“Problema en el parque”, El Amigo, agosto de 2023, págs. 40–42.
Problema en el parque
Hunter respiró profundamente. “Yo no digo esas palabras”.
Esta historia ocurrió en EE. UU.
Hunter corría por el parque con sus amigos. Sonreía al sentir cómo el viento veloz lo empujaba. ¡Se sentía tan rápido y liviano!
Kyle tocó la cerca primero. “¡Gané!”, gritó él.
Hunter llegó a la cerca un momento después. “¡No es justo! Tu empezaste primero”.
“Sí”, dijo Miguel. “¡Echemos una carrera hasta el árbol!”.
Hunter comenzó a correr de nuevo. Esta vez, él tocó el árbol primero. Pero Miguel estaba justo detrás de él.
“¡Gané!”, dijo Miguel.
“No, Hunter ganó”, dijo Piper.
“Sí”, dijo Kyle.
Miguel cruzó los brazos, luego dijo una palabrota.
Los otros niños se rieron. Miguel volvió a decir la palabra y se rieron un poco más.
Hunter se sintió triste por dentro. Él sabía que no era bueno decir esa palabra, pero no quería que se burlasen de él y no dijo nada.
Piper dijo otra palabrota. Entonces Kyle dijo otra.
“Ahora te toca a ti, Hunter”, dijo Kyle.
“Sí, vamos”, dijo Miguel. “Di una palabrota nueva”.
Hunter respiró profundamente. “Yo no digo esas palabras”.
“Decir una palabra no te hará daño”, dijo Kyle.
“No quiero”, dijo Hunter.
“¿Tienes mucho miedo?”, dijo Miguel riéndose.
Hunter se ruborizó. “Me voy a jugar a otro sitio”.
El resto de los niños continuaron riéndose y diciendo palabrotas. Hunter quería escabullirse. El parque ya no era tan divertido ahora. “Nos vemos más tarde”, murmuró él.
Hunter se puso las manos en los bolsillos y pasó despacio junto a los demás niños. Ya no se sentía rápido ni liviano. Se sentía abrumado.
Encontró a su mamá y a su papá sentados en un banco. Papá dejó el libro. “¿Estás bien?”.
Hunter se encogió de hombros. “Empezaron a decir palabrotas, yo no quise hacerlo, así que me fui”.
Su mamá sonrió. “Eso ha sido valiente de tu parte”.
“Estamos orgullosos de ti”, dijo su papá. “Es difícil tomar buenas decisiones cuando las personas a nuestro alrededor no lo hacen”.
Hunter suspiró. Estaba contento de haber tomado la decisión correcta, pero aun así no se sentía bien.
“¿Quieres ir a casa?”, le preguntó su mamá.
Hunter lo pensó. “Todavía no”, dijo él. Vio a otro grupo de niños que jugaban en las tirolinas [cable o zip line]. “Voy a ir por allí”.
Mientras Hunter se acercaba, uno de los muchachos lo saludó. “Hola, soy David”.
“Yo soy Hunter. ¿Puedo saltar contigo?”.
“¡Claro!”.
Hunter se lanzó en la tirolina [cable o zip line] y sintió el viento pasar. Mientras jugaba con David y los demás, volvió a sentirse rápido y liviano. Él había hecho lo correcto, aunque fuera difícil. Estaba contento de haber tomado una buena decisión.
Ilustraciones por Shawna J. C. Tenney.