Nuevo Testamento 2023
Usted es el maestro de los niños


“Usted es el maestro de los niños”, Ven, sígueme — Para la Primaria: Nuevo Testamento 2023 (2023)

“Usted es el maestro de los niños”, Ven, sígueme — Para la Primaria: 2023

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Jesús con un niño en los brazos

Usted es el maestro de los niños

Usted ha sido llamado por Dios para enseñar a Sus hijos a la manera del Salvador y fue apartado para este llamamiento por la autoridad de Su santo sacerdocio. Aun cuando no tenga experiencia como maestro, al vivir dignamente, orar a diario y estudiar las Escrituras, el Padre Celestial le concederá la influencia y el poder del Espíritu Santo para ayudarle a tener éxito (véase 2 Nefi 33:1).

Los que han sido confiados a su cuidado son hijos del Padre Celestial, y Él sabe lo que ellos necesitan y cuál es la mejor manera de llegar a ellos. A medida que busque con espíritu de oración la influencia del Espíritu Santo, Él le guiará cuando se prepare y mientras esté enseñando. Él le revelará lo que debe decir y hacer (véase 2 Nefi 32:5).

Nunca subestime la capacidad de un niño de entender el Evangelio. En todos los aspectos de su vida, esos preciados niños están constantemente absorbiendo información, formando y refinando sus opiniones, y haciendo y compartiendo descubrimientos. Esto resulta particularmente cierto con el Evangelio, ya que los niños están dispuestos y deseosos de aprender sus verdades sencillas. La fe que tienen en las cosas espirituales es fuerte y pura, y cada momento es una oportunidad de aprendizaje. Actúan de buena voluntad de conformidad con lo que han aprendido, aun cuando su entendimiento todavía sea incompleto. Esa es la forma en que todos debemos recibir el Evangelio. Tal como el Salvador enseñó: “… el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él” (Lucas 18:17).

El llamamiento de enseñar a los niños es una responsabilidad sagrada y es normal sentirse abrumado de vez en cuando. Sin embargo, recuerde que su Padre Celestial le ha llamado y que le sostendrá. Esta es la obra del Señor, y si sirve “con todo [su] corazón, alma, mente y fuerza” (Doctrina y Convenios 4:2), Él aumentará sus habilidades, dones y talentos, y el servicio que preste bendecirá la vida de los niños a quienes enseña.