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¿Cómo puedo servir a los demás?


¿Cómo puedo servir a los demás?

Jesucristo dio el ejemplo perfecto de cómo amar y servir a los demás. Como poseedores del sacerdocio, tenemos el deber de servir a los demás. Podemos servir a los demás como lo hizo el Salvador en muchos sentidos, incluso al administrar las ordenanzas del sacerdocio, al compartir el Evangelio con los demás o al llevar a cabo actos sencillos y diarios de bondad.

Prepararse espiritualmente

Piense en experiencias que haya tenido al servir a los demás. ¿Cuáles fueron los resultados de su servicio? ¿Qué experiencias podría compartir que ayudarían a los jóvenes a sentir la importancia del servicio?

¿Cuándo ha visto a los jóvenes servir a los demás? ¿Qué experiencias pueden compartir los jóvenes los unos con los otros? ¿Por qué es importante aprender a prestar servicio semejante al de Cristo?

Al estudiar las Escrituras y otros recursos sobre el servicio, busque aquello que inspire a los jóvenes a prestar servicio semejante al de Cristo.

Mateo 25:31–46; Mosíah 2:17 (Cuando servimos a los demás, también servimos a Dios)

Juan 13:34–35 (Debemos amar a los demás como el Salvador nos ama a nosotros)

Santiago 1:27 (La religión pura es visitar a los huérfanos y a las viudas)

1 Nefi 2:16–18; 3:1–7, 28–31; 4:1–2; 17:7–19, 50–51; 18:1–4 (La actitud de Nefi y Lamán y Lemuel en respuesta a sus asignaciones)

Mosíah 18:8–10 (Debemos estar dispuestos a consolar a los que necesitan de consuelo)

Cumplir con Mi Deber a Dios , 2010, págs. 26, 50, 74.

Henry B. Eyring, “Vendar sus heridas”, Liahona, noviembre de 2013, págs. 58–61.

El servicio”, Para la Fortaleza de la Juventud, 2011, págs. 32–34.

Videos: “Al rescate de los necesitados”, “Las piernas de Dayton”, “Si nos olvidamos de nosotros mismos”, “Cuando os halláis al servicio--HH JJ”

Enseñar a la manera del Salvador

Durante Su ministerio terrenal, Jesucristo dedicó Su tiempo a servir y ayudar a los que le rodeaban. Los verdaderos discípulos de Cristo hacen lo mismo. El Salvador dijo: “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tenéis amor los unos por los otros” (Juan 13:35). Al enseñar a los jóvenes, busque oportunidades de invitarlos a compartir cómo han prestado servicio a los demás y lo que les inspiró a prestar servicio.

Permita que los jóvenes dirijan

Un miembro de la presidencia del cuórum (o un ayudante del obispo en el cuórum de presbíteros) dirige la reunión. Él dirige a los demás jóvenes para que deliberen en consejo en cuanto a los asuntos del cuórum, les enseña sus deberes del sacerdocio (usando las Escrituras y el librito Mi Deber a Dios ), los alienta a compartir las experiencias que han tenido al cumplir con su deber a Dios e invita al asesor o a otro miembro del cuórum a enseñar una lección del Evangelio. Puede prepararse llenando una Agenda de la reunión de cuórum durante una reunión de presidencia.

Comience la experiencia de aprendizaje

Elija alguna de las ideas siguientes, o utilice las suyas, para repasar la lección de la semana anterior y presentar la de esta semana:

  • Escriba el título de la lección de la semana pasada en la pizarra y permita que cada joven escriba rápidamente algo que aprendió o aplicó de la lección.

  • Invite a los jóvenes a compartir experiencias que hayan tenido recientemente al servir a los demás (si es posible, haga que compartan un proyecto de servicio de cuórum o individual que completaron de su Deber a Dios). ¿Qué efecto tuvo en ellos este servicio? ¿Y en otras personas?

  • Pida a los jóvenes que compartan experiencias que conozcan de personas que han sido rescatadas físicamente en un momento difícil. Por lo general, ¿qué siente la gente por la persona que les ayudó? Vean el video “Al rescate de los necesitados” e invite a los jóvenes a analizar lo que aprendan del discurso del presidente Monson respecto a servir al prójimo como lo hizo el Salvador.

Aprender juntos

El propósito de esta lección es ayudar a los jóvenes a comprender el modo de cumplir con sus deber del sacerdocio de prestar servicio a los demás. Como parte de esta lección, los miembros del cuórum deben hacer planes en el librito Mi Deber a Dios con el fin de cumplir con esos deberes. Antes de la reunión del cuórum, invite a los jóvenes a llevar sus libritos de Mi Deber a Dios a la Iglesia. En futuras reuniones de cuórum, invítelos a compartir experiencias que hayan tenido al cumplir con sus planes.

  • Divida las siguientes Escrituras entre los jóvenes: Mateo 25:31–46; Juan 13:34–35; Mosíah 2:17; Santiago 1:27; y Mosíah 18:8–10. Pídales que busquen y escriban lo que aprendan en estos versículos acerca de servir a los demás (véase Mi Deber a Dios , pág. 26). Después de que hayan compartido lo que encontraron en los versículos, invítelos a compartir experiencias personales de cómo han sido bendecidos mediante el servicio de los demás.

  • Invite a los miembros del cuórum a leer los siguientes pasajes de las Escrituras y comparar la actitud de Nefi con la de Lamán y Lemuel ante las asignaciones que recibieron: 1 Nefi 2:16–18; 3:1–7, 28–31; 4:1–2; 17:7–19, 50–51; 18:1–4 (considere pedirles que escriban sus respuestas en la pizarra). Pídales que piensen qué actitud tuvieron la última vez que se les dio la oportunidad de prestar servicio a otras personas. Invite a los jóvenes a escribir, en el espacio provisto en la página 50 del librito Mi Deber a Dios , varias frases del estudio que hicieron que representen la actitud que debemos tener al cumplir con las asignaciones del sacerdocio.

  • Muestre uno o varios de los videos que se sugieren en esta reseña y pida a los jóvenes que busquen las bendiciones que se reciben al ayudar a los demás, incluso a los miembros del cuórum. Pida a los miembros del cuórum que busquen en sus libritos de Mi Deber a Dios  y que determinen las maneras en que pueden servir a los demás como poseedores del Sacerdocio Aarónico (véanse las páginas 23 [diáconos], 47 [maestros] y 71 [presbíteros]). Pida a los jóvenes que reflexionen sobre las maneras en que pueden reforzar su cuórum por medio del servicio.

  • Muestre una lámina de cuando Henry B. Eyring era un muchacho. Lean acerca de las experiencias de cuando el presidente Eyring era un presbítero y visitaba a los miembros en compañía de su obispo. ¿Qué aprenden los jóvenes en cuanto al servicio al prójimo gracias a las experiencias del presidente Eyring? ¿Qué experiencias personales pueden compartir de ellos mismos?

Después de que los jóvenes hayan completado una o más de las actividades anteriores, haga lo siguiente:

  • Invite a los miembros del cuórum a ir a la sección “Servir a otros” en sus libritos de Mi Deber a Dios (págs. 26–27 [diáconos], 50–51 [maestros] o 74–75 [presbíteros]). Invite a cada miembro del cuórum a escribir un plan personal de prestar servicio. Por ejemplo, ese plan podría seguir el consejo del élder M. Russell Ballard de orar a diario pidiendo oportunidades para servir a los demás (véase “Estar anhelosamente consagrados”, Liahona, noviembre de 2012, págs. 29–31). Después invite al presidente del cuórum a dirigir un análisis sobre qué podría hacer el cuórum para prestar servicio a otras personas y pida a los jóvenes que escriban el plan en sus libritos.

Planes de Mi Deber a Dios

Aparte un tiempo al final de la reunión del cuórum para que los jóvenes hagan planes en sus libritos de Mi Deber a Dios. Los planes son personales, pero los miembros del cuórum pueden ayudarse mutuamente a generar ideas para ellos.

Invítelos a actuar

El joven que dirige concluye la reunión. Él podría:

  • Compartir su plan para servir a alguien e invitar a los jóvenes a cumplir con sus planes.

  • Explique que se invitará a los miembros del cuórum a compartir experiencias que tengan de servir a los demás durante las próximas semanas.