“1 Nefi 17–18: ‘[A]cudía a mi Dios’”, El Libro de Mormón, Manual del alumno, 2024
“1 Nefi 17–18: ‘[A]cudía a mi Dios’”, El Libro de Mormón, Manual del alumno
1 Nefi 17–18
“[A]cudía a mi Dios”
Todos tendremos pruebas y sufrimientos en la vida. En algunas ocasiones, se producirán como consecuencia de nuestros propios errores o simplemente por vivir en un mundo caído e imperfecto. Tal como lo experimentó Nefi en su viaje hacia la tierra prometida, algunas pruebas y sufrimientos se producen cuando las personas de nuestro entorno utilizan su albedrío de forma incorrecta. Independientemente de la causa de nuestro sufrimiento, Jesucristo ofrece fortaleza y sanación a quienes lo buscan. Esta lección puede ayudarte a sentir amor y gratitud por el Señor, independientemente de las circunstancias que estés afrontando.
¿Cómo reaccionarías?
¿Te has fijado alguna vez en las diferentes maneras en que a veces las personas reaccionan ante situaciones similares? Lee las siguientes situaciones hipotéticas y piensa en las diferentes reacciones que podrían tener las personas de esas situaciones.
Guillermo acudió al oftalmólogo porque tenía la visión borrosa. El médico le dijo que tenía un trastorno poco común que lo volvería completamente ciego en el plazo de un año.
El hermano de Layla se enojó con ella y la empujó, de modo que ella se lesionó el tobillo. Layla tenía que jugar en un partido del campeonato de su equipo, pero ahora no podía correr.
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¿Cuáles son algunas de las diferentes maneras en que las personas de estas situaciones hipotéticas podrían reaccionar ante su difícil situación?
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¿Cuáles creen que son algunas de las razones por las cuales las personas reaccionan de manera positiva o negativa ante las pruebas que experimentan?
La perspectiva de Nefi
Es posible que al estudiar el Libro de Mormón hayas notado diferencias entre las acciones y la actitud de Nefi en comparación con las de Lamán y Lemuel, aunque sufrieron muchas de las mismas aflicciones. Presta atención a esas diferencias a medida que estudias los versículos siguientes.
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Viajar a través del desierto:Compara el relato de Nefi que se encuentra en 1 Nefi 17:1–3 con lo que dijeron Lamán y Lemuel en 1 Nefi 17:20–22.
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Construir un barco:Compara la respuesta de Nefi en 1 Nefi 17:8–9, 15 con la de Lamán y Lemuel en 1 Nefi 17:17–18.
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¿Qué pensamientos o impresiones tuviste al comparar las palabras y acciones de Nefi con las de Lamán y Lemuel?
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¿Qué notaste en cuanto a la relación que cada una de estas personas tenía con Dios?
Todos tenemos momentos en los que reaccionamos bien ante las situaciones difíciles y otros en los que no reaccionamos tan bien. Reflexiona sobre si, en general, actúas más como Nefi o como Lamán y Lemuel cuando enfrentas situaciones difíciles. A medida que sigas estudiando, busca enseñanzas que puedan ayudarte a reaccionar de maneras más positivas cuando te enfrentes a dificultades o pruebas.
Lehi y su familia navegan hacia la tierra prometida
Luego de que Nefi y sus hermanos terminaron de construir el barco, el Señor mandó a Lehi y a su familia que comenzaran a navegar rumbo a la tierra prometida (véase 1 Nefi 18:1–8).
Lee 1 Nefi 18:9–21 y busca algunas de las dificultades que experimentaron durante ese viaje. A medida que estudias, continúa comparando las acciones y la actitud de Nefi con las de Lamán y Lemuel. Si lo deseas, también podrías mirar el video “La familia de Lehi navega a la tierra prometida”, desde 3:13 hasta 11:31, que está disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.
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Responde al menos dos de las preguntas siguientes en tu diario de estudio:
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¿Qué te llamó la atención de este relato?
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Observa lo que registró Nefi en el versículo 16. Si tuvieras la oportunidad de hacer algunas preguntas a Nefi en cuanto a sus acciones en este versículo, ¿qué le preguntarías?
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¿Cómo crees que podría responder Nefi a tus preguntas?
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El élder Dale G. Renlund, del Cuórum de los Doce Apóstoles, compartió una razón por la que Nefi pudo reaccionar de la manera en que lo hizo durante sus dificultades.
Dado que se habían distanciado del Salvador, Lamán y Lemuel murmuraban, eran contenciosos e incrédulos. Consideraban que la vida era injusta y que tenían derecho a la gracia de Dios. Por el contrario, como Nefi se había acercado a Dios, él debe de haber reconocido que la vida sería mucho más injusta para Jesucristo. Aunque era completamente inocente, el Salvador sería el que más padecería.
Cuanto más cerca estamos de Jesucristo en los pensamientos y las intenciones de nuestro corazón, más apreciamos Su padecimiento inocente, más agradecidos estamos por la gracia y el perdón, y más queremos arrepentirnos y llegar a ser como Él (Dale G. Renlund, “[Para que] pudiese atraer a mí mismo a todos los hombres”, Liahona, mayo de 2016, pág. 40).
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¿Qué verdad aprendiste de la declaración del élder Renlund que pueda ayudarte con tus pruebas?
Una verdad que tal vez hayas encontrado es la siguiente: Cuando estamos cerca de Jesucristo, podemos sentir amor y gratitud por Él, incluso en los momentos difíciles.
Dedica un minuto a reflexionar sobre lo que has aprendido hoy. Evalúa cuán cerca te sientes del Padre Celestial y de Jesucristo. ¿Qué puedes hacer para acercarte más a Ellos? ¿Qué diferencia crees que podría suponer esto en tu vida? Anota tus ideas e impresiones espirituales en tu diario de estudio.