“Alma 24: ‘Las enterraremos en lo profundo de la tierra’”, El Libro de Mormón, Manual del alumno, 2024
“Alma 24”, El Libro de Mormón, Manual del alumno
Alma 24
“Las enterraremos en lo profundo de la tierra”
A veces nos encontramos cometiendo el mismo pecado y desarrollando un mal hábito o incluso una adicción. Vencer estos pecados puede ser muy difícil. Muchos de los anti-nefi-lehitas habían desarrollado prácticas pecaminosas antes de su conversión al Señor; cuando experimentaron el perdón del Salvador, fueron inspirados a evitar cometer de nuevo esos pecados. Esta lección puede ayudarte a vencer el pecado y los malos hábitos con la ayuda del Salvador.
Vencer el pecado con la ayuda del Salvador
Lee la siguiente situación hipotética:
Samantha lleva años luchando contra un pecado en particular. A medida que se ha ido convirtiendo más al Señor, se ha esforzado mucho por arrepentirse y acudir al Salvador en busca de fortaleza para superar su problema. Sintió el perdón y el amor del Señor; sin embargo, en momentos de debilidad, a veces vuelve a caer en ese pecado.
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¿Cómo se sentiría Samantha en esta situación?
Medita sobre cuán bien sientes que podrías ayudar a Samantha y lo que aún necesitas saber y comprender para ayudarla mejor. Piensa también en los problemas que crees que el Señor podría ayudarte a superar. A medida que estudies, busca verdades que, al ponerlas en práctica, puedan invitar al Salvador a ayudar a Samantha y a ti a vencer el pecado.
El pueblo de Anti-Nefi-Lehi
Las personas del pueblo de Anti-Nefi-Lehi eran lamanitas que previamente habían utilizado sus espadas para matar a otras personas. Sin embargo, después de que “fueron convertidos al Señor”, “abandonaron las armas de su rebelión” (Alma 23:6–7).
Lee Alma 24:1–4 para ver la forma en que reaccionaron algunos de los demás lamanitas.
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Si tú fueras uno de los anti-nefi-lehitas, ¿qué habrías pensado y sentido en ese momento? ¿Por qué?
Ammón y sus hermanos se reunieron con el rey Lamoni y su hermano, el rey del pueblo llamado Anti-Nefi-Lehi (véase Alma 24:5). Luego, el rey se dirigió a su pueblo.
Lee el discurso del rey que se encuentra en Alma 24:7–16. Busca y considera marcar palabras o frases que describan lo siguiente:
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Lo que Dios había hecho por estas personas.
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Lo que el pueblo había hecho para arrepentirse.
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Lo que el rey les aconsejó que hicieran para abandonar sus pecados.
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¿Qué habrías pensado y sentido si estuvieras allí escuchando ese discurso? ¿Por qué?
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¿Qué palabras o frases te habrían motivado a esforzarte por no volver a cometer tus pecados?
Enterrar sus armas de guerra
Lee Alma 24:17–19 y marca la reacción del pueblo después de este discurso y el motivo de esa reacción.
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¿De qué manera crees que la experiencia de los anti-nefi-lehitas podría relacionarse con nosotros?
Una verdad que podemos reconocer en este relato es la siguiente: Nuestro amor por Jesucristo y nuestro compromiso con Él pueden ayudarnos a abandonar nuestros pecados.
Dedica un momento a meditar sobre el motivo por el cual este principio es verdadero.
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Responde las cuatro preguntas siguientes:
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Al buscar abandonar el pecado, ¿por qué podría resultar útil recordar el amor del Padre Celestial y de Jesucristo y lo que Ellos han hecho por nosotros? (Podría resultar útil meditar sobre frases como las siguientes: “nos ha perdonado” [Alma 24:10], “el gran Dios ha tenido misericordia de nosotros” [Alma 24:14] y “él ama nuestras almas” [Alma 24:14]).
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¿De qué manera el enterrar sus espadas “profundamente en la tierra” (Alma 24:17) ayudó a estas personas a abandonar sus pecados?
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Fíjate en las siguientes frases del versículo 18 (cursiva agregada):
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“[A]ntes que derramar la sangre de sus hermanos, ellos darían sus propias vidas”.
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“[A]ntes que privar a un hermano, ellos le darían”.
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“[A]ntes que pasar sus días en la ociosidad, trabajarían asiduamente con sus manos”.
Básicamente, los anti-nefi-lehitas no solo enterraron sus armas de guerra, sino que también reemplazaron sus pecados anteriores por acciones positivas.
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¿De qué manera el hacer esto nos ayuda a abandonar el pecado?
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¿Cuáles son algunas de las maneras en que podemos hacer esto en la actualidad?
Para ver un ejemplo, mira el video “El poder del Libro de Mormón en la conversión”, desde 6:11 hasta 8:12, que se encuentra disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.
El compromiso del pueblo de Anti-Nefi-Lehi
Lee Alma 24:20–27 para ver cómo los anti-nefi-lehitas vivieron su compromiso de abandonar el pecado. Mientras lees, imagínate allí y medita sobre las imágenes, los sonidos y los sentimientos que podrías haber experimentado al postrarte en oración, sabiendo que no tenías nada con qué defenderte y que estabas completamente en las manos del Señor.
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¿Qué te impresiona sobre su compromiso?
El élder Dale G. Renlund, del Cuórum de los Doce Apóstoles, describió la forma en que los sacrificios de los anti-nefi-lehitas se pueden relacionar con nosotros en la actualidad.
[E]ntierren por completo las armas de su rebelión sin que las empuñaduras queden al descubierto. Debido a la expiación de Jesucristo, el hacer convenios con la verdadera intención de honrarlos de manera fiable bendecirá su vida para siempre. Se volverán más semejantes al Salvador a medida que lo recuerden, lo sigan y lo adoren siempre. Testifico que Él es el cimiento firme. Podemos confiar en Él, y Sus promesas se cumplirán (Dale G. Renlund, “Un compromiso inquebrantable con Jesucristo”, Liahona, noviembre de 2019, pág. 25).
Cómo abandonar el pecado
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Haz lo siguiente:
Recuerda la situación hipotética de Samantha que se encuentra al comienzo de la lección. Explica de qué forma le recomendarías que ponga en práctica los principios que estudiaste hoy. Incluye lo siguiente:
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maneras en que puede recordar el amor del Señor por ella;
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acciones concretas que puede realizar para evitar volver a caer en sus pecados anteriores.
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Abandonar tus pecados
En tu diario de estudio, escribe cómo podrías poner en práctica en tu vida lo que aprendiste hoy. Escribe los pasos que puedes dar para recordar el amor del Señor. Incluye pasos prácticos para abandonar el pecado y protegerte a fin de no volver a cometerlos.
Al esforzarte por seguir tu plan, confía en que el Salvador te ama y te ayudará a medida que te esfuerces por evitar las circunstancias que puedan conducirte al pecado.