2021
Géoffroy Koussemou
Enero 2021


Pioneros en toda tierra

Géoffroy Koussemou

Primer misionero de Benín

Géoffroy sabía que Dios estaba dispuesto a ayudarlo si hacía su parte.

Imagen
missionary in Benin

Géoffroy salió de la clase con su amigo Théodore. Ambos tenían 16 años y vivían en Benín, un país de África. Iban a una nueva escuela para aprender sobre agricultura. Era la primera vez que vivían lejos de su familia. Tenían que estudiar y trabajar durante largas horas todos los días.

Géoffroy se puso la mochila al hombro. “Creo que debería dejar la escuela; estas clases son muy difíciles”.

“¡No!”, exclamó Théodore. “No dejes los estudios; tienes que confiar en Dios. Si lo haces, tendrás éxito”.

Las palabras de Théodore se grabaron en Géoffroy todo el resto del día. Géoffroy se había criado como cristiano, pero nunca había tratado de confiar en Dios. Se arrodilló en el piso, pero no comenzó a orar; estaba nervioso. Si no recibía ayuda de alguna parte, nunca podría aprobar sus clases. Lentamente, inclinó la cabeza.

“Padre Celestial”, dijo, “por favor muéstrame cómo confiar en ti. ¿Podrías ayudarme a aprobar mis clases? Prometo servirte lo mejor que pueda el resto de mi vida”.

A partir de ese momento, Géoffroy se sintió más valiente y decidido. Las clases todavía eran difíciles, pero sabía que Dios estaba dispuesto a ayudarlo, si él hacía su parte. Dejó de lado sus temores y se esforzó mucho.

Le fue bien en la escuela. Dieciocho meses después, por fin estaba listo para graduarse. ¡Lo había conseguido!

Después de terminar los estudios, Géoffroy siguió esforzándose mucho. Al poco tiempo, tuvo su propia granja.

Entonces, un día vio a un amigo que era miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Ese amigo le dio un Libro de Mormón. Géoffroy lo leyó y oró. Tenía en su interior un sentimiento de calidez y paz y supo, con certeza, que la Iglesia es verdadera.

Él ya sabía lo que tenía qué hacer a continuación. Trabajó, oró y confió en Dios. Primero se bautizó; luego compartió su testimonio con quienes lo rodeaban y algunos de sus amigos también se bautizaron. Lo que comenzó como un pequeño grupo de miembros pronto se convirtió en una rama. ¡Estaba ayudando a que la Iglesia creciera en Benín!

Géoffroy quería ir a una misión, pero no tenía suficiente dinero, así que vendió su granja. Unos meses después, recibió un llamamiento para servir en una misión en Costa de Marfil. ¡Fue el primer misionero de Benín en recibir un llamamiento misional!

Su dedicación lo ayudó durante años. Debido a su fe y a la de otros miembros, se bautizaron muchas personas más. Su rama se convirtió en un barrio y ¡ese barrio ahora es parte de la primera estaca de Benín!

Géoffroy Koussemou continúa trabajando mucho y confiando en Dios. Sabe que pueden suceder grandes cosas con la ayuda de Dios. ●

Imagen
Friend Magazine, Global 2021/01 Jan

Ilustraciones de Isabel Muñoz.