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It Was a Miracle [Fue un milagro]

John comparte lo que aprendió al aplicar la fórmula del éxito a su búsqueda de empleo.

Actuar con fe + Trabajar con ahínco + Trabajar con inteligencia = Éxito

“Tenía un trabajo fantástico en el que era bueno. Mi jefe estaba contento con mi trabajo, y eso hacía más fácil trabajar bien para él. Mi esposa y yo teníamos dos hijas preciosas y esperábamos un bebé. Sentíamos que teníamos todo lo que necesitábamos para nuestra joven familia, especialmente un buen futuro.

“Entonces, mi esposa enfermó. Hicimos lo mejor que pudimos hasta que nos dijeron que necesitaba atención médica a 800 kilómetros de distancia. Por supuesto, nos mudamos. Instalé a mi esposa y a los niños en la nueva casa y volví a mi trabajo hasta encontrar algo más cerca de mi familia. Creí que no tardaría mucho; estaba bien calificado y nunca había tenido problemas para encontrar trabajo en el pasado. Estaba seguro de que podía hacerlo yo solo pero, por alguna razón, no podía encontrar nada.

“Las semanas se convirtieron en meses. Trabajaba en una ciudad y buscaba trabajo en otra, preocupándome, al mismo tiempo, por mi esposa y mi familia. Era una causa perdida; necesitaba ayuda, no podía hacerlo solo. Acudí a mi Padre Celestial; ayuné y oré. Mi búsqueda de empleo se convirtió en un ejercicio de fe. Trabajé con ahínco, pidiendo al Señor que me bendijera por mi esfuerzo; pero me di cuenta de que trabajar con ahínco no era suficiente; debía trabajar con más inteligencia. Había mejores formas de buscar empleo, destrezas que debía aprender y mejorar.

“Al combinar mi fe, mi trabajo arduo y mis destrezas mejoradas, la situación mejoró. Empecé a tener entrevistas y, finalmente, conseguí un gran trabajo. Fue muy difícil estar separado de mi familia y vivir una experiencia tan dura, pero todo salió bien y aprendí muchísimo. Fue verdaderamente un milagro para mi familia. Agradezco haber vivido esa experiencia y estoy muy agradecido al Padre Celestial por haberme bendecido a lo largo del camino”.

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