sociales: Aliente a los miembros a acceder a su lista de contactos telefónicos o a sus amigos en las redes sociales y ver si pueden ayudar a alguien a sentirse amado con un breve mensaje o compartir algo que apreciaría. En algunos casos, podrían invitarlo a una actividad en su hogar o en la iglesia.