Voces de los jóvenes
Él no nos olvida
Edson S., 16 años, Georgia, EE. UU.
Le gustan las bandas de marcha, practicar deportes de cualquier tipo y pasar tiempo con su familia.
Mi primer año en la escuela secundaria fue muy difícil; estudiaba en línea debido al COVID-19. Durante ese año, mi papá se contagió de COVID y falleció. Tuve que lidiar con esa pérdida todo el año. Exactamente un año después, falleció mi abuelo y durante mi tercer año de secundaria, mi abuela falleció mientras estaba con ella en la habitación.
Siempre tenía una sensación de vacío debido a esas cosas que sucedieron en mi vida. Sentía que tal vez estaba haciendo algo mal o que estaba pagando por mis errores, o algo así. Durante esa época, tampoco estaba guardando los mandamientos ni dejaba que la luz de Cristo brillara a través de mí.
Un día, mientras leía la letra del himno “Asombro me da” (Himnos, nro. 118), me conmovió la frase: “Pagó mi rescate; no lo podré olvidar”. Cuando leí eso, sentí que mi vacío se llenaba. Las palabras “no lo podré olvidar” me hicieron detenerme y pensar. Con todas las cosas que había estado sufriendo y pasando durante toda mi vida, quise olvidar. Quise encontrar un camino más fácil, divertirme y hacer cosas que no eran correctas, todo ello sin acudir a Jesucristo.
Aunque me encontraba en un lugar oscuro y trataba de desviarme, Jesucristo no me permitió olvidar Su misericordia y amor. Él no me olvidó cuando yo estuve triste, así que, si Él no me olvidó, yo tampoco debería olvidarlo.
Creo que incluso si estás en un lugar oscuro y crees que Dios no te va a dar una segunda oportunidad, Él lo hará. Él te ama y se preocupa por ti.