Antiguo Testamento 2022
31 enero – 6 febrero. Génesis 6–11; Moisés 8: “Noé halló gracia ante los ojos de Jehová”


“31 enero – 6 febrero. Génesis 6–11; Moisés 8: ‘Noé halló gracia ante los ojos de Jehová’”, Ven, sígueme — Para la Escuela Dominical: Antiguo Testamento 2022 (2021)

“31 enero – 6 febrero. Génesis 6–11; Moisés 8”, Ven, sígueme — Para la Escuela Dominical: 2022

Imagen
Noé, su familia, los animales, el arca y un arcoíris

Ilustración de Noé al salir del arca, por Sam Lawlor.

31 enero – 6 febrero

Génesis 6–11; Moisés 8

“Noé halló gracia ante los ojos de Jehová”

En esta reseña se resaltan principios que se encuentran en Génesis 6–11 y Moisés 8, aunque no son los únicos en los que se podría concentrar al enseñar. Confíe en las impresiones espirituales que reciba conforme estudie las Escrituras.

Anote sus impresiones

Imagen
icono de compartir

Invitar a compartir

Considere pedir a los miembros de la clase que compartan un mensaje espiritual para nuestros días del relato de Noé o de la torre de Babel. Aliéntelos a compartir un pasaje de las Escrituras que respalde el mensaje.

Imagen
icono de enseñar

Enseñar la doctrina

Génesis 6–8; Moisés 8

Se recibe protección espiritual al seguir al profeta del Señor.

  • La iniquidad que había en la época de Noé puede hacernos recordar la iniquidad que nos rodea en la actualidad. A fin de ayudar a los miembros de la clase a beneficiarse de las lecciones que se encuentran en el relato de Noé, podría escribir en la pizarra las palabras Advertencias y Consuelo. Ellos podrían repasar Génesis 6–8 o Moisés 8:13–30, y encontrar algo que consideren que sea una importante advertencia para el presente y algo que consideren un consuelo (véase también “Recursos adicionales”). Podrían escribir lo que encuentren bajo el correspondiente encabezado en la pizarra. ¿Por qué es el relato de Noé de valor para nosotros en la actualidad?

Génesis 9:8–17

Las señales o los símbolos nos ayudan a recordar los convenios que hemos hecho con Dios.

  • La reseña de esta semana de Ven, sígueme — Para uso individual y familiar sugiere leer Génesis 9:8–17 y meditar sobre la forma en que las señales o los signos nos pueden servir de recordatorio de nuestros convenios. A fin de ayudar a los miembros de la clase a que compartan sus ideas, podría llevar algunos objetos que nos recuerden cosas importantes —como un anillo de matrimonio, la bandera del país o una placa de misionero— y que los comparen con la “señal” del arcoíris. ¿Qué se nos enseña en la Traducción de José Smith de Génesis 9:21–25 (que se encuentra en la Guía para el Estudio de las Escrituras) sobre esa señal? ¿De qué manera se vale Dios de señales o símbolos para ayudarnos a recordar nuestros convenios?

Génesis 11:1–9

La única manera de llegar al cielo consiste en seguir a Jesucristo.

  • El relato del pueblo de Babel que construía una torre ofrece un interesante contraste con el relato de Enoc y su pueblo que edificaron Sion, el cual los miembros de la clase estudiaron la semana pasada. Ambos grupos de personas trataban de llegar al cielo, aunque de maneras diferentes. Tal vez podría invitar a los miembros de la clase a que hagan una lista en la pizarra de cualquier cosa que recuerden sobre el pueblo de Sion (véase Moisés 7:18–19, 53, 62–63, 69) y de lo que hayan aprendido en Génesis 11:1–9 y Helamán 6:26–28 acerca del pueblo de Babel. ¿Qué diferencias encuentran? ¿Qué nos enseña eso sobre nuestros propios empeños por regresar a la presencia de Dios?

    Imagen
    La torre de Babel

    Ilustración de la Torre de Babel, por David Green.

  • La antigua ciudad de Babel ya no existe, pero el orgullo y la mundanalidad que simboliza aún existen. A fin de ayudar a los miembros de la clase a poner en práctica en su vida las lecciones que se aprenden de la torre de Babel, comience por invitarlos a que repasen Génesis 11:1–9. Después, podría repartir tiras de papel e invitarlos a que escriban cosas que hacen las personas, que las alejan de Dios. A continuación, podrían escribir en otras tiras cosas que las personas hacen, que las acercan a Él. A los jóvenes podría gustarles colocar el primer grupo de tiras de papel en forma de torre y el segundo en forma de templo. ¿Qué nos ha proporcionado Dios para ayudarnos a “lleg[ar] al cielo”? (Génesis 11:4; véase también Juan 3:16). Si lo desea, podrían cantar un himno sobre el tema, como “Más cerca, Dios, de ti” (Himnos, nro. 50).

Imagen
icono de recursos adicionales

Recursos adicionales

Lecciones que aprendemos de Noé.

El presidente Henry B. Eyring dijo:

“El no seguir el consejo profético disminuye nuestro poder de aceptarlo en el futuro. El mejor momento para haberse decidido a ayudar a Noé a construir el arca fue la primera vez que él lo pidió; después, cada vez que él pedía ayuda, toda respuesta negativa disminuía la sensibilidad al Espíritu. Y así, cada vez que solicitaba ayuda, su petición parecía más insensata, hasta que descendió la lluvia; y para entonces era demasiado tarde.

“En mi vida, siempre que he elegido posponer seguir el consejo inspirado o que he decidido que yo era la excepción, he llegado a darme cuenta de que me encontraba en peligro. Siempre que he escuchado el consejo de los profetas, lo he confirmado por medio de la oración y lo he seguido, he visto cómo me he dirigido hacia un lugar seguro” (véase “Busquemos seguridad en el consejo”, Liahona, julio de 1997, pág. 28).

¿Por qué envió Dios el Diluvio?

Algunas personas cuestionan la justicia de Dios por haber enviado un diluvio con el fin de “[raer] de sobre la faz de la tierra a los hombres” (Génesis 6:7). El élder Neal A. Maxwell explicó que en la época del gran Diluvio “la corrupción llegó a destruir el albedrío a tal punto que, en justicia, no se podían enviar espíritus aquí” (We Will Prove Them Herewith, 1982, pág. 58).

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Conceda tiempo para la reflexión. Las preguntas acertadas requieren de reflexión, análisis e inspiración. Conceda tiempo a los miembros de la clase para que reflexionen antes de pedirles respuestas (véase Enseñar a la manera del Salvador, págs. 31–34).