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Juan 11:1–46, Parte 1


Juan 11:1–46, Parte 1

Jesús levanta a Lázaro de entre los muertos

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Christ at the tomb of Lazarus. He has His hand extended to the entry of the tomb as He commands Lazarus to rise from the dead. Lazarus (in burial robes) is visible standing inside the entry to the tomb. A man is moving the stone door of the tomb away from the tomb entry. Several people (men and women) are watching the miracle in amazement.

María y Marta le pidieron a Jesús que viniera y ayudara a su hermano enfermo, Lázaro. Jesús demoró Su viaje y llegó cuatro días después de que Lázaro hubiera muerto. Jesús mostró Su compasión y lloró con las hermanas; luego, Él levantó a Lázaro de entre los muertos. Esta lección puede ayudarte a localizar verdades sobre Jesucristo y principios que pueden guiarte a través de los desafíos de la vida.

Permitir que los alumnos reconozcan una variedad de verdades doctrinales y principios. Aprender a determinar las doctrinas y los principios que se encuentran en las Escrituras requiere una práctica concienzuda. Los maestros deben ayudar diligentemente a los alumnos a adquirir la habilidad de determinar y poner en palabras por sí mismos la doctrina y los principios.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a estudiar Juan 11 y buscar principios que podrían ayudarlos a recibir la ayuda del Salvador en sus pruebas. Pueden hacerlo por su cuenta o con sus familias. Invítelos a venir preparados para compartir lo que encontraron.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Tenga en cuenta que esta es la primera de dos lecciones sobre Juan 11 . Esta lección ayuda a los alumnos a reconocer principios que se hallan en el capítulo. La segunda lección les permite a los alumnos enseñar acerca de uno de estos principios. Sea sensible a los alumnos que podrían estar enfrentando desafíos difíciles. Si es necesario, ajuste el siguiente caso hipotético o cree otro que beneficie más a los alumnos.

Piensa en alguien de tu familia inmediata. Imagina que se enferma tanto que su vida peligra.

  • ¿Qué sentimientos podrías experimentar?

  • ¿Qué podrías hacer?

  • ¿Qué preguntas tendrías?

En Juan 11 , María, Marta y Lázaro se enfrentaron a esta circunstancia. Aunque su experiencia se relaciona con la enfermedad y la muerte, podemos aplicar los principios que aprendemos de su experiencia a cualquier desafío que enfrentemos.

Cerca de la parte superior de la página, escribe “Lo que debes saber al enfrentar desafíos”. A lo largo de la lección, piensa en los desafíos que estás enfrentando o que podrías enfrentar. Intenta localizar verdades sobre Jesucristo y Su evangelio que sientes que podrían guiarte y darte esperanza durante esos desafíos. Registra tus pensamientos en la página. Piensa detenidamente sobre cómo cada una de las verdades que determinas pueden ayudarte a amar al Salvador y a sentir Su amor.

Encontrar verdades

Determine cuál de las siguientes actividades sería más beneficiosa para los alumnos. Si los alumnos ya pueden localizar fácilmente los principios por sí mismos, considere permitirles que estudien y repasen los principios por su cuenta, sin hacerlo usted por ellos. Recuérdeles la actividad de preparación del alumno e invítelos a utilizar sus reflexiones sobre dicha actividad durante el resto de la lección.

Una técnica para el estudio de las Escrituras que puede ser útil para localizar principios consiste en detenerte cuando notes detalles importantes a fin de hacer preguntas sencillas, como las siguientes:

  • ¿Qué querría el Padre Celestial que yo aprendiera de estos versículos?

  • ¿Qué me enseña este relato sobre Jesucristo?

Lee Juan 11:1–7 y hazte las preguntas anteriores.

Invite a los alumnos a compartir lo que hayan aprendido. Escriba en la pizarra los principios que compartan. Si los alumnos tienen dificultades para determinar principios o si piensa que añadiría una perspectiva útil, considere escribir los siguientes principios en la pizarra y hacer las preguntas que se encuentran a continuación.

Existen varios principios que podrías haber localizado en estos versículos. A continuación se brindan algunos ejemplos. Por cada principio de ejemplo, considera marcar frases o detalles que respalden dicho principio en los versículos que leíste.

A pesar de que Jesucristo nos ama, experimentaremos pruebas.

Incluso cuando estemos siguiendo fielmente a Jesucristo, experimentaremos pruebas.

Cuando enfrentamos desafíos, podemos buscar la ayuda del Señor, y Él responderá en Su propio tiempo y a Su manera.

Considera escribir estos principios en tu hoja de papel.

  • ¿De qué manera te ayuda el conocer estas verdades?

El Salvador viajó a la casa de Lázaro dos días después de que escuchó sobre su enfermedad. Cuando llegó, Lázaro llevaba cuatro días en la tumba (véase Juan 11:17, nota a al pie de página).

El élder Bruce R. McConkie (1915–1985), del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó el significado de que Lázaro hubiera estado muerto durante cuatro días.

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Head and shoulders portrait of Elder Bruce R. McConkie.

El proceso de descomposición estaba bien avanzado; hacía mucho que se había establecido el fallecimiento con absoluta certeza […]. Para los judíos, el plazo de cuatro días tenía un significado especial; entre ellos existía la creencia popular de que, para el cuarto día, el espíritu ya se había apartado de la cercanía del cuerpo de manera final e irrevocable.

(Bruce R. McConkie, Doctrinal New Testament Commentary, 3 tomos, 1965–1973, tomo I, pág. 533)

Continúa practicando cómo localizar principios a medida que lees Juan 11:18–46 . Como alternativa, podrías mirar “Lázaro es levantado de entre los muertos” desde el minuto 2:04 hasta el 7:43 mientras sigues el relato en tu ejemplar de las Escrituras. Pausa el video de vez en cuando y hazte preguntas cuando encuentres detalles importantes, como qué hacen María y Marta para demostrar su fe en Jesucristo o cómo responde el Salvador en cada situación. Agrega los principios que encuentres a tu documento y considera marcar los detalles importantes, además de hacer anotaciones en tu ejemplar de las Escrituras.

  • ¿Qué querría el Padre Celestial que aprendieras de esta historia?

¿Qué te enseña este relato sobre Jesucristo?

Invite a los alumnos a pasar al frente y escribir en la pizarra un principio que hayan reconocido. Puede que reconozcan verdades como las siguientes:

Si los alumnos necesitan ayuda para localizar verdades adicionales, considere hacerles algunas de las siguientes preguntas.

  • ¿Qué hicieron María y Marta para ejercer fe en Jesucristo durante su prueba?

  • ¿Qué aprendes sobre el Salvador de la respuesta que Él les dio a ellas?

  • ¿Qué elementos de este relato te enseñan a confiar más en el Salvador?

  • ¿De qué manera te ayudó en tu estudio el hacer una pausa al encontrar detalles importantes y hacer preguntas?

Considere colocar a los alumnos de a dos para que representen el siguiente caso hipotético.

Imagina que tienes la oportunidad de hablar con alguien que está atravesando una prueba difícil. Selecciona uno de los principios que identificaste de Juan 11:1–46 y comparte cómo ese principio podría ayudarlo. Incluye tus pensamientos sobre lo que este principio le puede ayudar a comprender a esta persona sobre el Padre Celestial y Jesucristo, y Sus deseos para nosotros.

Lee los principios que escribiste en el documento “Lo que debes saber al enfrentar desafíos”. En la parte inferior de la hoja añade tus respuestas a las siguientes preguntas.

  • ¿En qué principio necesitas centrarte más en tu vida en este momento? ¿Por qué?

  • ¿Qué aprendiste sobre el Padre Celestial y el Salvador que te ayude a sentir el amor de Ellos y hacia Ellos?

Considere invitar a varios alumnos a responder las preguntas anteriores. A medida que los alumnos comparten, busque formas de ayudarlos a sentir el amor del Salvador por ellos. Considere compartir sus pensamientos y su testimonio del Salvador.

  • ¿Qué te sientes inspirado a hacer según lo que aprendiste y sentiste hoy? ¿Cómo lo harás?

Anime a los alumnos a utilizar en su estudio personal de las Escrituras la técnica de estudio de reconocer principios y a seguir las impresiones que reciban. Considere testificar de la importancia de esta técnica de estudio. Una forma de hacerlo es compartir una experiencia personal sobre haber encontrado guía para enfrentar un desafío durante el estudio personal de las Escrituras.

Comentarios e información de contexto

¿Por qué sufro cuando intento ser recto?

El élder Matthew S. Holland, de los Setenta, enseñó:

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Matthew S. Holland Official Portrait.

… [H]ay Alguien que entiende a la perfección lo que están pasando, que es “más poderoso que toda la tierra” [1 Nefi 4:1] y que “es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que [ustedes] p[iden] o ent[ienden]” [Efesios 3:20]. El proceso tendrá lugar a Su manera y en Su tiempo, pero Cristo está siempre listo para sanar cada partícula y aspecto de nuestra agonía.

Al permitirle que Él lo haga, descubrirán que el sufrimiento de ustedes no fue en vano […]. Como ven, la naturaleza misma de Dios y el objetivo de nuestra existencia terrenal es la felicidad, pero no podemos llegar a ser seres perfectos de gozo divino sin las experiencias que nos prueban, a veces hasta lo más profundo de nuestro ser. Pablo dice que hasta el Salvador mismo fue hecho eternamente “perfec[to] [o completo] por aflicciones” [Hebreos 2:10]. Por ello, cuídense del susurro satánico de que, si fueran una mejor persona, se evitarían tales pruebas.

También deben resistirse a la mentira relacionada de que sus padecimientos sugieren que ustedes de algún modo se encuentran fuera del círculo de los elegidos de Dios, quienes parecen desplazarse de un estado bendecido a otro.

Hermanos y hermanas, sufrir en rectitud les ayuda a ser merecedores de estar entre los elegidos de Dios, en lugar de diferenciarlos de ellos.

(Matthew S. Holland, “La exquisita dádiva del Hijo”, Liahona, noviembre de 2020, págs. 46–47)

Actividades de aprendizaje complementarias

Enfoque alternativo de la lección

Considere utilizar la historia de María, Marta y Lázaro para ilustrar el principio de que podemos poner nuestra confianza en Dios, sabiendo que Sus milagros en nuestra vida vienen de acuerdo con Su tiempo y Su voluntad. Esto se puede hacer comparando y contrastando esa historia con la de Nefi en 3 Nefi 1:4–20 . Pueden mirar el video “Confiar en el Señor” (3:29) o leer la siguiente declaración del presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia.

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Matthew S. Holland Official Portrait.

El primer principio del Evangelio es fe en el Señor Jesucristo. Fe significa confiar: confiar en la voluntad de Dios, confiar en Su manera de hacer las cosas y confiar en Su horario, en vez de tratar de imponerle el nuestro. El élder Neal A. Maxwell, del Cuórum de los Doce Apóstoles, ha dicho:

“En lo referente a nosotros, la cuestión reside en confiar en Dios lo bastante como para confiar también en Su tiempo Si realmente pudiéramos creer que el Señor quiere lo mejor para nosotros, ¿acaso no le permitiríamos desplegar Sus planes como Él considerara mejor? Lo mismo sucede con la Segunda Venida y con todos esos asuntos en los que debemos hacer acopio de fe, no sólo en Sus planes y propósitos generales, sino en el tiempo del Señor para cada uno de nosotros en forma individual” (Even As I Am, 1982, pág. 93).

(Véase Dallin H. Oaks, “Todo tiene su tiempo…”, Liahona, octubre de 2003, pág. 12)

Comienzo alternativo para la lección

Considere invitar a los alumnos a localizar los milagros que Jesús realizó y las cosas sobre las que Él tiene poder, según lo que dichos milagros mostraron. Algunos ejemplos pueden incluir poder sobre la muerte (véase Lucas 7:11–18), poder sobre los problemas mentales (véase Lucas 8:27–35) y poder para ayudar con la vida diaria (véanse Mateo 17:24–27 ; Lucas 5:1–6).

Invite a los alumnos a considerar algo con lo que necesitan la ayuda del Salvador y a buscar principios que pueden ayudarlos a saber cómo recibir Su ayuda.