Doctrina y Convenios 2021
Cómo utilizar Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes


“Cómo utilizar Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes”, Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2021 (2020)

“Cómo utilizar Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes”, Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2021

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Mujeres jóvenes durante una clase

Cómo utilizar Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes

¿Cuáles son los propósitos de las reuniones de cuórum y de clase?

El Señor les ha dado un deber sagrado: Les ha llamado a servir en una presidencia de cuórum del Sacerdocio Aarónico o en una presidencia de clase de las Mujeres Jóvenes. Parte de su responsabilidad es dirigir las reuniones de cuórum o de clase los domingos; para ello, es útil entender por qué tenemos estas reuniones.

Las reuniones de cuórum del Sacerdocio Aarónico o de clase de las Mujeres Jóvenes son diferentes de las clases de la Iglesia como la Escuela Dominical o Seminario. En las reuniones de cuórum o de clase, hacemos más que estudiar un tema del Evangelio. Aprendemos sobre la obra que Dios nos ha encomendado y organizamos a los miembros de nuestro cuórum o clase para llevar a cabo esa obra en nuestro hogar, en la Iglesia y en nuestra comunidad. Por ejemplo, planificamos cómo cumpliremos con nuestra función como integrantes del batallón de jóvenes del Señor para ayudar a congregar a Israel. En esas reuniones, no solo hablamos sobre la obra, sino que hacemos planes para llevarla a cabo.

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Hombres jóvenes en una clase

Sin embargo, este énfasis en la obra no quiere decir que dejamos los análisis sobre doctrina solo para la Escuela Dominical. De hecho, aprender doctrina en las reuniones de cuórum o de Mujeres Jóvenes es esencial, ya que nos ayuda a entender las razones por las que llevamos a cabo la obra. Al estudiar el Evangelio juntos, las verdades que aprendemos pueden cambiar nuestro corazón. Podemos recibir impresiones sobre formas de incrementar “en sabiduría, y en estatura y en gracia para con Dios y los hombres” (Lucas 2:52). A medida que lleguemos a estar más convertidos a Jesucristo y a Su evangelio, tendremos deseos de ayudar a los demás a avanzar por la senda de los convenios, incluso a nuestra familia, nuestros amigos y nuestros compañeros de cuórum o de clase.

¿Quién dirige estas reuniones?

Dios les ha llamado a ustedes como presidencias de cuórum y de clase, y les ha dado autoridad para liderar. Es por eso que toda reunión de su cuórum o clase la debe dirigir un miembro de la presidencia del cuórum o de la clase. Los líderes adultos deben ofrecer guía y apoyo, pero no deben hacerse cargo. Consulten la sección titulada “Deliberar en consejo” al principio de cada reseña de este recurso para encontrar ideas que les ayuden a saber cómo dirigir una reunión y lograr sus verdaderos propósitos. Utilicen las reuniones de presidencia para planificar cómo dirigirán esas reuniones dominicales.

¿Quién debe enseñar la lección?

Las lecciones las pueden enseñar los líderes adultos, un miembro de la presidencia del cuórum o de la clase, o cualquier otro miembro del cuórum o de la clase. Como presidencia de cuórum o de clase, consulten con los líderes adultos con respecto a quién se le debe asignar que enseñe las lecciones. Recuerden que sus líderes adultos tienen mucho que ofrecer; procuren aprender de su experiencia y su testimonio. El pedir a los jóvenes que enseñen también tiene ventajas, ya que el enseñar puede contribuir a profundizar su conversión y a forjar una relación más estrecha con los miembros del cuórum o de la clase. Por tanto, denles oportunidades apropiadas para enseñar toda la lección o parte de ella, pero tomen en cuenta las necesidades y la capacidad de las personas de su cuórum o clase. Por ejemplo, los líderes adultos podrían enseñar con mayor frecuencia en cuórums o clases integrados por jóvenes de menor edad o por jóvenes que tengan menos experiencia en enseñar el Evangelio. Cuando se invite a los jóvenes a enseñar, uno de sus padres o un asesor adulto debe ayudarles a prepararse según sea necesario.

Aquellos a quienes se les asigne enseñar pueden utilizar la sección titulada “Enseñar la doctrina” de cada reseña de este recurso para que les ayude a prepararse. Dicha sección contiene sugerencias para enseñar y hablar sobre la doctrina de esa semana, pero los maestros no deben sentirse limitados a esas sugerencias solamente. Según les indique el Espíritu, los maestros pueden adaptar esas ideas o utilizar ideas propias para enseñar de una manera que atienda mejor las necesidades de los miembros del cuórum o de la clase, y les ayude a entender la doctrina.

¿Qué temas doctrinales trataremos en nuestras reuniones?

El tema de la reseña de cada semana es un principio doctrinal que ha sido seleccionado para que vaya de acuerdo con la lectura de Doctrina y Convenios que se recomienda para esa semana, la cual se encuentra en Ven, sígueme — Para uso individual y familiar. De ese modo, los análisis doctrinales que tengan lugar en las reuniones de cuórum y de clase apoyarán lo que los jóvenes estén aprendiendo en casa.

Aun cuando las reseñas hayan de enseñarse en ciertos domingos específicos, se tiene la opción de analizar otros temas doctrinales según las necesidades del cuórum o de la clase.

Este recurso contiene reseñas para cada semana en la que se llevan a cabo reuniones de cuórum del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes. En ciertas ocasiones, quizá sea necesario omitir una lección debido a conferencias de estaca u otras razones.

¿Cuál es la función de nuestros líderes adultos?

Los líderes adultos tienen una función importante en los cuórums del Sacerdocio Aarónico y las clases de las Mujeres Jóvenes. Ellos les guiarán y asesorarán en sus llamamientos de liderazgo; les apoyarán y animarán conforme lleven a cabo la obra del cuórum o de la clase. Les enseñarán doctrina y les bendecirán mediante su ejemplo, experiencia y testimonio.