Doctrina y Convenios 2021
11 abril. ¿Cómo puedo invitar a todos a venir a Cristo? Doctrina y Convenios 30–36


“11 abril. ¿Cómo puedo invitar a todos a venir a Cristo? Doctrina y Convenios 30–36”, Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2021 (2020)

“11 abril. ¿Cómo puedo invitar a todos a venir a Cristo?”Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2021

Imagen
Hombres jóvenes mirando un teléfono

11 abril

¿Cómo puedo invitar a todos a venir a Cristo?

Doctrina y Convenios 30–36

Imagen
icono de deliberar en consejo

Deliberar en consejo

Dirigido por un miembro de la presidencia de cuórum o de clase; 10–20 minutos aproximadamente

Al principio de la reunión, reciten juntos el Lema de los cuórums del Sacerdocio Aarónico o el Lema de las Mujeres Jóvenes. Luego, además de deliberar en consejo sobre los asuntos específicos del cuórum o de la clase, podrían analizar las impresiones que recibieron y los temas que se trataron durante la conferencia general. Las siguientes preguntas podrían ayudar:

  • ¿Qué temas o mensajes nos llamaron la atención?

  • ¿Qué nos sentimos inspirados a hacer debido a lo que aprendimos o sentimos?

  • ¿Qué debemos hacer como cuórum o clase para seguir los consejos que escuchamos en la conferencia general?

Según sea apropiado, hagan lo siguiente al terminar la lección:

  • Testificar de los principios que se enseñaron.

  • Recordar a los miembros del cuórum o de la clase los planes y las invitaciones que se hicieron durante la reunión.

Imagen
icono de enseñar la doctrina

Enseñar la doctrina

Dirigido por un líder adulto o un(a) joven; 25–35 minutos aproximadamente

Prepárate espiritualmente

Apenas unos meses después de que la Iglesia restaurada se organizara el 6 de abril de 1830 en Fayette, Nueva York, el Señor comenzó a llamar misioneros para que recogieran a los “escogidos de los cuatro extremos de la tierra” (Doctrina y Convenios 33:6). Lo que comenzó como el esfuerzo de un puñado de nuevos conversos en un área geográfica limitada ha crecido hasta convertirse en un ejército de misioneros que proclaman el Evangelio en todo el mundo. Sin embargo, la obra misional no se limita a quienes sirven en misiones de tiempo completo. El Señor desea que cada uno de nosotros invitemos a quienes nos rodean a venir a Él.

¿Qué experiencias has tenido al invitar a otras personas a aprender acerca del evangelio del Salvador? ¿Qué puedes hacer para inspirar a los miembros del cuórum o de la clase a cumplir con su deber de traer almas a Jesucristo? Al prepararte para enseñar, considera leer “¿Cuál es mi objetivo como misionero?” en Predicad Mi Evangelio (2018, págs. 1–15) y el mensaje del élder Dieter F. Uchtdorf, “La obra misional: Compartir lo que guardan en el corazón”, Liahona, mayo de 2019, págs. 15–18).

Imagen
Mujeres jóvenes riendo

Al invitar a nuestros amigos a asistir a reuniones o actividades de la Iglesia, les ayudamos a aprender de Cristo.

Aprender juntos

Doctrina y Convenios 30–36 menciona el nombre de varias personas que fueron llamadas a servir en misiones en los primeros días de la Iglesia. Algunos días antes de la reunión, podrías dar a cada uno de los miembros del cuórum o de la clase uno de esos nombres (véase el encabezado de las secciones 30–36) e invitarles a averiguar qué consejo dio el Señor a esa persona para ayudarla a compartir el Evangelio. ¿Cómo podemos aplicar ese consejo a nosotros? Las siguientes ideas pueden inspirar aún más a quienes enseñas a que inviten a las personas que los rodean a venir a Cristo.

  • ¿Comprenden las personas a las que enseñas lo que significa venir a Cristo? Podrías pedirles que compartan sus pensamientos. Si te es útil, podrías compartir esta explicación: “Para venir al Salvador, las personas deben tener en Él la fe que produce el arrepentimiento y hacer los cambios necesarios para que su vida esté en armonía con las enseñanzas de Él” (Predicad Mi Evangelio, pág. 2). Los miembros del cuórum o de la clase también podrían leer pasajes de las Escrituras que contengan frases como “venid a mí” o “venid a Cristo” para responder esa pregunta; por ejemplo, Mateo 11:28–30; Omni 1:26; Moroni 10:32; Doctrina y Convenios 20:59. ¿Por qué queremos que las personas vengan a Cristo? ¿Cuáles son algunas cosas simples que podemos hacer para ayudarlas? Los miembros del cuórum o de la clase podrían hacer planes para invitar a alguien que conozcan a acercarse más a Cristo.

  • El escuchar cómo otras personas han compartido el Evangelio es una excelente manera de inspirar a quienes enseñas. Podrían ver uno o más de los videos que aparecen en “Recursos de apoyo” o invitar a los miembros del cuórum o de la clase a leer los consejos y los ejemplos que se mencionan en el mensaje de la hermana Cristina B. Franco, “Hallar gozo en compartir el Evangelio” (Liahona, noviembre de 2019, págs. 83–86). ¿Qué aprendemos de esos ejemplos? Analicen juntos qué podría hacer el cuórum o la clase para invitar a otras personas a venir a Cristo.

  • Cuando se trata de compartir el Evangelio, el élder Dieter F. Uchtdorf dijo que algunos de nosotros “[q]uizás no estamos seguros de cómo hacerlo, o nos sintamos tímidos de hacer algo con lo que no estamos familiarizados” (“La obra misional: Compartir lo que guardan en el corazón”, Liahona, mayo de 2019, pág. 16). Si los miembros del cuórum o de la clase se sienten de ese modo, las cinco sugerencias sencillas que el élder Uchtdorf dio en su mensaje podrían ayudarles. Podrías invitar a cada miembro de la clase a leer una de las sugerencias y a compartir lo que haya aprendido.

Actuar con fe

Insta a los miembros del cuórum o de la clase a meditar y anotar lo que harán para actuar de conformidad con las impresiones que hayan recibido el día de hoy. ¿En qué forma se relaciona la clase de hoy con las metas personales que se han puesto? Si lo desean, los miembros del cuórum o de la clase podrían compartir sus ideas.

Recursos de apoyo

  • 1 Timoteo 4:12 (Sé ejemplo de los creyentes)

  • Alma 17:2–4 (Los hijos de Mosíah se prepararon para compartir el Evangelio)

  • Doctrina y Convenios 42:6–7 (Predicar el Evangelio por el poder del Espíritu)

  • Russell M. Nelson y Wendy Nelson, “Juventud de Israel” (devocional mundial para los jóvenes, 3 de junio de 2018), suplemento de la revista Liahona, HopeofIsrael.ChurchofJesusChrist.org.

  • Videos: “Invitar a todos a venir a Cristo: Compartir el Evangelio”, Invitar a otros a ‘venir y ver’”, “Invitar a otros a ‘venir a ayudar’”, “Invitar a otros a ‘venir y quedarse’”, ChurchofJesusChrist.org

Enseñar a la manera del Salvador

El Salvador invitó a las personas a testificar de las verdades a fin de que el Espíritu pudiera tocarles el corazón. “¿[Q]uién decís que soy yo?”, preguntó Él. Al responder, el testimonio de Pedro se fortaleció: “¡Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente!” (Mateo 16:15–16). ¿De qué manera el compartir el Evangelio puede fortalecer el testimonio de los miembros del cuórum o de la clase?