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¿Cómo puedo desarrollar un amor semejante al de Cristo?


¿Cómo puedo desarrollar un amor semejante al de Cristo?

El amor puro de Cristo, conocido como la caridad, es el tipo de amor más elevado, noble y fuerte, y el de mayor gozo para el alma (véase 1 Nefi 11:23). Jesucristo es el ejemplo perfecto de caridad. En Su ministerio terrenal, Él “anduvo haciendo bienes”, mostrando tierna compasión por los pobres y los afligidos (véanse Mateo 4:23; Hechos 10:38). Para obtener un amor cristiano, debemos procurarlo, orar por él y seguir el ejemplo del Salvador en nuestros pensamientos, palabras y hechos.

Prepararse espiritualmente

¿Cuándo han demostrado otras personas amor semejante al de Cristo por usted? ¿Qué efecto tuvo esto en usted? ¿Cuándo ha sentido amor semejante al de Cristo? ¿Cómo desarrolla amor semejante al de Cristo por otras personas?

¿Qué oportunidades tienen los hombres jóvenes para mostrar amor semejante al de Cristo? ¿Por qué es importante aprender a amar a los demás como Cristo lo hizo?

Con espíritu de oración, estudie los siguientes pasajes de las Escrituras y recursos, y seleccione los que mejor se apliquen a los jóvenes.

1 Samuel 16:7 (Jehová mira el corazón)

Lucas 10:30–37 (La parábola del Buen Samaritano); véase también el video de la Biblia: “Parábola del Buen Samaritano”

Lucas 23:33–34 (Jesús perdonó a los soldados romanos que lo crucificaron)

Juan 15:9–13 (Cristo demostró Su amor por nosotros cuando entregó Su vida)

1 Juan 4:7–11, 18–21 (Dios es amor)

Moroni 7:45–48 (Podemos orar para estar llenos de caridad, el amor puro de Cristo)

Thomas S. Monson, “Bondad, caridad y amor”, Liahona, mayo de 2017, págs. 66–67.

Dieter F. Uchtdorf, “El perfecto amor echa fuera el temor”, Liahona, mayo de 2017, págs. 104–107.

Thomas S. Monson, “El amor: La esencia del Evangelio”, Liahona, mayo de 2014, págs. 91–94.

Dieter F. Uchtdorf, “Los misericordiosos obtienen misericordia”, Liahona, mayo de 2012, págs. 70–76.

Dallin H. Oaks, “Amar a los demás y vivir con las diferencias”, Liahona, noviembre de 2014, págs. 25–28.

Caridad”, Leales a la fe, 2004, págs. 40–41.

Videos: “Compartir la luz de Cristo”, “Seamos hombres”, “Las piernas de Dayton”

Enseñar a la manera del Salvador

El Salvador enseñó por medio del ejemplo. Enseñó a Sus discípulos a orar al orar con ellos. Les enseñó el modo de enseñar Su evangelio mediante la forma en que Él lo enseñó. Les enseñó a amar y a prestar servicio por la manera en que Él los amó y les sirvió. Usted será más eficaz como maestro a medida que los jóvenes sientan su amor semejante al de Cristo por ellos.

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Video:“Ayúdenos a descubrir el Evangelio”

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Permita que los jóvenes dirijan

Un miembro de la presidencia del cuórum (o un ayudante del obispo en el cuórum de presbíteros) dirige la reunión. Él dirige a los demás jóvenes para que deliberen en consejo en cuanto a los asuntos del cuórum, les enseña sus deberes del sacerdocio (usando las Escrituras y el librito Mi Deber a Dios), los alienta a compartir las experiencias que han tenido al cumplir con su deber a Dios e invita al asesor o a otro miembro del cuórum a enseñar una lección del Evangelio. Puede prepararse llenando una Agenda de la reunión de cuórum durante una reunión de presidencia.

Comience la experiencia de aprendizaje

Elija alguna de las ideas siguientes, o utilice las suyas, para repasar la lección de la semana anterior y presentar la de esta semana:

  • Invite a los jóvenes a pensar en algo que aplicaron de la lección de la semana pasada y a compartir su experiencia con el cuórum o en grupos pequeños.

  • En algunos trozos de papel, escriba la frase: “He sentido más amor de una persona cuando ____________”. Pase estos trozos de papel a cada uno de los jóvenes antes de que comience la reunión de cuórum y pida a cada joven que piense en cómo llenaría el espacio en blanco. Invite a los jóvenes a compartir sus pensamientos para comenzar la lección.

Aprender juntos

Cada una de las actividades a continuación ayudará a los miembros del cuórum a aprender a desarrollar un amor semejante al de Cristo. Siguiendo la inspiración del Espíritu, seleccione una o más actividades que resulten mejor para su cuórum:

  • Invite a los jóvenes a que lean Juan 15:9–131 Juan 4:7–11, 18–21; y Moroni 7:47–48. ¿Qué aprenden los jóvenes en estos versículos acerca de cómo desarrollar un amor semejante al de Cristo? ¿Cómo les ayudarán a ser siervos del sacerdocio más eficaces esas cualidades? Invite a los miembros del cuórum a que busquen relatos en las Escrituras que ilustren el amor del Salvador y pídales que compartan esos relatos unos con otros. ¿Cómo podemos seguir el ejemplo del Salvador? También podrían leer y analizar los relatos de uno de los discursos que aparecen en esta reseña o compartir ejemplos de ocasiones en que ellos o alguna persona que conocen hayan sido bendecidos por actos de amor semejante al de Cristo.

  • Todo lo que Jesucristo hizo por nosotros fue debido al amor perfecto que sentía por nosotros y por Su Padre. ¿Cómo podemos desarrollar la capacidad de obedecer por amor perfecto, como lo hizo el Salvador, y no por temor? Divida al cuórum en dos grupos para estudiar el discurso del presidente Dieter F. Uchtdorf “El perfecto amor echa fuera el temor”. Asigne a un grupo que comparta lo que haya aprendido en las secciones tituladas “El temor como manipulación” y “El problema del temor” y al otro grupo que comparta lo que haya aprendido en las secciones tituladas “Una mejor manera” y “El perfecto amor echa fuera el temor”. Concédales tiempo a los jóvenes para que escriban sus pensamientos sobre las siguientes preguntas: ¿en qué forma estoy obligado a hacer cosas por temor? ¿Qué puedo hacer para desarrollar un amor semejante al de Cristo? ¿Qué quiero cambiar a causa de lo que he aprendido?

  • Lleve hojas de papel a clase (una para cada joven) con una de las siguientes palabras en la parte superior: Bondad, Caridad, y Amor. Entregue una hoja de papel e invite a cada joven a buscar en los discursos del presidente Thomas S. Monson “El amor: La esencia del Evangelio” y “Bondad, caridad y amor”, una cita o un relato que enseñe acerca de la palabra que haya en su papel. Invite a los jóvenes a que compartan lo que hayan encontrado. ¿Qué oportunidades tenemos, como cuórum, para ser más bondadosos, cariñosos y caritativos?

  • Invite a los jóvenes a buscar Lucas 10:25–29 y determinar las preguntas que el abogado le preguntó al Salvador. Explique que en respuesta a estas preguntas, el Salvador dio la parábola del Buen Samaritano. Asigne a varios hombres jóvenes a representar algunos de los personajes de la parábola y pídales que representen la historia mientras la leen juntos (versículos 30–35). De vez en cuando, haga una pausa para pedirles a aquellos que representen al levita, al sacerdote y al samaritano, por qué pueden haber actuado de la forma en que lo hicieron y analicen las respuestas como cuórum. Lean el mandamiento del Señor al intérprete de la ley en los versículos 36–37 e invite a los jóvenes a compartir situaciones similares que podrían estar afrontando y que son similares a la de esta parábola.

  • Como cuórum, lean, vean o escuchen secciones del discurso del élder Dallin H. Oaks “Amar a los demás y vivir con las diferencias”. Pida a los jóvenes que busquen el consejo que los ayudará a amar a otras personas en situaciones difíciles. ¿Qué más pueden aprender los jóvenes al estudiar un ejemplo de las Escrituras, de una persona que demostró amor a los que la perseguían u ofendían? Entre los posibles ejemplos se podría incluir al Salvador (véase Lucas 23:34), a José en Egipto (véase Génesis 45), o a Pahorán (véase Alma 61:9). Invite a los jóvenes a meditar en silencio sobre alguien en su vida por quien puedan tener malos sentimientos, y a pensar en formas en que pueden demostrar hacia esa persona un amor más semejante al de Cristo.

  • Muestre uno o más de los videos que se sugieren en esta reseña. ¿Qué aprenden los jóvenes en estos videos acerca del amor semejante al de Cristo? ¿De qué modo los mensajes de esos videos difieren de lo que el mundo enseña acerca de lo que significa ser un hombre? Pida a los jóvenes que compartan una experiencia en la que alguien les ayudó a sentir el amor del Salvador. ¿Qué les enseñó esa experiencia acerca de Jesucristo? Invite a los jóvenes a pensar en alguien que ellos saben que necesita sentir el amor del Señor. ¿Qué pueden hacer para ayudar a esa persona?

Pida a los jóvenes que compartan lo que hayan aprendido hoy. ¿Comprenden cómo desarrollar un amor como el de Cristo? ¿Qué sentimientos o impresiones tienen? ¿Desean hacer otras preguntas? ¿Resultaría útil dedicarle más tiempo a esta doctrina?

Sugerencia para la enseñanza

“El escuchar con atención es una manifestación de amor y con frecuencia requiere sacrificio. Cuando verdaderamente escuchamos a otras personas, por lo general debemos refrenarnos de lo que queremos decir para entonces permitir que otros puedan expresarse” (La enseñanza: El llamamiento más importante, 2000, pág. 71).

Invítelos a actuar

El joven que dirige concluye la reunión. Él podría:

  • Compartir sus sentimientos acerca de cómo se relaciona un amor semejante al de Cristo al cumplir con el servicio del sacerdocio.

  • Invitar a los jóvenes a responder a las impresiones que hayan tenido durante la reunión de cuórum sobre cómo desarrollar un amor semejante al de Cristo y mejorar su relación con los demás.