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1 Nefi 8:1–18: El amor de Dios es preferible a todas las cosas


“1 Nefi 8:1–18: El amor de Dios es preferible a todas las cosas”, El Libro de Mormón: Manual del maestro, 2024

“1 Nefi 8:1–18: El amor de Dios es preferible a todas las cosas”, El Libro de Mormón: Manual del maestro

1 Nefi 8:1–18

El amor de Dios es preferible a todas las cosas

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El árbol de la vida

¿Cómo describirías el amor de Dios? Lehi tuvo una visión en la que vio un hermoso árbol. Comió del fruto de ese árbol, el cual “era de lo más dulce, superior a todo” lo que había probado antes (1 Nefi 8:11). Ese árbol y su fruto representan el amor de Dios, que se manifiesta en el nacimiento, la vida, el ministerio y el sacrificio expiatorio de Jesucristo. Este amor llenó el alma de Lehi “de un gozo inmenso” (1 Nefi 8:12). El objetivo de esta lección es ayudarte a aumentar tu deseo de experimentar el amor de Dios y la expiación de Jesucristo.

Anime a los alumnos a compartir experiencias. Cada persona de la clase es una fuente abundante de testimonio, perspectivas y experiencias únicas en cuanto a vivir el Evangelio. Brinde oportunidades para que los alumnos compartan experiencias personales apropiadas. Deles las gracias cuando estén dispuestos a relatar tales experiencias.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a meditar sobre las preguntas siguientes: ¿De qué formas puede alguien experimentar el amor de Dios? ¿En qué ocasiones han sentido el amor de Él por ustedes? Los alumnos también podrían hablar con un familiar o con un líder de la Iglesia sobre la forma en que experimentan el amor de Dios por ellos.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

La oscuridad y la luz

Considere mostrar un video de uno de esos relatos compartidos en la conferencia general. También podría relatar una experiencia personal para ayudar a los alumnos a comenzar a percibir lo que se siente al estar en la oscuridad y desear la luz. Esto puede ayudar a los alumnos a prepararse para aprender en cuanto a su necesidad de Jesucristo para superar la oscuridad en su vida.

Andar en bicicleta a través de un túnel de 24 kilómetros (15 millas) (véase Vern P. Stanfill, “Elegir la luz”, Liahona, noviembre de 2015, págs. 55–57).

Las luces del Templo de Salt Lake apagadas por la noche (véase Sharon Eubank, “Cristo: La luz que resplandece en las tinieblas”, Liahona, mayo de 2019, págs. 73–76).

Hacer rapel en una cueva profunda (véase Timothy J. Dyches, “La luz se allega a la luz”, Liahona, mayo de 2021, págs. 112–115).

Lehi ora por la misericordia del Señor

Mientras vivía en el desierto, Lehi compartió con su familia los detalles de una visión que había tenido. En esa visión, Lehi se encontraba en “un desierto obscuro y lúgubre” (1 Nefi 8:4).

A fin de ayudar a los alumnos a visualizar los versículos siguientes, podría ser útil pedirles que los lean lentamente o que usted los lea e invite a los alumnos a cerrar los ojos e imaginar lo que describen.

Lee 1 Nefi 8:5–8 para saber lo que le sucedió a Lehi y lo que sintió. Puede resultarte útil visualizar lo que leas. Busca detalles descriptivos que puedan ayudarte a crear una imagen mental de los acontecimientos o imaginarlos como una película.

  • ¿Qué tipo de pensamientos o sentimientos crees que condujeron a Lehi a orar para pedir misericordia?

Dedica un momento a meditar sobre las diferentes formas en que podríamos sentir oscuridad en nuestra vida y las razones por las que podríamos clamar al Señor pidiendo misericordia.

Lee 1 Nefi 8:9–12 para averiguar la forma en que el Señor ayudó a Lehi.

Para ayudar a los alumnos a seguir visualizando las Escrituras, considere mostrar el video “Lehi descubre el árbol de la vida” (4:32) desde 1:52 hasta 4:32.

En tu diario de estudio, haz un dibujo sencillo que represente el árbol que vio Lehi. Dibuja el fruto en el árbol y haz anotaciones en el fruto basándote en las explicaciones de Lehi que se encuentran en 1 Nefi 8:10–12. (A fin de obtener más descripciones para anotar en el fruto del árbol, lee 1 Nefi 15:36 y Alma 32:42). Al dibujar, piensa en lo que podrían representar este árbol y su fruto.

Más adelante, Nefi quiso conocer y comprender personalmente la visión, incluido el significado del árbol que Lehi había visto. Mientras Nefi meditaba sobre lo que se le había enseñado, el Espíritu le mostró una visión de la virgen María con el niño Jesús en los brazos (véase 1 Nefi 11:13, 20).

Observa la imagen siguiente y piensa en el motivo por el cual se podría haber mostrado esto a Nefi cuando quiso conocer el significado del árbol.

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María y el Niño Jesús

Lee 1 Nefi 11:21–23 y busca qué más se le mostró a Nefi y la forma en que eso lo ayudó a conocer el significado del árbol. Podrías hacer anotaciones en el árbol basándote en lo que aprendas.

  • ¿Cómo crees que el Salvador nos ayuda a sentir el amor de Dios?

El élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó:

La mayor manifestación del amor de Dios por Sus hijos es el ministerio terrenal, el sacrificio expiatorio y la resurrección del Señor Jesucristo. El fruto del árbol puede considerarse un símbolo de las bendiciones de la expiación del Salvador (véase David A. Bednar, “Vengan y vean”, Liahona, noviembre de 2014, pág. 109).

  • A partir de la visión de Lehi y de la declaración del élder Bednar, ¿qué verdades puedes reconocer acerca del amor de Dios?

Es posible que los alumnos descubran varias verdades diferentes. Anime a los alumnos a expresar por qué la verdad que encontraron es importante para ellos.

Sentir el amor de Dios y gran gozo por medio de Jesucristo

Una verdad que podemos aprender es la siguiente: El amor de Dios, que se manifiesta por medio de Jesucristo, es preferible a cualquier otra cosa y brinda el mayor gozo.

Las actividades siguientes pueden ayudarte a reconocer la forma en que podrías sentir el amor de Dios por ti gracias a Jesucristo. A medida que realices estas actividades, trata de reconocer varias bendiciones que se reciben por medio de Jesucristo y Su expiación, y anótalas en el fruto que dibujaste o alrededor de él.

Podría ser eficaz realizar cada una de las actividades siguientes de forma distinta. Los alumnos podrían trabajar de dos en dos o en grupos pequeños en la actividad 1. La mejor manera de llevar a cabo la actividad 2 podría consistir en escoger un video y verlo como clase. Los alumnos podrían realizar la actividad 3 individualmente.

Actividad 1

Lee lo que testificó Lehi en 1 Nefi 10:5–6 luego de ver esta visión. Lee también algunos de los siguientes pasajes de las Escrituras o busca otros que ilustren las bendiciones que podemos recibir por medio de la expiación de Jesucristo: Isaías 53:4–5; Juan 1:17; Mosíah 4:2–3; Alma 7:11–12; Helamán 5:12.

Actividad 2

Mira uno de los videos siguientes, que se encuentran disponibles en LaIglesiadeJesucristo.org, y busca las bendiciones que se reciben por medio de Jesucristo:

La Expiación — No es algo momentáneo” (3:00)

Gracias a Él” (2:36)

Paz en Cristo” (4:09)

Actividad 3

Medita sobre las formas en que has experimentado las bendiciones que ofrece Jesucristo o cómo has visto esto en la vida de otras personas. Esto podría incluir las formas en que el Señor te bendijo durante momentos de oscuridad.

¿Qué aprendiste?

Dedica un momento a repasar las bendiciones que podemos recibir por medio de la expiación de Jesucristo, las cuales anotaste en tu dibujo del fruto. Medita sobre por qué estas bendiciones podrían “hacer a uno feliz” (1 Nefi 8:10), ser “de lo más dulce, superior a todo” (1 Nefi 8:11), y llenarte “de un gozo inmenso” (1 Nefi 8:12).

Invite a varios alumnos a compartir lo que aprendieron y por qué fue significativo para ellos. Las preguntas siguientes podrían ser útiles:

  • ¿Qué aprendiste acerca del amor de Dios por ti?

  • ¿Cuáles de las bendiciones que se pueden recibir por medio de Jesucristo deseas más en tu vida? ¿Por qué?

  • ¿Qué bendiciones has recibido gracias al amor que Dios ha demostrado al enviar a Su Hijo Jesucristo para expiar por ti?

Luego de escuchar las experiencias de los alumnos, podría compartir sus propios pensamientos y testimonio del amor de Dios y de las bendiciones que podemos recibir por medio del Salvador y Su expiación.