Presidencia de estaca
Procedimientos de respuesta ante emergencias (Pautas detalladas)


“Procedimientos de respuesta ante emergencias (Pautas detalladas)”, Respuesta ante emergencias, 2020

“Procedimientos de respuesta ante emergencias (Pautas detalladas)”, Respuesta ante emergencias

Procedimientos de respuesta ante emergencias (Pautas detalladas)

El propósito de las labores de socorro que lleva a cabo la Iglesia en casos de emergencia es aliviar el sufrimiento causado por los desastres; para ello brinda apoyo y proporciona recursos de soporte vital.

Los líderes del sacerdocio de Área y de estaca dirigen las labores de preparación y respuesta de la Iglesia ante emergencias. Ellos colaboran estrechamente con el gerente de Bienestar y Autosuficiencia de Área asignado. Se anima a los líderes a revisar el Manual General: Servir en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 2020, apartados 22.5.3, 22.6.11, y a seguir los pasos que se detallan a continuación.

1. Hacer acopio de recursos esenciales cuando no hay desastres activos

  • Las Áreas, los consejos de coordinación y las estacas pueden llamar como especialistas en respuesta ante emergencias a miembros que tengan habilidades para la comunicación de emergencia o la respuesta ante desastres. Esos especialistas con experiencia en comunicación de emergencia ayudarán a los líderes de la Iglesia a encontrar medios de comunicación disponibles después de un desastre.

  • Se deben cultivar relaciones con autoridades civiles y agencias locales (por ejemplo la Cruz Roja, los bancos de alimentos y otras organizaciones religiosas) con las que la Iglesia pueda coordinar la colaboración ciudadana después de un desastre. Los directores de comunicaciones de estaca pueden ayudar con esta labor.

  • Donde corresponda, se puede designar a algunos especialistas en respuesta ante emergencias de la Iglesia para que actúen como representantes de un grupo local de Organizaciones Voluntarias Activas en Desastres (VOAD, por sus siglas en inglés). Bajo la dirección de un Setenta de Área, los representantes de las VOAD ayudarán a coordinar las labores de preparación y respuesta ante emergencias de la Iglesia con las labores de la comunidad.

2. Organizar con antelación ante desastres inminentes

  • Antes de un desastre inminente del cual se tiene conocimiento, la Presidencia de Área o un Setenta de Área designado o presidente de estaca puede formar un comité para coordinar las labores de preparación y socorro. Los planes para la comunicación y la realización de las actividades de evaluación y respuesta deben coordinarse antes, durante y después del desastre. Los gerentes de Bienestar y Autosuficiencia (y, donde corresponda, los representantes de las VOAD) pueden formar parte de ese comité.

  • Los líderes de estaca deben revisar sus planes de emergencia de estaca y aconsejar a los miembros que se preparen y sigan las instrucciones de las autoridades civiles. Las estacas y los barrios, en particular aquellas unidades que se encuentran en áreas propensas a los desastres, podrían llevar a cabo una evaluación anual de preparación y hacer los ajustes necesarios a sus planes de emergencia.

3. Coordinar las labores de respuesta

Después de un desastre, la Presidencia de Área designa a un Setenta de Área o presidente de estaca para que dirija las labores de respuesta locales de la Iglesia (las cuales pueden incluir la formación de un comité de emergencia, como se ha descrito más arriba). Esto incluye la coordinación de las siguientes tareas:

Evaluación

  • Evaluar el estado de los misioneros y los miembros (fallecimientos, lesiones, necesidades psicosociales), de las propiedades de los miembros, de los edificios de la Iglesia y de la comunidad en general (prestando mayor atención a los miembros de la Iglesia con necesidades especiales, como aquellos que están confinados en el hogar o son ancianos, discapacitados o padres solteros).

  • Transmitir lo antes posible esta información al Setenta de Área, quien a su vez informará a la Presidencia de Área, al director de Asuntos Temporales y al gerente de Bienestar y Autosuficiencia.

Plan de respuesta

  • Comunicarse con los líderes de las unidades de la Iglesia damnificadas; con los Setentas de Área, cuyos consejos de coordinación pueden proporcionar ayuda de voluntarios; y con el gerente de Bienestar y Autosuficiencia para repasar las necesidades y elaborar una respuesta en colaboración con las autoridades civiles y las agencias de ayuda humanitaria. Esta respuesta podría incluir:

    • El uso de los edificios de la Iglesia como refugios temporales, estaciones de primeros auxilios o centros de operaciones.

    • La solicitud de fondos, suministros o servicios de atención psicosocial.

    • La organización de voluntarios que presenten ayuda a los miembros, los socorristas y la comunidad.

    • Los acuerdos con los representantes de la Iglesia ante las VOAD (donde corresponda) y con el personal de comunicaciones de la Iglesia para ayudar a coordinar las labores con la comunidad y las entidades gubernamentales.

Centro de operaciones

  • Escoger uno o más lugares accesibles que sirvan como centros de operaciones (en algunos lugares se denominan centros de mando) donde se puedan coordinar las labores de socorro y donde se reciban y distribuyan los suministros.

  • Si es necesario que los equipos de voluntarios de otras localidades se queden durante la noche, determinar los lugares donde podrían dormir o acampar. Eso también incluye aseos y duchas cerca de los centros de operaciones.

  • Organizar a los miembros para que lleven a cabo funciones clave en los centros de operaciones, entre otras:

    • Recibir, descargar, hacer un inventario y distribuir los suministros.

    • Dirigir y capacitar a los equipos de trabajo de voluntarios.

Solicitar fondos, suministros y servicios

  • Evaluar las necesidades y enviar solicitudes de fondos por medio del gerente de Bienestar y Autosuficiencia de Área.

    • Los obispos pueden brindar ayuda de las ofrendas de ayuno para cubrir las necesidades inmediatas.

    • Los fondos de respuesta ante emergencias de la Iglesia se pueden usar para ayudar tanto a los miembros de la Iglesia como a los de la comunidad que estén pasando necesidades tras un desastre.

  • Determinar el tipo y la cantidad de suministros que se requieren para responder a las necesidades de los miembros de la Iglesia y de la comunidad. Estos pueden incluir artículos de socorro para los supervivientes de un desastre, utensilios de limpieza y camisetas o chalecos de Manos que Ayudan para los voluntarios de la Iglesia. Además, se pueden incluir servicios de asistencia psicosocial para quienes pasen dificultades emocionales.

    • En los Estados Unidos y Canadá, los gerentes de Bienestar y Autosuficiencia de Área solicitan suministros del sistema de almacenes del obispo por medio del equipo de respuesta ante emergencias de las Oficinas Generales de la Iglesia.

    • Fuera de los Estados Unidos y Canadá, el gerente de Bienestar y Autosuficiencia de Área trabaja por medio del equipo de compras del Área.

    • El gerente de Bienestar y Autosuficiencia también puede hacer los arreglos para proporcionar asistencia psicosocial en caso de ser necesario.

  • En lugar de aceptar donaciones espontáneas de dinero en efectivo, tarjetas de regalo o materiales, anime a quienes desean donar a que contribuyan al Fondo de ayuda humanitaria de la Iglesia. (Todas esas donaciones se reciben en el fondo general y no se asignan a ningún un desastre concreto).

4. Supervisar las labores de los voluntarios de la Iglesia

En coordinación con las autoridades civiles, los Setentas de Área y los presidentes de estaca pueden reclutar voluntarios de las estacas y los barrios locales o adyacentes. Pueden ayudar con las labores de limpieza, reparación y otras necesidades de la comunidad.

Solicitudes de ayuda

  • A las familias afectadas se les informa de que pueden solicitar ayuda de voluntarios de la Iglesia para las tareas de reparación y limpieza. (Las notificaciones se pueden hacer por medio del gobierno local o las agencias de ayuda humanitaria, las redes sociales, volantes u otros medios).

  • A medida que se reciben las solicitudes, el personal del centro de operaciones debe crear un registro de solicitudes (también conocido como órdenes de trabajo), ubicar en un mapa cada localidad, asignar un equipo de voluntarios y asegurarse de que las solicitudes se completen. Generalmente se da prioridad a las necesidades de los miembros de la Iglesia y de los socorristas.

  • En algunas partes del mundo, los gerentes de Bienestar y Autosuficiencia de Área tienen acceso al software y a las herramientas en línea que les permiten organizar a los voluntarios y las solicitudes.

Equipos de voluntarios

  • Antes de comenzar un proyecto, los líderes de equipo deben asegurarse de que los dueños de la propiedad hayan dado su pleno consentimiento para que los voluntarios de la Iglesia trabajen en dicha propiedad.

  • Los líderes de equipo reciben capacitación sobre seguridad y proporcionan instrucciones de seguridad a los miembros del equipo.

  • Los coordinadores de voluntarios llevan un registro del número de horas de trabajo voluntario que se ha prestado y dan parte a los líderes eclesiásticos a cargo y al gerente de Bienestar y Autosuficiencia de Área.

  • Bajo la dirección del líder eclesiástico que supervisa las labores de ayuda, los voluntarios se organizan en equipos pequeños, con un voluntario designado como líder de equipo.

  • Los equipos disponen de herramientas, equipos de protección (guantes, gafas de protección, protector solar, etc.) y camisetas o chalecos de Manos que Ayudan.

  • A los voluntarios se les pide que lleven su propia comida, tiendas de campaña, ropa de cama, combustible, etc.

  • No es apropiado que los voluntarios hagan proselitismo.

5. Informar sobre las labores de ayuda de la Iglesia

  • Los presidentes de estaca informarán regularmente de la situación al Setenta de Área, quien compartirá dicha información con la Presidencia de Área y con el gerente de Bienestar y Autosuficiencia de Área.

  • Bajo la dirección del Setenta de Área o del presidente de estaca que supervisa las labores de socorro, los directores de comunicaciones de la Iglesia y otros líderes pueden proporcionar a los medios de comunicación la información relacionada con dichas labores por parte de la Iglesia.