“El gozo de Kosei”, Para la Fortaleza de la Juventud, julio de 2021, págs. 12–15.
El gozo de Kosei
A este joven japonés le encanta compartir el Evangelio.
Fotografía de Getty Images
Toca el piano, es velocista y ¡hasta hace salto de longitud! Sin embargo, todo eso no es lo único impresionante de Kosei H., un joven de diecisiete años de Nagasaki, Japón.
“Es uno de los mejores misioneros jóvenes que he conocido”, dice la hermana Mckenna Frasure, una misionera que recientemente regresó de su servicio en Japón, donde vive Kosei. “Kosei nunca deja pasar la oportunidad de estar con los misioneros o de testificar de Cristo por medio de las actividades de la Iglesia y las redes sociales”, dice.
Kosei considera que los misioneros son algunos de sus mejores amigos. Y no es de extrañar que se sienta así, cuando te das cuenta de lo mucho que disfruta al compartir el Evangelio.
“Mi gozo es la obra misional”, dice Kosei. “Nefi nos enseñó que el fruto del árbol de la vida ‘es más deseable que todas las cosas’ (1 Nefi 11:22). Es posible que algunas personas rechacen este fruto; sin embargo, como alguien que conoce la dulzura del fruto, quiero compartir el Evangelio con quienes me rodean”.
Compartir las bendiciones del Evangelio probablemente sea el talento más grande de todos los que tiene Kosei.
Éxito en las redes sociales
Luego de tomar una clase de preparación misional, Kosei sintió un deseo aun mayor de llevar el gozo del Evangelio a sus amigos y empezó a hacerlo en línea. Una de las herramientas principales que usa para compartir mensajes y contenido relacionados con el Evangelio son las redes sociales.
Muchos de sus amigos han respondido a estas publicaciones en las redes sociales. Un amigo en particular se acercó a Kosei y le dijo: “Estoy interesado en tu Iglesia”.
Este amigo, al principio, era solo un conocido, pero su amistad se reforzó rápidamente. “Empezó preguntando por las diferencias entre su religión y la mía”, explica Kosei. “Aunque no había hablado muy a menudo con él, nos hicimos buenos amigos luego de que compartí el Evangelio en las redes sociales”.
Deportes, pasatiempos y amistades eternas
Las redes sociales no son la única forma en la que Kosei comparte su fe. Recordemos que tiene una vida ocupada, llena de actividades. Tiene muchas oportunidades de conocer personas y hacer amigos, y aprovecha esas oportunidades para compartir el gozo del Evangelio.
“Una vez invité a un amigo del club deportivo a la clase de inglés que enseñaban los misioneros en la capilla”, explica Kosei. “Él y los misioneros se hicieron buenos amigos mientras él aprendía inglés”.
Sin embargo, las conversaciones no se limitaron a las clases de inglés.
“Mi amigo empezó a pensar en por qué estos misioneros, quienes tenían más o menos su misma edad, estaban haciendo trabajo voluntario y sirviendo como misioneros en Japón. Su siguiente pregunta fue qué motivaba a los misioneros a servir. Ahora ya ha escuchado las lecciones misionales y todavía se mantiene en contacto con los misioneros a través de videollamadas”.
Cada vez que menciona el Evangelio a sus amigos, Kosei trata de equilibrar lo que comparte con el interés que muestran. “Por ejemplo, primero hablo de lo que pasa después de morir, cuál es el propósito de la vida o si Dios existe”, dice. “Luego puedo adaptarlo, según su interés”.
Por supuesto, sabe que no todos van a interesarse; ha tenido contratiempos, como todos los tenemos. Un día, luego de que varios de sus amigos le hicieran preguntas acerca de la Iglesia, Kosei trató de compartir un folleto de la Iglesia con uno de ellos. “Sin embargo, ese amigo se marchó del salón y se rio de mí con una ruidosa carcajada desde el corredor.
“Eso me causó un dolor profundo”, dice Kosei.
Pero él no deja que el desaliento lo detenga. Sabe que lo que está compartiendo bendecirá sus vidas, si lo escuchan.
El gozo que lo motiva
“Siento gozo en las enseñanzas de Cristo”, dice Kosei. “Si no conociera estas enseñanzas, tendría una vida sin gozo real”.
Aunque hace malabares con sus muchas actividades e intereses, Kosei sabe establecer prioridades. “El evangelio de Jesucristo trae esperanza a nuestra vida y revela todas las cosas que debemos hacer”, dice. “Aun cuando nos sintamos deprimidos o pasemos por momentos difíciles, la oración sincera nos dará paz y nos ayudará a tener una actitud positiva”.
Por esta razón está tan decidido a compartir el Evangelio siempre que tiene la oportunidad. ¡Quiere que otros experimenten lo que él disfruta a diario! “Espero, desde lo profundo de mi corazón, que muchas personas puedan tener la oportunidad de experimentar este gozo real”, dice.
Lo más importante
Naturalmente, compartir el Evangelio no ocupa todo su tiempo. Kosei se esfuerza muchísimo con sus otras metas en la vida. Todos los días trabaja arduamente en sus entrenamientos de carreras y resistencia. Cuando necesita relajarse un poco, toca el piano. También disfruta de la naturaleza y pasa tiempo con su familia. “Un día, salimos a la naturaleza con mis hermanos y ¡nunca olvidaré el día en el que nos comimos los peces que habíamos pescado!”, cuenta.
Sin embargo, Kosei siempre reserva tiempo para lo más importante.
Y tiene un pequeño consejo para todos los que quieran hacer lo mismo: “Cuando guardamos los mandamientos, recibimos guía y al hacerlo, podemos ser fortalecidos por el Señor. El miedo y los nervios son reemplazados por la esperanza y la confianza. Si abrimos la boca sin avergonzarnos del Evangelio, las personas llegarán a conocer el amor cristiano y se llenarán de gozo”.