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¿Cómo puedo fortalecer a mi familia?


Mi Deber a Dios

¿Cómo puedo fortalecer a mi familia?

“La felicidad en la vida familiar tiene mayor probabilidad de lograrse cuando se basa en las enseñanzas del Señor Jesucristo. Los matrimonios y las familias que logran tener éxito se establecen y mantienen sobre los principios de la fe, la oración, el arrepentimiento, el perdón, el respeto, el amor, la compasión, el trabajo y las actividades recreativas edificantes” (“La Familia: Una Proclamación para el Mundo”, Liahona, noviembre de 2010, pág. 129). Al ayudar a nuestros padres a lograr estas metas, podemos ayudar a nuestra familia a alcanzar la felicidad que nuestro Padre Celestial desea para nosotros.

Prepararse espiritualmente

¿Cuáles son algunas de las experiencias que ha tenido con su familia que le hayan brindado felicidad? ¿Qué bendiciones ha visto en su familia por haber seguido usted las enseñanzas del Salvador?

¿Qué sabe acerca de la vida familiar de los jóvenes a los que enseña? ¿Cómo puede ayudarles a comprender que las familias son más felices cuando se esfuerzan por obedecer las enseñanzas del Salvador?

Con espíritu de oración, estudie los siguientes pasajes de las Escrituras y recursos. ¿Qué considera que ayudará a los jóvenes a fortalecer a su familia?

1 Nefi 8:12 (Lehi deseaba que su familia participara del fruto del árbol de la vida)

1 Nefi 16:14–32 (Nefi fortalece a su familia)

2 Nefi 25:26 (Enseñamos a nuestros hijos acerca de Cristo)

Cumplir con Mi Deber a Dios, 2010, págs. 27, 51, 75 y 82.

La Familia: Una Proclamación para el Mundo”, Liahona, noviembre de 2010, pág. 129.

Dieter F. Uchtdorf, “Un elogio a los que salvan”, Liahona, mayo de 2016, págs. 77–80.

Bonnie L. Oscarson, “Defensoras de la Proclamación sobre la Familia”, Liahona, mayo de 2015, págs. 14–17.

M. Russell Ballard, “Padres e hijos: Una relación excepcional”, Liahona, noviembre de 2009, págs. 47–50; véase también el video “Padres e hijos”

Videos: “Dos hermanos diferentes”, “Por medio de cosas pequeñas”

Enseñar a la manera del Salvador

El Salvador amaba a Sus discípulos, oraba por ellos y les servía constantemente. Buscó oportunidades para estar a su lado y expresarles Su amor. Conocía sus intereses, esperanzas, deseos y lo que sucedía en su vida. Invite a los jóvenes a buscar maneras de compartir su amor por sus familiares y prestarles servicio.

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Video: “Fortalezca a nuestra familia”

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Permita que los jóvenes dirijan

Un miembro de la presidencia del cuórum (o un ayudante del obispo en el cuórum de presbíteros) dirige la reunión. Él dirige a los demás jóvenes para que deliberen en consejo en cuanto a los asuntos del cuórum, les enseña sus deberes del sacerdocio (usando las Escrituras y el librito Mi Deber a Dios), los alienta a compartir las experiencias que han tenido al cumplir con su deber a Dios e invita al asesor o a otro miembro del cuórum a enseñar una lección del Evangelio. Puede prepararse llenando una Agenda de la reunión del cuórum durante una reunión de presidencia.

Comience la experiencia de aprendizaje

Elija alguna de las ideas siguientes, o utilice las suyas, para repasar la lección de la semana anterior y presentar la de esta semana:

  • Antes de la clase, invite a un integrante de la presidencia del cuórum a seleccionar un himno que se relacione con la lección de la semana anterior. Pídale que lea las estrofas del himno y que comparta con los miembros del cuórum la relación del himno con la lección pasada.

  • Pida a un miembro del cuórum que muestre una lámina de una familia de las Escrituras y que comparta cómo las acciones de varios miembros de esa familia causaron felicidad o tristeza a la familia (familias posibles: la de Lehi, Jacob, Adán, etc.).

Aprender juntos

El propósito de esta lección es alentar a cada joven a cumplir con su deber como poseedor del sacerdocio para fortalecer a su familia. Como parte de esta lección, los miembros del cuórum deben hacer planes en sus libritos de Mi Deber a Dios para prestar servicio a sus familiares o empezar a trabajar en el proyecto “La familia y las amistades”. Antes de la reunión del cuórum, invite a los jóvenes a llevar sus libritos de Mi Deber a Dios a la Iglesia. En futuras reuniones de cuórum, invítelos a compartir experiencias que hayan tenido al cumplir con sus planes.

  • En su discurso “Un elogio a los que salvan”, el presidente Dieter F. Uchtdorf enseñó acerca de la familia: “Aunque compartamos los genes, no somos iguales. Tenemos espíritus únicos… podemos elegir celebrar las diferencias”. ¿Qué atributos o fortalezas únicos tiene cada jovencito? ¿De qué manera puede utilizar cada joven sus fortalezas únicas para bendecir a su familia? Los miembros del cuórum también pueden buscar y compartir cosas que hayan sido relevantes para ellos en pequeños grupos. Invite a los miembros del cuórum a ver uno de los videos que se sugieren en esta reseña y a buscar lo que hicieron los integrantes de la familia para mejorar su relación. ¿Cómo pueden los hombres jóvenes celebrar las diferencias en sus respectivas familias? ¿Qué ideas pueden ellos compartir acerca de cómo podrían fortalecer las relaciones familiares?

  • En el discurso “Defensoras de la Proclamación sobre la familia”, Bonnie L. Oscarson enseñó que “Todos nosotros —mujeres, hombres, jóvenes, niños, solteros o casados— podemos esforzarnos por ser amos de casa. Debemos hacer de nuestra casa un lugar de orden, de refugio, de santidad y de protección” (Liahona, mayo de 2015, pág. 17). ¿De qué otra manera sugiere la hermana Oscarson que los miembros de la Iglesia pueden defender y fortalecer a sus familias? ¿Qué pueden hacer ahora los jóvenes para hacer que sus hogares sean lugares de orden, de santidad y de protección?

  • Considere invitar a varios miembros del cuórum a enseñar parte de esta lección. Por ejemplo, podrían compartir lo que hace su familia para brindarles felicidad, o podrían valerse de una de las actividades siguientes. Puede que algunos presbíteros hayan completado la actividad “La familia” en Mi Deber a Dios (págs. 80–82) y podrían compartir sus experiencias.

  • Invite a los jóvenes a anotar los obstáculos que impiden que algunas familias sean más felices. Ofrezca a cada joven una copia de “La Familia: Una Proclamación para el Mundo” (véase Mi Deber a Dios, pág. 107). Conceda unos minutos a los miembros del cuórum para leer el párrafo siete y subrayar los principios que conducen a la felicidad en la vida familiar. Pida a cada joven que lea 1 Nefi 16:14–32 y comparta cómo aplicó estos principios la familia de Lehi. Pídales que compartan experiencias que hayan tenido y que les hayan enseñado la importancia de estos principios en la vida familiar.

  • Invite a los jóvenes a leer “La familia” en Para la Fortaleza de la Juventud, y determinar y compartir lo que pueden hacer para fortalecer a su familia. Invite a cada joven a abrir su librito de Mi Deber a Dios por la sección “Presta servicio a los demás” (diácono, pág. 27; maestro, pág. 51; presbítero, pág. 75) y a leer lo que podrían hacer para fortalecer a su propia familia mediante el servicio (véase “Mi plan personal para prestar servicio”). Pida a algunos jóvenes que compartan sus planes con el cuórum.

Pida a los jóvenes que compartan lo que hayan aprendido hoy. ¿Comprenden ellos cómo pueden fortalecer a su familia al ser poseedores del sacerdocio? ¿Qué sentimientos o impresiones tienen? ¿Desean hacer otras preguntas? ¿Resultaría útil dedicarle más tiempo a este tema?

Planes de Mi Deber a Dios

Aparte un tiempo al final de la reunión del cuórum para que los jóvenes hagan planes en sus libritos de Mi Deber a Dios o en la versión en línea de Mi Deber a Dios. Los planes son personales, pero los miembros del cuórum pueden ayudarse mutuamente a generar ideas entre ellos.

Invítelos a actuar

El joven que dirige concluye la reunión. Él podría:

  • Invitar a los jóvenes a escribir en sus libritos de Mi Deber a Dios lo que podrían hacer para fortalecer sus relaciones con sus familiares (si aún no lo han hecho; véase la pág. 82).

  • Invitar a los miembros del cuórum a compartir cómo han ayudado a sus familias a ser más felices.

  • Compartir su testimonio acerca de la importante responsabilidad que tiene cada joven de ayudar a su familia a ser más feliz.

Actividades para los jóvenes

Planifique una actividad de la Mutual que ayude a los jóvenes a aplicar lo que aprendieron en esta lección.