La pornografía
Principio 1: Encontrar esperanza y fortaleza en el Padre Celestial y Jesucristo


“Principio 1: Encontrar esperanza y fortaleza en el Padre Celestial y Jesucristo”, Ayuda para el cónyuge, 2019

“Principio 1: Encontrar esperanza y fortaleza en el Padre Celestial y Jesucristo”, Ayuda para el cónyuge

Jesús consuela a una mujer

Principio 1: Encontrar esperanza y fortaleza en el Padre Celestial y Jesucristo

Tenemos un amoroso Padre celestial que está al tanto de nuestras circunstancias. Recordar nuestra verdadera identidad y relación como hijos e hijas de Dios nos ayuda a sentir y experimentar Su preocupación y amor. Cristo sufrió todas las cosas para poder socorrernos y elevarnos. Él entiende lo que estamos experimentando.

4:47

Volverse con fe a Jesucristo y al Padre Celestial, particularmente durante las situaciones más difíciles, nos puede brindar consuelo. Como un hombre inocente y sin pecado, Cristo sufrió por cada uno de nosotros y puede identificarse con nuestro dolor como nadie más puede hacerlo. Su amor se extiende a cada uno de nosotros. El élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, nos ha prometido:

“El Salvador puede sanar los corazones rotos. Comprender nuestra verdadera identidad como hijos e hijas de Dios es fundamental para nuestro progreso eterno. Somos hijos e hijas del Padre Eterno. Tenemos la capacidad de progresar y desarrollarnos y llegar a ser como Él.

Si comprendemos quiénes somos, esto nos capacita, nos fortalece, nos prepara para enfrentar cualquier desafío u obstáculo con el que nos topemos. Es el ancla segura y el fundamento sobre el que podemos edificar” (“Encontrar esperanza y fortaleza en el Padre Celestial y en Jesucristo”, video).

Recordar nuestra identidad divina como hijos de Dios nos ayuda a ganar fortaleza por medio del poder habilitador del Salvador y Su expiación. A medida que oremos y le ofrezcamos nuestro corazón quebrantado, Él nos sanará y fortalecerá. La oración puede ser una lucha, pero cuando derramemos nuestro corazón a Él, nos sanará y fortalecerá. La oración puede ser una lucha, pero cuando derramamos nuestro corazón al Padre amoroso, podemos hallar paz más allá de nuestro entendimiento.

El Padre Celestial y Jesucristo conocen y están al tanto de nuestras luchas. Nos aman profundamente. A medida que ejercemos la fe de manera simple y sincera, podemos sentir Su amor y Ellos nos guiarán hacia las personas y los recursos que nos pueden ayudar.

Anote las impresiones que reciba

Dedique un momento para escribir lo que haya sentido al estudiar este principio.

Ponga en práctica este principio

A continuación se ofrecen algunas ayudas sobre temas adicionales para aumentar su conocimiento y aplicación del principio.

¿Se acabarán alguna vez el dolor y el sufrimiento?

Nuestro dolor y sufrimiento se pueden aliviar al volvernos a Dios como Sus hijos. El consumo de pornografía del cónyuge puede hacernos sentir sin valor alguno, imperfectos e inadecuados. Sin embargo, es posible que reemplacemos la confusión y la desesperación que a menudo sentimos por la esperanza al recordar nuestra identidad divina como hijos de Dios.

¿A dónde puedo acudir para recibir apoyo?

El Padre Celestial y Jesucristo pueden brindar consuelo y apoyo como nadie más puede. Podemos sentir que no hay adónde ir y que nadie puede entendernos. Al acudir a Dios y al Salvador, podemos encontrar apoyo, paz y amor.

Estudio complementario

Material relacionado

una pareja abrazándose

Reseña general para el cónyuge

mujer orando

Principio 2: Responder a las emociones fuertes

mujer con un teléfono celular

Principio 3: Tender una mano