Abuso o maltrato
¿Cuáles son las señales de que alguien está siendo abusado?

“¿Cuáles son las señales de que alguien está siendo abusado?”, Cómo ayudar, 2018.

“¿Cuáles son las señales de que alguien está siendo abusado?”, Cómo ayudar.

¿Cuáles son las señales de que alguien está siendo abusado?

Nota: No se espera que usted diagnostique si una persona está padeciendo problemas relacionados con el abuso, ni se le alienta a hacerlo. Esta información puede ayudarle a determinar cuándo puede ser necesaria una intervención profesional.

Las señales del abuso no siempre son fáciles de reconocer. Alguien que ha padecido o está padeciendo abuso puede mostrar ciertas señales que indican que hay un problema, pero puede que exista abuso incluso en ausencia de señales externas. Además, es posible que las señales que podrían indicar abuso se deban a otras dificultades. Hablar con la víctima puede ser un buen primer paso para entender lo que está sucediendo. Sin embargo, las víctimas a menudo tienen dificultades para expresar que han sido o son objeto de abuso. Si hay algún indicio de abuso, lea “¿Qué debo hacer si sé o sospecho que alguien está siendo abusado?”.

Como hijos de Dios y hermanos y hermanas, tenemos la responsabilidad de ser conscientes de las necesidades y preocupaciones de los demás y de tenderles una mano con amor. La hermana Bonnie L. Oscarson, quien fue Presidenta General de las Mujeres Jóvenes, enseñó que debemos cuidarnos unos a otros, velar los unos por los otros, consolarnos mutuamente y brindarnos apoyo en tiempos buenos y malos (véase “Hermandad: Cuánto nos necesitamos unas a otras”, Liahona, mayo de 2014, pág. 119).

Señales de advertencia generales

Las víctimas de abuso a menudo muestran varias señales de advertencia. Las señales de abuso pueden variar según el tipo de abuso (sexual, físico, emocional o verbal) y la edad de la persona que es objeto de abuso.

Las víctimas de abuso pueden mostrar las siguientes señales de advertencia:

  • Actuar de manera diferente a como lo hacen normalmente

  • Mostrar una conducta más agresiva

  • Estar más nerviosos o más a la defensiva

  • Tener dificultad para dormir o pesadillas

  • Aislarse y no querer estar con otras personas

  • Perder el interés en actividades que antes les gustaban

  • Tener lesiones físicas sin explicación aparente

  • Tener un temperamento más negativo (enojo, depresión, tristeza) de lo normal

  • Preocupación por el sexo

  • Participar en conductas dañinas (lo cual puede abarcar autolesiones, el consumo de drogas y un comportamiento sexual arriesgado o nocivo)

Estas señales por sí solas no implican que una persona es objeto de abuso. Para informarse más sobre cómo hablar con una persona que usted sospecha que puede estar sufriendo abuso, lea el artículo “¿Qué debo hacer si sé o sospecho que alguien está siendo abusado?”.

Emociones, pensamientos y conductas que suelen experimentar los sobrevivientes del abuso sexual

El aprender qué emociones, pensamientos y conductas pueden resultar de un trauma sexual puede ayudarle a reconocer las señales del abuso. También puede ayudarle a comprender a las víctimas, a sentir empatía por ellas y a motivarlas a procurar ayuda. Si bien la raíz de estas emociones, pensamientos y conductas es el abuso, los efectos pueden manifestarse en muchos aspectos de la vida de la víctima.

Emociones

  • Dudan de ellas mismas y les falta confianza.

  • Sienten vergüenza.

  • Tienen confusión en cuanto a su identidad.

  • Se sienten enojadas con ellas mismas y con los demás.

  • Sienten una culpabilidad excesiva.

  • Tienen miedo y dificultad para confiar en los demás.

  • Sufren dolor constante y agotamiento.

  • Sienten que todas las personas les miran y pueden ver en su interior.

  • Sufren depresión o ansiedad.

  • Se muestran indecisas.

Pensamientos

Se preguntan:

  • ¿Por qué me está sucediendo esto?

  • ¿Por qué los demás no me quieren?

  • ¿Por qué no puedo ser bueno?

  • ¿Qué me ha sucedido?

  • ¿Por qué no me dejan en paz?

  • ¿Por qué no puedo ser como los demás?

  • ¿Por qué siempre me sucede a mí?

  • ¿Por qué Dios u otra persona no evita esto?

Sienten culpabilidad y se condenan a sí mismos:

  • Debo de haberlo causado de alguna manera.

  • Debe de ser culpa mía.

  • Debo de ser una persona muy mala.

  • Debe de haber algo terriblemente malo en mí.

A veces creen:

  • Dios no me ama.

  • Mis padres no pueden amarme.

  • Mi situación nunca cambiará.

Otros pensamientos:

  • No confían en su propio juicio.

  • Creen que el mundo estaría mejor sin ellos.

  • No consiguen ir al mismo paso que los demás.

  • Tienen una actitud de “no me importa”.

Conductas

  • Se aíslan o atacan verbalmente a los demás.

  • Se vuelven extremadamente religiosos.

  • Tienen dificultades con la autoridad, lo cual abarca a los líderes de la Iglesia.

  • Sufren problemas médicos.

  • Intentan suicidarse o se hacen daño a sí mismos.

  • Participan en conductas sexuales nocivas; puede que experimenten problemas sexuales en el matrimonio.

  • Tienen relaciones nocivas y permiten que otras personas se aprovechen de ellos.

  • A menudo asumen la responsabilidad y aceptan la culpa.

  • Procuran ser perfectos.

  • Sienten una intensa compasión por los demás.

  • Se centran demasiado en las necesidades de los demás (lo que incluye a su familia) por encima de las suyas propias.

Otras conductas en niños y adolescentes:

  • Lloran fácilmente.

  • Quieren y anhelan la atención de los adultos, tal vez incluso del agresor.

  • Evitan o están desinteresados o excesivamente interesados en una conversación sobre el sexo apropiada para su edad.

  • Tienen muchos miedos que carecen de explicación.

  • Descuidan las tareas escolares, o se evaden con un exceso de trabajo escolar, deportes u otras actividades.

  • Mienten fácilmente.

  • Se rebelan contra padres y maestros.

  • Se escapan de la casa.

Recursos comunitarios y de la Iglesia

(La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no ha creado, ni mantiene ni controla algunos de los recursos que se enumeran a continuación. Si bien estos materiales están destinados a servir como recursos adicionales, la Iglesia no respalda ningún contenido que no esté de acuerdo con sus doctrinas y enseñanzas).

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