Ayudas para las Escrituras
Moisés 1; Abraham 3


“Moisés 1; Abraham 3”, Ayudas para las Escrituras: Antiguo Testamento, 2025

Ayudas para las Escrituras

Moisés 1; Abraham 3

Moisés conversó cara a cara con Jesucristo, quien hablaba en nombre del Padre Celestial. Moisés aprendió sobre su identidad como hijo de Dios y que Dios tenía una obra para que él hiciera. Entonces Moisés se encontró con Satanás y pudo vencerlo en el nombre del Hijo Unigénito. En otra visión, el Señor mostró a Moisés incontables mundos y le enseñó que Su obra y gloria era salvar y exaltar a Sus hijos. El profeta Abraham también habló con el Señor cara a cara. Aprendió sobre la naturaleza y el orden del cosmos, y sobre la función central de Jesucristo en el Plan de Salvación. El Señor le mostró el concilio de los cielos que tuvo lugar antes de la creación del mundo y cómo el Padre Celestial seleccionó a Jesucristo para que fuera el Salvador del mundo.

Recursos

Nota: La cita de una fuente no publicada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no implica que dicha cita ni su autor cuenten con el respaldo de la Iglesia ni que representen la posición oficial de esta.

Antecedentes y contexto

Moisés 1

¿Qué es el libro de Moisés?

Poco después de la publicación del Libro de Mormón en 1830, el profeta José Smith comenzó una traducción, o revisión, inspirada de la versión del rey Santiago de la Biblia (en inglés). En la actualidad, esta traducción inspirada, en la que el profeta trabajó hasta su muerte, se conoce como la Traducción de José Smith. El libro de Moisés es parte de la traducción de la Biblia que hizo José Smith. (Para obtener más información sobre la Traducción de José Smith, véase “¿Qué es la Traducción de José Smith?” en la introducción de Ayudas para las Escrituras: Antiguo Testamento).

Moisés 1 es particularmente excepcional porque es un material completamente único, sin homólogo en la Biblia. Las sagradas experiencias de Moisés registradas en Moisés 1 sirven de prefacio al relato de la Creación. Además, Moisés 2–8 proporciona información que no se encuentra en los escritos correspondientes de Génesis. Entre esas valiosas contribuciones están:

  • La importancia de la caída de Adán y Eva, y explicaciones claras de los efectos que esta tiene sobre el género humano.

  • Las acciones de Lucifer antes de que fuera expulsado de los cielos.

  • La importancia de la Expiación de Jesucristo.

  • Evidencias de que Adán y Eva, y sus descendientes, disfrutaban de las bendiciones del Evangelio de Jesucristo.

  • El establecimiento de Sion durante la época de Enoc y las visiones que este tuvo del Señor.

  • Algunos detalles sobre las condiciones de la tierra antes del Diluvio, así como la labor de Noé para enseñar el Evangelio de Jesucristo y exhortar al pueblo al arrepentimiento.

Moisés 1:2–8

¿Quién hablaba a Moisés?

En Moisés 1, él habla con el Jesucristo preterrenal, que es Jehová, el Dios del Antiguo Testamento. Dado que es uno con el Padre Celestial, Jesucristo a veces habla como si Él fuera Dios el Padre. Esto se conoce como la investidura divina de autoridad, por medio de la cual Cristo queda investido de la autoridad para hablar por el Padre y de parte del Padre.

El presidente Dallin H. Oaks enseñó: “Nuestro Padre Celestial hablaba directamente con Adán y Eva antes de la Caída. A partir de ese momento, el Padre presentó a Su Hijo Unigénito, Jesucristo, como nuestro Salvador y Redentor, y nos dio este mandato: ‘¡Escúchalo!’. De esta indicación, llegamos a la conclusión de que los anales de las Escrituras con las palabras pronunciadas por ‘Dios’ o el ‘Señor’ son casi siempre las palabras de Jehová, nuestro Señor resucitado, Jesucristo”.

Moisés 1:6

¿Qué significa que “todas las cosas están presentes” para Dios?

Como mortales, tenemos una visión limitada del pasado y del presente, y solo podemos adivinar lo que sucederá en el futuro. Esto no es así para Dios. Él conoce “el fin desde el principio”.

La omnisciencia de Dios —Su conocimiento de todas las cosas— hace posible el Plan de Salvación. El profeta José Smith enseñó: “El gran Jehová contempló todos los acontecimientos relacionados con la tierra, en lo que al Plan de Salvación concierne, antes que esta llegara a existir […]; lo pasado, lo presente y lo futuro fueron y son, para Él, un eterno ‘hoy’ […]; [Él] comprendía la caída del hombre y su redención; conocía el Plan de Salvación y lo manifestó; estaba al tanto de la situación de todas las naciones y de su destino. Él ordenó todas las cosas de acuerdo con el designio de Su propia voluntad; Él conoce la situación tanto de los vivos como de los muertos y ha proporcionado todo lo necesario para su redención, según sus respectivas circunstancias y las leyes del Reino de Dios, sea en este mundo o en el mundo venidero”.

Moisés 1:8–10

¿Por qué dijo Moisés que “el hombre no es nada”?

Como miembro de la casa de Faraón, Moisés “fue instruido […] en toda la sabiduría de los egipcios, y era poderoso en sus palabras y hechos”. Sin embargo, después de tener una visión del poder y la gloria de Dios, reconoció humildemente que, en comparación, “el hombre no es nada”.

Aunque Moisés se sentía insignificante en comparación con Dios, la verdad es que todas las personas tienen un valor infinito. El presidente Dieter F. Uchtdorf, entonces miembro de la Primera Presidencia, enseñó: “Esta es la paradoja del hombre: comparado con Dios, el hombre no es nada; no obstante, somos todo para Dios. Mientras que al compararnos con la creación infinita podríamos aparentar que no somos nada, tenemos una chispa de fuego eterno que arde dentro de nuestro pecho. A nuestro alcance tenemos la incomprensible promesa de la exaltación, de mundos sin fin; y el gran deseo de Dios es ayudarnos a lograrla”.

Moisés 1:11, 14

¿Qué significa ser transfigurado?

La transfiguración es “el estado de las personas cuya apariencia y naturaleza cambian temporariamente —o sea, que son elevadas a un nivel espiritual más alto— a fin de que puedan soportar la presencia y la gloria de seres celestiales”.

Moisés 1:35–37

¿Qué significa que Jesucristo creó “incontables mundos”?

El élder Neal A. Maxwell enseñó: “Muchísimo antes de que naciera en Belén y se le llegase a conocer como Jesús de Nazaret, nuestro Salvador era Jehová. Ya entonces, bajo la dirección del Padre, Cristo era el Señor del universo, que creó incontables mundos, de los cuales el nuestro es solo uno (véanse Efesios 3:9; Hebreos 1:2). ¿Cuántos planetas con habitantes hay en el universo? No sabemos, ¡pero no estamos solos en el universo! ¡Dios no es el Dios de un solo planeta!”.

galaxia espiral

Moisés 1:39

¿Qué diferencia hay entre la inmortalidad y la vida eterna?

“La vida eterna es una frase que se utiliza en las Escrituras para definir la clase de vida que tiene nuestro Padre Eterno. El Señor declaró: ‘Esta es mi obra y mi gloria: Llevar a cabo la inmortalidad y la vida eterna del hombre’ [Moisés 1:39]. La inmortalidad es vivir para siempre como un ser resucitado. Mediante la Expiación de Jesucristo, todos recibirán ese don. La vida eterna, o sea, la exaltación, implica vivir en la presencia de Dios y seguir viviendo como familias. Al igual que la inmortalidad, ese don se hace posible mediante la Expiación de Jesucristo; no obstante, para que heredemos la vida eterna se requiere nuestra ‘obediencia a las leyes y ordenanzas del Evangelio’ [Artículos de Fe 1:3]”.

Abraham 3

¿Qué es el libro de Abraham?

El Libro de Abraham es una “traducción inspirada de los escritos de Abraham” realizada por José Smith. Contiene detalles únicos sobre la vida y el ministerio de Abraham. También ofrece perspectivas significativas acerca de temas doctrinales importantes, como el convenio abrahámico, la preordenación, el concilio de los cielos y la planificación y creación de la Tierra.

En 1835, un hombre llamado Michael Chandler llevó cuatro momias egipcias y varios rollos de papiro de antiguos escritos egipcios a Kirtland, Ohio (EE. UU.). Un grupo de miembros de la Iglesia compró las momias y los rollos de papiro. Tiempo después, José Smith tradujo alguno de los escritos y los publicó como el “Libro de Abraham” en una publicación de la Iglesia llamada Times and Seasons a comienzos de marzo de 1842.

Fragmento de papiro que muestra parte de “Facsímile del Libro de Abraham, nro. 1”.

Fragmento de papiro que muestra parte de “Facsímile del Libro de Abraham, nro. 1”.

En la actualidad solo se sabe de la existencia de pequeños fragmentos de los largos rollos de papiro que pertenecieron a José Smith. Los rollos originales se vendieron después de la muerte del Profeta y muchas partes se perdieron. La caligrafía de los fragmentos que han perdurado no parece ser de la parte de los rollos que coincide con la traducción que aparece en el libro de Abraham. Es posible que José tradujera el libro de Abraham a partir de porciones del papiro que ahora están perdidas. Otra posibilidad es que el estudio del papiro por parte del Profeta sirviera de catalizador que llevó a una revelación sobre Abraham, similar a como José recibió revelación sobre la vida de Moisés mientras estudiaba la Biblia. En cualquier caso, está claro que José Smith no tradujo el libro de Abraham utilizando medios convencionales. No sabía egipcio ni tenía las herramientas necesarias para entenderlo sin la ayuda del Señor. Al igual que su traducción anterior del Libro de Mormón, el profeta José Smith tradujo el libro de Abraham mediante la revelación de Dios.

El Libro de Abraham incluye detalles que no se encuentran en la Biblia, pero que concuerdan con otros textos antiguos. Sin embargo, la evidencia más grande de la veracidad del libro de Abraham no se basa en pruebas físicas ni históricas, sino en la consideración de su contenido y de su influencia por medio de la oración. Al igual que con todas las demás Escrituras, el testimonio de la veracidad de esos escritos es fundamentalmente una cuestión de fe.

Abraham 3:1

¿Qué es el Urim y Tumim?

Urim y Tumim provienen de palabras hebreas que significan “luces” y “perfecciones”. El nombre Urim y Tumim se le dio a un instrumento que el Señor preparó para ayudar a las personas a obtener revelación y traducir idiomas.

Las Escrituras revelan que hubo más de un instrumento de este tipo. En el Antiguo Testamento consta que los sumos sacerdotes israelitas usaban un Urim y Tumim para recibir revelación. En el Nuevo Mundo, los profetas del Libro de Mormón utilizaron un par de piedras que llamaron “intérpretes”. El profeta José Smith recibió los intérpretes que previamente habían pertenecido al hermano de Jared. El Profeta las describió como “dos piedras, en aros de plata, las cuales, aseguradas a un pectoral, formaban lo que se llamaba el Urim y Tumim”.

Abraham 3:2–21

¿Por qué le mostró el Señor a Abraham el orden, los movimientos y los tiempos de las estrellas y los planetas?

La visión que tuvo Abraham de las estrellas y los planetas ocurrió mientras se dirigía a Egipto. Los antiguos egipcios conocían bien el movimiento de los planetas y las estrellas, y tenían creencias religiosas relacionadas con ellos. Durante la visión de Abraham, el Señor le indicó que enseñara a los egipcios las verdades que había aprendido. Es posible que el Señor le enseñara a Abraham sobre el cosmos a fin de que pudiera compartir el Evangelio con los egipcios de una manera que tuviera sentido para ellos.

Kólob se representa como la estrella o el planeta más cercano a donde vive Dios

Una de esas estrellas, conocida por el Padre Celestial como Kólob, puede ser un símbolo de Jesucristo. Kólob es la gran estrella, que está “más próxima al trono de Dios”, “la mayor”, “la primera creación” y fue “puest[a] para regir a todas las que pertenecen al mismo orden”. Abraham aprendió que no es el tamaño lo que hace que una estrella o un planeta sea más grande que otro, sino su proximidad a Kólob. Lo mismo sucede con los hijos de Dios: su grandeza y gloria dependerán de su proximidad a Dios.

Abraham 3:21–23

¿Qué son las “inteligencias”?

El término inteligencias se puede utilizar para describir a los hijos de Dios procreados en espíritu. También puede describir “el elemento espiritual que existía antes de que fuéramos [procreados] como hijos espirituales”. El élder D. Todd Christofferson enseñó: “Los profetas han revelado que primero existimos como inteligencias y que Dios nos dio forma, o cuerpos en espíritu, llegando así a ser Sus hijos procreados en espíritu: hijos e hijas de padres celestiales”.

Abraham 3:22–25

¿Qué significa ser “escogido” o preordenado?

Abraham aprendió que fue uno de los numerosos espíritus nobles y grandes durante la vida preterrenal. Dios dijo que haría de esos espíritus Sus “gobernantes”. En su visión del mundo de los espíritus, el presidente Joseph F. Smith describió a espíritus nobles y grandes “que fueron escogidos en el principio para ser gobernantes en la Iglesia de Dios”. Acerca de estos espíritus, la visión de Joseph F. Smith reveló lo siguiente: “Aun antes de nacer, ellos, con muchos otros, recibieron sus primeras lecciones en el mundo de los espíritus, y fueron preparados para venir en el debido tiempo del Señor a obrar en su viña en bien de la salvación de las almas de los hombres”.

Se llama preordenación al nombramiento de Dios de ciertos espíritus para cumplir misiones específicas en la tierra.

“La preordenación no garantiza que las personas reciban ciertos llamamientos o responsabilidades; dichas oportunidades vienen en esta vida como resultado del ejercicio justo del albedrío, tal y como la preordenación fue el resultado de la rectitud en la existencia premortal […].

“La doctrina de la preordenación se aplica a todos los miembros de la Iglesia, no solo al Salvador y a Sus profetas. Antes de la creación de la tierra, a las mujeres fieles se les dieron ciertas responsabilidades y los varones fieles fueron preordenados a ciertos deberes del sacerdocio. Si las personas dan prueba de su dignidad, tendrán oportunidades de desempeñar las asignaciones que reciban”.

Abraham 3:26–28

¿Qué es un estado y cómo se conserva?

El término “primer estado” hace referencia a nuestra vida preterrenal. Guardamos ese primer estado cuando aceptamos el Plan de Salvación del Padre Celestial y elegimos seguir a Jesucristo. Debido a que guardamos el primer estado, se nos dio la oportunidad de venir a la tierra y recibir un cuerpo físico.

La existencia terrenal se conoce como el “segundo estado”. Guardamos el segundo estado cuando elegimos seguir a Jesucristo y recibimos las ordenanzas de Su Evangelio. Quienes guardan su segundo estado recibirán la vida eterna y “les será aumentada gloria sobre su cabeza para siempre jamás”. A los que no tienen la oportunidad de aceptar y vivir el Evangelio en la vida terrenal se les da esa oportunidad en el mundo de los espíritus después de morir.

Más información

Vencer la oposición de Satanás

  • Jeffrey R. Holland, “No perdáis, pues, vuestra confianza”, Liahona, junio de 2000, págs. 34–42.

La obra y la gloria de Dios

El libro de Abraham

  • Andrew C. Skinner, “The Book of Abraham: A Most Remarkable Gift for Our Time” (artículo solo en formato digital), Liahona, enero de 2022, Biblioteca del Evangelio.

  • Temas y preguntas, “Abraham, Libro de”, Biblioteca del Evangelio.

  • Ensayos sobre Temas del Evangelio, “Traducción e historicidad del libro de Abraham”, Biblioteca del Evangelio.

Multimedia

Video

“Soy un hijo de Dios” (6:30)

6:38

Imágenes

José y Sidney trabajan juntos en la revisión del Nuevo Testamento

Joseph and Sidney [José y Sidney], por Annie Henrie Nader

Moisés habla con Jehová cara a cara

Moses Seeing Jehovah [Moisés ve a Jehová], por Joseph Brickey

Moisés expulsa a Satanás en el nombre del Unigénito

Moses Overcomes Satan [Moisés vence a Satanás], por Joseph Brickey